La mayoría de los lectores de los textos incluidos en la sección “Desde el revés de la inopia” no conocen a su autor, como se puede obervar en muchos comentarios que acompañan a los artículos. Por cierto, el autor es lo de menos, lo importante es el contenido. Si hay acuerdo con los rasgos generales sería bueno mostrar los porqués y si hay desacuerdo igual. Decir desde el anonimato que el autor es rojo o azul, patético o brillante no lleva a ningún sitio.
Al lado de muchos lectores, llenos de certidumbre y poseedores de la verdad, yo siento con frecuencia todo lo contrario y pienso en “La ventolera”, reflexión del escritor uruguayo Eduardo Galeano (El libro de los abrazos, 1989): “Silba el viento dentro de mí. Estoy desnudo. Dueño de nada, dueño de nadie, ni siquiera dueño de mis certezas, soy mi cara en el viento, a contraviento, y soy el viento que me golpea la cara”.
Mis colaboraciones en el diario digital ciudadano micr.es se suceden todas las semanas desde mayo de 2015. Y esos textos, que deberían ser el centro del debate, sirven de lente en demasiadas ocasiones para juzgar al autor. Visto a través de ellos es creador de artículos estupendos o bien un imbécil, depende del cristal que se aplique. Sin embargo, esa situación, a veces incómoda, sirve para permanecer en pie, posibilita mantenerme erguido. Es decir, son los vientos contrarios los que permiten el equilibrio. Un viento dominante en una dirección terminaría por hacerme perder la estabilidad y caer.
Recuerdo que una idea similar expresaba el escritor sueco Per Olov Enquist en su magnífico libro Otra vida (2008) al recordar las críticas a una de sus obras. La biblioteca del capitán Nemo (1991), que según él mismo afirma le salvó la vida al apartarle del alcohol, es una verdadera joya literaria y Otra vida es una excelente memoria de la segunda mitad del siglo XX, además de presentar la conmovedora vida del escritor, desde su infancia hasta la tremenda lucha contra el alcoholismo. Ambos libros no se han traducido en España hasta el año pasado.
La crítica es necesaria, según creo, es la que hace moverse al mundo. La conformidad, el acomodo en lo sabido, la falta de perspectiva llevan a la inmovilidad y a la inacción. El siempre ha sido así y así seguirá siendo siempre, defendido por sectores tradicionalistas e integristas, así como el denominado pensamiento cómodo, aumentan el conservadurismo e impiden el avance social. Además, la mayor parte de los estudios sobre la ignorancia presentan una característica principal: induce a obrar en contra de los propios intereses, sin percibirlo siquiera.
Parte del problema es que en nuestro país los ejemplos que tenemos no son edificantes, ni los valores trasmitidos, ni las referencias personales aupadas al estrellato mediático. La crítica serena y reflexiva, la confrontación dialéctica ordenada, se cambian por debates que son pura basura en demasiadas ocasiones, llenos de insultos, de lugares comunes, de griteríos, de falta de respeto. Los tertulianos, presentados muchas veces como periodistas, son espejo de lo que no deberían ser. Por ejemplo, como decía Rosa María Artal (eldiario.es, 2.3.2015), “La sociedad no debería confundir con periodistas a los paniaguados que dictan su doctrina en la tertulias”. Hay mucho periodistas honestos y esforzados, por supuesto, pero muchas veces lo tienen difícil.
Los creadores de modelos colectivos como referencia se difuminan en nuestro país, con un presidente de gobierno, por ejemplo, que cambia constantemente la terminación ado por ao. En España las referencias de élites políticas, culturales o sociales son poco edificantes e inmersas en la mediocridad.
Como muestra puede servir ese presidente que lanza frecuentes estupideces. Recordemos algunas: “La cerámica de Talavera no es cosa menor, dicho de otra manera: es cosa mayor”, “Un vaso es un vaso y un plato es un plato”, “Porque después del año 14 viene el año 15”, “Nadie puede decir que el gobierno no ha gobernado y que el presidente no ha presidido”, “Valencia siempre fue Valencia”, “España es una gran nación y los españoles muy españoles y mucho españoles” o “Lo serio es ser serio”. Pero la que cuadra a la perfección con el personaje es esta: “Lo que nosotros hemos hecho, cosa que no hizo usted, es engañar a la gente”.
Y la persona que articula esas tontunas, dirigente del partido más corrupto y líder de la camarilla que mejor maneja el negocio de la corrupción, va a ser otra vez presidente del gobierno español. Claro, que las idiotas e insaciables élites económicas están muy contentas. Por fin funciona la gran coalición, aunque sea de forma vergonzante.
Isidro Sánchez
Desde el revés de la inopia
Me he dado por aludido, puesto que soy de los que le critican…pero jamás le tildaría de «imbécil», precisamente porque no le conozco.
Desconozco si es fiel a sus amigos, si es generoso, si es compasivo, si posee el don de la bondad y en general el conjunto de virtudes que comúnmente aceptadas por todos conforman lo que definimos a alguien como «buena persona», que al final es lo que queda y lo que importa.
A usted se le critica -o al menos yo- por lo que carece, que es de lo que presume: » la falta de perspectiva llevan a la inmovilidad y a la inacción» Más inmovilista que usted, defendiendo postulados izquierdistas ya caducos y obsoletos, que ni siquiera la izquierda defiende por entender que son de otro siglo, es su impronta semanal.
Pero es más: «defendido por sectores tradicionalistas e integristas, (no sabemos a quien se refiere) así como el denominado pensamiento cómodo, aumentan el conservadurismo e impiden el avance social»:
Afortunadamente en el ala derecha de la verdad no queda nadie tan tradicionalista e integrista que sea tan conservador en sus postulados como lo es usted con esa visión (o ceguera, según se mire) pseudomarxista que predica, que de haberse aplicado nos hubiera avocado a la pobreza más absoluta. Ejemplos sobran, pasados y presentes. La izquierda sigue siendo izquierda, pero no puede ser izquierda como en el Siglo XX, porque estamos en el XXI y el mundo es otro. Para un izquierdista tan tradicional y conservador e inmovilista como usted, esto es traicionar, bajarse los pantalones y bla bla bla. No, no es así. Otros tiempos. Sin más.
Créaselo, lo de las «élites» y toda esa parafernalia es un argumento vacío y fútil, criticar a Rajoy por su pronunciación, es pueril. Acepte que haya gente, como mínimo tan inteligente como usted que piensa lo contrario y quizá comprenda mejor, porqué piensan distinto a usted.
PD: Odio confundir el pensamiento de la persona con la persona en sí; doy por hecho que en su vida usted es más progresista y abierto de mente. Seguro!!
¿Y quien le ha dicho, sino usted mismo se ha dicho, u otros con su cara, que «los postulados de la izquierda están caducos y obsoletos»?Y, si no bastara esto para definirlo como «tan tradicionalista e integrista que es conservador en sus postulados con esta visión (o ceguera, según se mire)», he de decirle que «el mundo» no puede ser otro, a no ser que lo hayan cambiado, o haya cambiado la condición humana a alienígena, como parece ser la de usted, anónimo señor Letrado, que miente más que habla, desde el deshonesto pseudónimo para abajo, principio que debe adoptar cualquiera lo suficientemente decente como para aspirar a ser creído por lo que dice. Así que, por favor, «acepte que haya gente, como mínimo tan inteligente como usted, que piensa lo contrario, y quizá comprenda mejor por qué piensan distinto a usted» (arreglo su gramática incorrecta e improcedente, odioso señor).
Por demás, para que entienda, señor «Como mínimo tan inteligente como usted» que ignora, desconoce o no comprende la gramática la alusión que hago a usted como «Odioso señor», le dejo un pasaje de la comedia Tres sombreros de copa de Miguel Mihura:
https://www.youtube.com/watch?v=YqOJQH4PR18
El odio es muy antiguo Ángel. Generalmente lo genera la ignorancia, pero también la impotencia.
«No hay nada más antiguo que el hambre», Mejía dixit.
Como todo lo humano, es muy antiguo y biográfico, por éso dijo Terencio «Homo sum, humani nihil a me alienum puto».
Eres de latines como yo. No traduzco.
Gobernar con la legitimidad de las urnas es más respetable que agitar la calle porque en suma, se carece de ella.
En Democracia el respeto a las formas en período pos-electoral, está por encima del respeto a las ideas, que ya se han expresado en las urnas.
Como Historiador de la Época Contemporánea sabrá perfectamente que la evolución política de Occidente a lo largo del siglo XX, ha consistido esencialmente en superar y evitar la revolución y su guillotina.
Considero tradicional e integrista pensar que las ideas de uno deben imponerse a los resultados electorales, y más aún, a las reglas constitucionales de alternancia política.
Pensamos, argumentamos, no nos insultamos. DIALÉCTICA.
No digo yo que algún epíteto no merecido se le dedique. Ahora bien, que el más promiscuo nos de lecciones de virtud, es difícilmente tolerable. Desde este altar pulcro porque lo dice su inquilino, se denosta y ofende a muchos por pensar distinto. Cuando esto ocurre, se lo denomina libertad de expresión; si al contrario sucede, es ofensa y agravio.
Y eso se lo dices tú escondido -como yo- desde la caverna del Nick. Comprenderás que tus lecciones son como las mías…para mi y punto.
Dicho lo cual, tu amigo el Troll aprendió poco ayer. Cuando le dediqué un día exquisito a tratarle como él trata a los progresistas y, hoy, sigue escribiendo estupideces, cursiladas y barro que no lleva sino al enfrentamiento.
Él que usa enseguida la palabra odio, y que no ha hecho otra cosa que sembrarlo aquí.
Sois los dos iguales. Pero al menos, se agradece que a ti no se te haya ido la cabeza…del todo.
Un saludo afectuoso.
Lo tuyo es la kaleborroka, amenazas, insultos, no hay ideas,….cualquiera diria que tú no odias.
Pasa lo de siempree, para qué argumentar si un insulto, una amenaza, cumplen mejor el propósito de de imponerse.
Pues nada, cada uno está ya retratado.
Y sí, se ha roto el silencio frente a la ‘hegemonía’ cultural de la izquierda, y eso lo lleváis muy mal. No hay más que seguirte.
No confundas odio con agresividad. Si son agresivos conmigo, respondo, o qué esperabas, ¿ a un meapilas que es católico y moralmente tradicional?.
Aquí no hay más meapilas que el que usa la kaleborroka. Porque no tiene ni argumentos ni la realidad de su parte.
La impotencia es la que genera odio. Y yo os puedo.
Respecto al nick y el anonimato, el día que todos los que escriben lo hagan con su nombre, yo pondré el mío. Aunque, en mi opinión, se pueden decir barbaridades y estupideces bajo un seudónimo y con el nombre real; del mismo modo que se puede ser brillante y respetuoso, también, desde ambas posiciones. Tome nota Romera porque él es uno que critica a los concapuchón, siendo él un insultante de nombre real. Yo no acierto a ver su mérito en el demérito del anonimato, por ejemplo.
Aclarado lo anterior, yo no doy lecciones a nadie. Comento y opino. Nada más. Las lecciones de moral las da don Isidro todas las semanas. Y la moral de don Isidro queda patente semana tras semana. Él puede calificar a la derecha con infinitos adjetivos, todos ofensivos, pero cuando se le recuerdan las miserias de su ideología, las contradicciones y omisiones, siempre intencionadas, en su discurso, se enoja. Qué decir de la Iglesia, Católica siempre, objeto de vehementes ataques e invectivas. En fin, podría seguir, pero creo que queda claro que para don Isidro no compartir su criterio te convierte en un pobre diablo, en un ignorante inconsciente de su error, en un paria. Él no está equivocado, se equivoca el mundo. Él sabe lo que más conviene a la GENTE.
Intentaré remediar mis taras intelectuales con las lecturas que ilustran a los comunistas rodeacongresos a quienes tanto admira don Isidro: Ética de la Razón Pura, de Enmanuel Kant, y los Principios de la Filosofía Natural, donde Isaac Newton recoge los postulados de la Teoría de la Relatividad.
Las perogrulladas dialécticas marianas – un vaso es un vaso, etc.- son celebradas con gran entusiasmo por los periodistas calificándolas como fina ironía del presidente en funciones. Esperpéntico.
No se sulfure, Isidro, estos pobres diablos que sueltan sus diatribas contra usted semana tras semana deben tener graves problemas para comunicarse normalmente con sus semejantes. Su columna cumple con los parámetros de utilidad pública: les ahorra en psiquiatras un linar. En este mismo diario escribe gente del bando conservador con los que no suelo estar de acuerdo, pero a mi no se me ocurre llamarlos fachas o mentirosos. Me limito a leerlos de pasada y asunto concluido.
Nosotros en cambio los leemos con detenimiento. Quién sabe si alguna vez pueden aportarnos algo que desconocíamos.
Con Romera me pasa, también con Isidro cuando no ideologiza tanto sus artículos. Al fin y al cabo uno es profesor de literatura y otro de Historia, y algo se puede aprender…e incluso se puede contrastar.
Si, pero podían gastarse un poquito en psiquiatras. Porque cansinos y trolls son un rato.
Psiquiatra necesitas tú y ese que se autodefinia con Monedero, de psicópata marxista que haría sangrar a Marilo Montero.
Las feministas aún no lo han condenado….
Tú eres impotencia.
Estimado Sr. Isidro Sanchez,
Imagino que será pura retorica el preguntarse el porqué la gente lo tilda de un «color», no hay ni un solo articulo suyo que no se vea de qué pie cojea, mi buen señor…
Yo le voy a dar mis motivos de critica, algo que no haría si diera usted «una de cal y otra de arena», pero usar su profesión para soltar proclamas y mitines que repiten partidos como IU+Podemos+Juntos+Mareas+Ahora+etc+ymasetc. mintiendo sin contrastarlas como por ejemplo su final, cuando dice » dirigente del partido más corrupto y líder de la camarilla que mejor maneja el negocio de la corrupción» como le he dicho una infinidad de veces, miente, pero le repito, si quiere cuantificar la corrupción por el numero de imputados, es el PSOE, por cantidad supuestamente robada vuelve a ser el PSOE, por porcentaje de cargos imputados respecto a al numero de representantes electos es IU, (todo esto lo puse en el foro con números y porcentajes) por lo tanto, tanta reiteración en su error, ya no es un error, es un acto deliberado de mentir, luego es usted un mentiroso.
Muy de acuerdo con “La sociedad no debería confundir con periodistas a los paniaguados que dictan su doctrina en la tertulias”, apliquese el cuento.
Qué diver!
Don Isidro Sánchez se presento en las últimas elecciones municipales a concejal por Ganemos, y es el representante de este grupo en las reuniones sobre la memoria histórica.Con lo cual se ve de que pie cojea.