Con la finalidad de que buceen en la obra de dos grandes genios de la literatura universal teniendo como pretexto el cuarto centenario de su muerte, el escritor, poeta y periodista Manuel Juliá ha trasladado hoy a casi un centenar de alumnos de primero de Bachillerato del Instituto de Secundaria Santa María de Alarcos, su pasión por Miguel de Cervantes y William Shakespeare.
En la conferencia titulada ‘Cervantes y Shakespeare, la vida en la literatura’, organizada por el departamento de inglés del centro ciudadrealeño, Juliá ha acercado a los bachilleres las grandes hazañas de estos insignes escritores concretadas en el desarrollo de las pasiones y caracteres humanos en el caso del autor inglés, y de las historias y universos todavía vigentes de nuestro escritor más universal.
En la charla ha puesto de relieve la importancia de la literatura en dos autores, en los que se han mirado posteriormente todos los demás escritores e incluso los personajes posteriores de la literatura shakesperiana o cervantina, como Dickens, Dostoievski o Tolstoi. El escritor ha transmitido la “sabiduría y belleza” que encierra la obra de Shakespeare y Cervantes, “válida para la propia vida de los alumnos, con episodios tan claros como las máximas de El Quijote”. En este sentido, ha agregado que con los tiempos actuales, de sociedad del espectáculo, “un buen antídoto contra la banalidad y la superficialidad son Cervantes y Shakespeare, la vida está en ellos, y ellos supieron llevarla a sus libros”.
En primer lugar, ha abordado la vida y obra de Shakespeare y la capacidad de generar 200 caracteres o pasiones humanas como el amor con Romeo y Julieta, la envidia, los celos con Otelo… También ha elogiado la gran brillantez poética de los sonetos de Shakespeare, “para mí lo mejor que se ha escrito en poesía, son interminables en su riqueza”.
Sin pretender instruir sobre estos grandes escritores de los que ya se ha escrito y hablado, ha indicado que Cervantes es el escritor de la historia que más está en su obra. Los libros de caballería es una crítica a la literatura de aquellos tiempos, “integraba la vida en sus libros”.
Manuel Juliá ha contado asimismo a los escolares cómo estos dos escritores coetáneos se interesaron por la obra del otro, al menos se conoce que el autor inglés leyó El Quijote y ‘Los dos hidalgos de Verona’ está inspirado en ‘La Diana de Montemayor”. Crea incluso un personaje que se llama Falstaff a imagen y semejanza de Sancho Panza.
Y si aún con todo lo contado y leído los alumnos no se arrancan a la lectura, Manuel Juliá ha agotado su último cartucho contando que para el escritor Gabriel García Márquez la lectura obligada de El Quijote supuso al principio una purga hasta que un amigo le indicó que aprovechara las visitas al excusado para deleitarse con el libro y así lo hizo, descubriendo unos horizontes y aventuras maravillosos.
El orador ha sido presentado por el director del instituto, Julio Gómez, quien ha resaltado el carácter “multifacético” del conferenciante, dedicado a las letras pero también al mundo empresarial como director de FENAVIN desde 1999. En la organización del acto también ha participado Nieves Sarabia, entre otros profesores del centro educativo de la capital ciudadrealeña.
Por último, preguntado por los fastos del cuarto centenario de la muerte de Cervantes, Juliá ha confesado que, en su opinión, “falta literatura, es decir, más cervantistas y escritores presentes en nuestra tierra porque, lejos de ser una realidad turística, un personaje o una realidad escenográfica, Cervantes es ante todo un escritor”. Ha citado el caso específico del gran escritor Paul Auster que todos los años dedica un tiempo a leer El Quijote en español. Para intentar equilibrar la “realidad esencial de calidad frente a la tangencial de vanagloria y efectos especiales”, la Diputación de Ciudad Real y él mismo, desde la modestia presupuestaria, preparan las jornadas ‘Encuentros con Cervantes en un lugar de la Mancha’.