Ciudad Real y Hoyos del Espino en Ávila han estrechado sus lazos, dentro de las actividades socioculturales que se están promoviendo para que la Fiesta de la Pandorga sea declarada de Interés Turístico Nacional. La Hermandad de Pandorgos fueron embajadores de la ciudad en esta villa abulense dentro de sus Fiestas Patronales en Honor de Nuestra Señora del Espino.
El acto principal tuvo lugar en el Santuario Mariano de la Iglesia de Nuestra Señora del Espino, donde la Hermandad de Pandorgos ataviados con el “traje típico Manchego”, fue recibida por su párroco y las máximas autoridades de la localidad, encabezadas por su alcalde D. Jesús González Veneros a quien acompaño el ciudarrealeño Manuel Palomares, con especiales vínculos en la localidad.
En un acto sencillo en el Santuario y arropado por todos los vecinos que llenaron el mismo, el Pandorgo de Hogaño, José Luis Vendrell, se dirigió al pueblo en un emotivo discurso, donde tuvo unas palabras de agradecimiento a los asistentes y explicó brevemente el sentido de la Pandorga, la figura del Pandorgo y para acercar a los del Tormes con los del Guadiana, teniendo como devoción a la Virgen María, veneradas con las advocaciones de la Virgen del Espino y la Virgen del Prado, y teniendo como actos en común las tradicionales ofrendas de frutos y cosechas como resultado del trabajo desarrollado y bienes recibidos.
José Luis Vendrell exteriorizó en su discurso la singularidad de la tradición manchega dentro de España y el Mundo, exportando su gastronomía, sus costumbres, su cultura, y haciendo participes de ello a través de la llaneza del Nuestro Ingenioso Hidalgo y por ende Universal de nuestra Tierra, D. Quijote de la Mancha, envueltos con el cariño de su sencillo escudero, Sancho Panza.
Vendell mezcló en su discurso esos sencillos platos manchegos regados por sus caldos y haciendo mención a la “limoná”, con los locales: sus patatas revolconas, la “sopa de calducho” y no dejando hueco si se pone en hambre la ruta una buena espaldilla de ternera o sus truchas fritas. El discurso fue terminado con un alarde de amistad, cariño y hermandad, que recalcó como ejemplo de convivencia, teniendo al tiempo por testigo, que si no son buenos, se hacen más llevaderos y entrañables, procurando la felicidad entre los demás y terminando este con “vivas” a la Virgen de Nuestra Señora el Espino y la Virgen del Prado.
A continuación la Hermandad de Pandorgos y en representación del Ayuntamiento de Ciudad Real y de los ciudadrealeños, intercambió con la Corporación local, imágenes de la Vírgenes protagonistas, como rubrica de las palabras del Pandorgo de Hogaño. Acto seguido, el secretario de la Hermandad de Pandorgos, Vicente Castillo, leyó una carta de la Alcaldesa de Ciudad Real, Doña Pilar Zamora, excusando su presencia por motivos de fuerza mayor, al tiempo que agradecía a Hoyos del Espino su hospitalidad con los Pandorgos.
El presidente de la Hermandad, Agustín Cantero, entregó en nombre del Ayuntamiento, la tradicional Puerta de Toledo, como símbolo de la Ciudad y que fue recogida por su Alcalde. Acto seguido hizo entrega al Ayuntamiento de Hoyos del Espino por parte de la Hermandad de Pandorgos de la estatuilla del Pandorgo. El alcalde D. Jesús González agradeció en nombre de su pueblo, la presencia de estos manchegos en su villa, como algo tan importante como entrañable.
Posteriormente tuvo lugar la Santa Misa, precedida por la tradicional ofrenda de Flores y productos de la tierra y presidida por las advocaciones de Virgen del Espino y Virgen de Prado. Finalizada la misa tuvo lugar el traslado de la imagen a la Ermita de Nuestra Señora del Espino y que se encuentra en el centro del pueblo, arropado por la Corporación Municipal, Hermandad de Pandorgos y los ciudadanos de la villa.
A la Llegada a la Ermita tuvo lugar la tradicional subasta de “banzos”, continuando con los distintos actos socioculturales. Entre ellos la Hermandad de Pandorgos y ya con chambra, boina y garrote en mano realizó unas migas manchegas y unas gachas que fueron regadas con una fresquita “limoná” y que los “hoyancos” (gentilicio de los locales) apreciaron de buen gusto.
¿Siglo XVIII?
Si la renovación la tienen que encarnar los Pandorgos, cuyo prestigio y representatividad son perfectamente descriptibles, que Dios nos pille confesados.
Quien pensara que la actual corporación iba a romper con estos atavismos, que se vaya olvidando.
Ah, y un capón con nudillo a este digital por el alarde tipográfico que le dedican a tamaña chorrada. Un poco de proporcionalidad no les vendría mal.
A los de los mensajes anteriores a lo mejor les habría parecido mejor que los pandorgos hubiesen ido disfrazados de regetoneros y que en ese pueblo de Ávila se hubiese organizado un botellón en su honor.
A ver si os ubicáis, que andáis un poco perdidos.
No pega pandorgo, con regetón y botellon. Pega con limonada, puñao y mantoncillo. No te equivoques aunque vagas de griego solemne.