El Ayuntamiento de Ciudad Real «volvió a batir record» en la prontitud de pago a sus proveedores durante el mes de agosto, con un periodo medio negativo. Esto es, «se ha pagado a los proveedores de productos y servicios antes de terminar el plazo establecido para tramitar las facturas», asegura en una nota.
«El plazo establecido para la tramitación de las facturas es de 30 días y después se abre un plazo de otros 30 días para proceder al pago. Pues bien, lejos de los 60 días de plazo, los proveedores que han trabajado con el ayuntamiento han cobrado el dinero por el servicio prestado a los 29,95 días de haber presentado su factura electrónica, tal y como recogen los datos del Ministerio de Economía y Hacienda», sostiene.
Además de permitir que las empresas con las que trabaja el consistorio tengan más liquidez, estos reducidos plazos están generando ofertas para obras y suministros cada vez más competitivas en los precios, lo que generará a su vez un mayor ahorro en las arcas municipales.
En el mismo mes del año pasado, el periodo medio de pago del Ayuntamiento de Ciudad Real era de 10 días. «El consistorio vuelve a cumplir así de forma más que destacada con los plazos de pago a proveedores», concluye.
Y eso que CaLavero reniega de las leyes Montoro.