El Colegio de Educación Primaria (CEIP) Santo Tomás de Villanueva de Ciudad Real realizó la pasada semana la ‘Semana de la Diversidad’, una iniciativa con el objetivo de concienciar al alumnado sobre derechos fundamentales tales como el derecho a la educación de calidad e inclusiva para todos. Una educación en la que primen los valores de cohesión social frente a los obstáculos.
Esta iniciativa ha partido del equipo de orientación del centro, compuesto de una trabajadora social y una orientadora, y ha contado desde el primer momento con el apoyo del AMPA, que ha fomentado la inserción de diversas asociaciones pertenecientes al Patronato de la Discapacidad del Ayuntamiento de Ciudad Real en el centro. “Concretamente han sido cuatro días en los que se ha trabajado con todos los grupos del colegio, desde infantil donde se ha trabajado en clase con dinámicas adaptadas a su edad, hasta sexto de primaria”, comentaba el director Enrique Alabau.
En este sentido, miembros de AUTRADE, DISCLAM, ONCE, FERSOMANCHA y Ciudad Accesible han impartido charlas en las que se han abordado los diferentes tipos de diversidad para posteriormente finalizar con un circuito de accesibilidad urbano y real, en el que los alumnos se han tenido que enfrentar a los distintos obstáculos que, en su vida diaria, se encuentran las personas con algún tipo de diversidad funcional. “El colegio, por sus características arquitectónicas y su antigüedad se ha prestado a esta práctica porque, desgraciadamente tiene muchas trabas naturales para las personas con discapacidad. Hasta el momento, no hemos tenido casos concretos de alumnos con algún tipo de diversidad funcional. Sin embargo, este hecho no nos hace permanecer impasible. Trabajamos a diario por tratar de sortear obstáculos tales como huecos, vallas, rampas…Sin embargo, la Administración es lenta para realizar estas mejoras y otras de mayor envergadura como por ejemplo dotar al edificio de un ascensor” manifestaba Alabau.
El director del CEIP lamentaba la ausencia de personalidades locales a alguna de las actividades realizadas durante estos días, aunque agradece el apoyo incuestionable prestado por el equipo perteneciente al Patronato Municipal de la Discapacidad.
“Creo que el objetivo se ha cumplido, que los alumnos se conciencien de que todos somos iguales. Son actividades que al principio cuestan, hasta ahora se habían venido realizando alguna charla esporádica de concienciación. Sin embargo, este año apostamos por prácticamente una semana. La actividad a nivel de consejo escolar y claustro está pendiente de valoración, pero apuesto por la positividad y que esta actividad se vuelva a realizar el próximo año para finalmente crear en el alumnado un hábito”, argumentó el director.
35 padres promueven ‘Me pongo en tu lugar’
El AMPA del centro ha sido determinante para poder desarrollar la actividad práctica. Para ello se ha contado con la implicación de 35 padres que realizaron el circuito urbano y estudiaron sus barreras para posteriormente trasladarlas en tan sólo quince minutes a los diferentes grupos de alumnos.
“Hemos hecho un circuito urbano dando la vuelta al colegio y tomando después como referencia un trozo de patio. Lo bueno es que en un espacio muy acotado nos hemos topado con un amplio abanico de obstáculos que sufren las personas con diversidad funcional”, argumenta una de las madres implicada en el proyecto.
En este sentido, el circuito se iniciaba con una rampa con problemas en el pavimento y una inclinación elevada como para que una persona en silla de ruedas o con dificultades motoras suba con autonomía y pueda salir a la calle sin dificultad. Una vez fuera, las personas en silla se topaban con una cabina de teléfono demasiado elevada como para llamar. Mientras, las personas con discapacidad visual se topaban con mobiliario urbano que entorpecía su trayecto. En mitad del circuito se explicaba las carencias en los pasos de peatones, con baldosas de botoneras para personas ciegas en los extremos, pero no en la mediana. También existía esa carencia de una línea guía que diera acceso para llegar al autobús. Posteriormente, los padres reparaban en los problemas en el pavimento del acceso al colegio, la problemática de los alcorques, a desnivel y sin tapar y nuevamente la rampa con mala inclinación que da acceso al edificio. Una vez dentro, informaban sobre la existencia de ayudas técnicas como rampas portátiles para sortear trabas de manera provisional. Dentro del patio, los niños que fueron simulando ceguera se topaban nuevamente con papeleras, mientras que los que iban el silla o muletas encontraban la dificultad en el acceso a la fuente de agua, por sus características y las condiciones del grifo.
“Hemos tratado que todos los niños simulen las diferentes diversidades funcionales. Los niños son verdaderas esponjas y en sus conclusiones ya nos han trasladado argumentos muy importantes como que la ciudad tiene que ser accesible para todos. Nos resulta muy interesante realizar actividades de este tipo porque es una manera de concienciar y ser capaces de saber que existe gente diferente y que cada uno de nosotros somos diferentes y tenemos dificultades diferentes”, prosiguen.
Ciudad Accesible
La asociación ciudadrealeña ‘Ciudad Accesible’ se ha congratulado de la actividad y apuesta por que se asienten en el tiempo. “Es difícil preparar una charla para setenta niños. Hacer que les sea amena y que interactúen, pero creo que lo hemos logrado y que a través del juego han aprendido”, afirmaba Cirila del Campo, máxima responsable de esta asociación. Además iniciativas de este tipo, consiguen detectar problemas dentro del propio colegio y solventarlos. “Detectamos el caso de una niña que tiene una enfermedad aún sin diagnosticar. Los médicos recomendaron primero que no saliera de casa. Posteriormente del aula, obligando a uno de sus compañeros a acompañarla durante el recreo. Desde Ciudad Accesible promovimos la cesión de una silla de ruedas adaptada a su edad, para que la pequeña pueda salir al recreo y con ese pequeño gesto hemos contribuido a que los médicos autoricen esa salida. Son estos hechos y la felicidad que vimos trasladada en la cara de la pequeña los que nos hacen seguir trabajando en la misma línea, la de conseguir una ciudad para todos”, concluía.
