Jesús Millán Muñoz.- 0. ¿Qué es la soledad? ¿Existe una soledad buena y otra menos buena? ¿Se está convirtiendo la soledad en una especie de pandemia en las sociedades desarrolladas? ¿Se produce a y en todas las edades? ¿Existen tipos diferentes de soledad? ¿Qué nos han dicho a lo largo de la historia los pensadores y escritores? ¿Te sientes tú solo o sola más de la cuenta…?
1. Podríamos definir la soledad como sentirse solo o sola, sin desear y sin querer sentirse solo o sola.
Se puede producir a y en todas las edades, por unas razones o por otras.
Hay que distinguir la soledad en sentido estricto, la que se siente y está solo en mayor o menor grado, o la persona que siente o se siente en soledad pero no lo está tanto.
Según algunos estudios se considera que hoy hay una persona de cada cuatro que siente y que vive en soledad. Lo cual es una cifra muy alta.
Parece ser que la soledad eleva el nivel de cortisol que es una hormona del estrés, desciende algunos niveles del sistema inmunitario, en algunas personas se producen los microdespertares en la noche y se levantan agotadas…
Casi siempre la soledad va acompañada de un cierto grado de tristeza, a veces, de irritabilidad.
Según algunos estudios la soledad incrementa las probabilidades de mortalidad.
Aumentar las relaciones sociales hace funcionar de forma adecuada el ritmo y la presión arterial.
Las redes sociales en cierto modo hacen disminuir la soledad o pueden hacerlo si se saben utilizar de forma correcta.
La soledad se está convirtiendo en un problema de salud pública en las sociedades occidentales y desarrolladas. Entre otros motivos han disminuido el número de hijos, éstos pueden estar viviendo en otras ciudades que los padres, generalmente ancianos, alguno de los padres ha podido ya fallecer y queda otro solo y en soledad, disminuyen muchos los contactos sociales y las amistades cuando se deja de trabajar, la moralidad ha disminuido posiblemente mucho en todos los entornos sociales, por lo cual, no se llevan unas normas de comportamiento y educativas mínimas, al menos muchas veces…
Se suele dividir la soledad en tres tipos: la soledad buscada, porque se desea y se está haciendo una prueba o experiencia o experimento, por ejemplo retirarse unas semanas a un monasterio a estar en soledad consigo mismo. El segundo grupo sería la soledad temporal debida a una enfermedad o un accidente, por lo cual, diríamos es un tiempo limitado, hasta que se produce la terapia, en general, es un tiempo de soledad limitado en el espacio y en el tiempo y también solo se produce la soledad del ambiente de trabajo o del ocio social. El tercero sería la soledad emocional o alejamiento social sin que el individuo lo quiera o lo desee, sea por una razón o por otra, porque el individuo sea rechazado, por ejemplo, al cambiar de pueblo y escuela y no tiene amigos, o porque ya tiene una edad que han ido falleciendo sus amistades, su conyugue, sus hijos se han marchado a otras ciudades, o no los pueden visitar tanto, porque ha existido una muerte en su propia familia, por ejemplo, la muerte de un hijo, etc.
Entre los consejos que se dan para combatir a la soledad: es buscarse hobbies y entretenimientos, seguir trabajando laboralmente el mayor tiempo posible, es buscarse obligaciones que sean buenas para uno mismo, para la propia familia, para la sociedad, es ayudar a los hijos con los nietos, realizar actividades que sean buenas para la sociedad, utilizar de forma correcta los medios de comunicación social, continuar aprendiendo cosas, realizar actividades que durante toda la existencia has querido hacer y las tienes aparcadas, siempre que sean positivas, no angustiarse demasiado, vivir la vida con sosiego y tranquilidad y mesura y no con angustia, ser racional y moral en todo acontecimiento, realizar un deporte adecuado, analizarse de forma correcta y recordar cosas de la vida de forma correcta y adecuada…
2. Sobre la soledad se han indicado muchas definiciones y descripciones desde los campos empíricos o intuitivos o experienciales o vivenciales:
– Para pensar y observar y pensarse y observarse se necesita un cierto grado de soledad y de silencio, soledad y silencio tanto interior como exterior.
– Quizás estemos tan ocupados en recibir tanta información de todo tipo del exterior y del interior, que no dejamos al interior a que se exprese.
– Hay que aprender a habitarse a sí mismo, aprenderse a estar con uno mismo, siguiendo la idea de Benito de Nursia.
– Como especie somos seres que necesitamos a otros seres humanos.
– Es mejor estar en soledad que estar haciendo el mal o estar maquinando el mal.
– No hables mal de nadie te evitará muchos problemas con otras personas, y tendrás menos soledad.
– Que el temor a la soledad o a no estar solo no te lleve a realizar cosas que no son convenientes, ni buenas, ni positivas o no morales, o estar con compañías que no son las correctas o moralmente buenas o adecuadas.
– A veces, puedes estar con otra u otras personas y te sientes solo y en soledad. Cosa que es un drama en muchos sentidos.
– Más vale estar solo que con personas que te pueden incentivar al mal.
– Deja un tiempo cada día para estar contigo y en ti.
– Toda persona lleva sus traumas y heridas, pero también sus alegrías y sus felicidades. Hay que vivir con ambas, esa es la vida humana.
– Hay que guardar un equilibrio entre la autonomía de la soledad y la necesidad de estar con los demás.
– Consultar con especialistas si se tiene una enorme tristeza y soledad (médicos, psicólogos, terapeutas…).
– Etc.
3. ¿Quizás deberíamos admitir y plantearnos que una soledad bien llevada puede ser positiva en algunos aspectos, siempre que no sea una soledad exagerada o exacerbada, sería como soportar un día de lluvia sin paraguas, soportarlo lo mejor posible, hasta que llegue el día siguiente y ya exista menos lluvia? ¿Por tanto, intentar aprender y aprehender cosas buenas y positivas de la soledad, siempre que la tengamos y padezcamos y suframos, pero al mismo tiempo, intentar salir de ella…? ¡Quizás llevar un horario diario flexible de actividades, puede ayudar mucho para rellenar el tiempo de forma equilibrada y armoniosa y práctica y eficiente y positiva!
