El interventor general de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Francisco Javier Martín, ha resaltado hoy que la creación de la Oficina de Contratación del sector público regional posibilita una mejor coordinación en esta materia, ya que se constituye como un único órgano del que dependerán todas las unidades de contratación de las distintas consejerías.
Martín se ha referido a esta iniciativa en materia de contratación centralizada en Castilla-la Mancha durante su intervención en una de las mesas redondas que se han celebrado en el transcurso de la IV Jornada de auditoría del sector público, organizada hoy por la Corporación de Auditores del Consejo General de Economistas en Madrid.
En esta mesa redonda, en la que se han analizado los riesgos de la contratación pública, el interventor general ha repasado los principales problemas en esta materia, que se producen tanto en la fase de preparación y adjudicación de los contratos públicos como en la ejecución de los mismos.
En este sentido ha analizado la problemática que supone el fraccionamiento de los contratos, la conculcación de los principios de publicidad y concurrencia y los sobrecostes en la ejecución de los contratos públicos.
Martín también ha destacado el papel de las intervenciones generales en los aspectos de control en materia de contratación pública y la complejidad normativa de esta materia, que hace que se intensifiquen los controles en las fases previas a la adjudicación, así como en la propia adjudicación, pero que no reserva un papel tan intenso en las fases de ejecución de los contratos.
La oficina de contratación del sector público regional en Castilla-La Mancha supone la profesionalización de la gestión de la contratación pública, potencia la transparencia y concurrencia en la contratación pública, aumenta la seguridad jurídica de los licitadores al establecerse un interlocutor único en materia de contratación y posibilita un control riguroso de la actividad contractual de los entes del sector público regional.