Los presupuestos de Castilla-La Mancha para este año ascenderán a un total de 8.420 millones de euros, 215 millones de euros más que en 2015, lo que supone un incremento del 2,6 por ciento. Así lo ha avanzado el vicepresidente del Gobierno regional, José Luis Martínez Guijarro, en una rueda de prensa junto al presidente regional, Emiliano García-Page; el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina; el secretario regional de Podemos, José García Molina; y la portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Blanca Fernández.
Martínez Guijarro ha destacado que uno de los pilares fundamentales es la recuperación del empleo público. Así, a lo largo de la legislatura se crearán 6.600 plazas de empleo público, de las cuales 1.755 serán para 2016. “1.042 para Sanidad, 404 para Educación, 120 serán para Empleo y 189 para la recuperación de funcionarios en la Administración General”, ha señalado.
Políticas de emergencia ciudadana
En cuanto a las partidas destinadas a políticas de emergencia ciudadana, el vicepresidente regional ha indicado que serán un total de 629 millones de euros los que se destinen a este fin, 129 millones más que la cantidad que se estipulaba en el acuerdo de investidura.
En materia sanitaria, el vicepresidente regional ha informado que existe un compromiso de reducción de casi un 8% del presupuesto que se destina a la sanidad concertada con respecto al gasto efectuado en el 2014. “Las derivaciones a la sanidad privada nunca tienen que sustituir servicios públicos, se tienen que prestar cuando los centros propios estén a pleno rendimiento y no se puedan atender a más pacientes”, ha dicho.
De hecho, cada tres meses se remitirá a la Cortes de Castilla-La Mancha un informe de todas las derivaciones que se hayan efectuado.
Reducción de las ratios
Por otro lado, en materia educativa, Martínez Guijarro ha subrayado que el compromiso del Gobierno del presidente Emiliano García-Page es ir reduciendo la financiación pública a la educación concertada.
Del mismo modo, se trabajará a lo largo de la legislatura para reducir las ratios de alumnos en todos los niveles educativos hasta llegar al final de la legislatura en 25 alumnos en Educación Infantil y Primaria, 30 en Educación Secundaria y 32 en Bachillerato.
García-Page presenta unos presupuestos con los que “gana la sanidad, la educación, la gente que peor lo está pasando” y aquellos que quieren generar riqueza
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page ha presentado este lunes las líneas generales de la Ley de Presupuestos 2016; unos presupuestos con los que “gana mucho el sector público, gana la sanidad, la educación, la gente que peor lo está pasando” y aquellas personas que “tienen muy claro que quieren hacer riqueza pero que eso va unido a la rueda de la igualdad social”.
En este sentido, el presidente del Ejecutivo autonómico ha valorado el acuerdo alcanzado entre los grupos parlamentarios Socialista y Podemos sobre la Ley de Presupuestos regionales para el presente año y que será ratificado este martes por el Consejo de Gobierno antes de comenzar su trámite parlamentario.
Tal y como ha subrayado el presidente García-Page, el presupuesto regional “no sólo frena la hemorragia” creada en los últimos cuatro años, “sino que sienta las bases de una recuperación social y económica notable”, además de que “servirá para crear empleo y riqueza”.
García-Page ha asegurado que, gracias al acuerdo “franco y sincero” entre ambas formaciones “vamos a tener crecimiento económico”; una mejoría en la salud de nuestra economía que, en cualquier caso, irá “de la mano del crecimiento y la recuperación social”.
En este punto, Emiliano García-Page se ha referido a los presupuestos ejecutados por el anterior Ejecutivo autonómico; unas cuentas regionales, ha lamentado, que supusieron la liquidación de “miles y miles de puestos de trabajo”, además de innumerables “servicios públicos y sociales”. De hecho, ha explicado, de no haberse producido el cambio tras las elecciones autonómicas de mayo de 2015, se habrían generado más “despidos públicos” y se habría propiciado “un presupuesto con muchas más derivaciones a la sanidad privada de Madrid”, con un “modelo extraño y experimental en el ámbito educativo” y con “un desabastecimiento de las despensas sociales verdaderamente increíble”.
Como contrapunto, García-Page ha aludido al proyecto de Presupuestos 2016 que ha calificado de “buen presupuesto”; un documento para cuya confección se ha tenido en cuenta “qué gente, qué intereses, qué espíritu estaba detrás de cada cifra”.
Del mismo modo, ha hecho balance de los siete meses de legislatura transcurridos hasta el momento, subrayando como principal objetivo cumplido “parar la hemorragia” creada por el anterior Ejecutivo autonómico, gracias al cambio de gobierno; una “brecha”, ha explicado, a la que “hemos echado mucha argamasa”.
Con todo, García-Page ha subrayado que “éste es el presupuesto que podemos” y ha adelantado que el presupuesto de 2017 será “más claro todavía y el siguiente mucho mejor”. El de 2016 “es el mejor que se puede, posible, riguroso… que no lo va a poder recurrir Montoro”, ha asegurado en referencia al ministro de Economía en funciones.
Del mismo modo ha defendido que el acuerdo suscrito con Podemos es un “buen ejemplo en España de que se pueden cambiar las cosas de raíz pero sin romper nada”; un modelo que, ha recalcado, podría ser imitado en otras regiones, pone de manifiesto un “acuerdo sensato” que “no está hecho contra nadie” y que podría contribuir a “desdramatizar” el escenario de acuerdos a nivel nacional.
La ignorancia es muy atrevida. Y me temo que estas propuestas, aderezadas con recortes en las instituciones de titularidad privada católica de servicio público, como centros educativos y residencias de mayores son el cheque que pide podemos. En definitiva, el programa de podemos es arremeter contra la Iglesia, porque saben que el modelo político que sostienen no es viable y deben justificarlo cuestionando la misión de la Iglesia. Son tiempos recios, que decía Santa Teresa y pasarán …
Va a ampliar el déficit en una región ya endeudada hasta los dientes y con un sistema productivo del que ya sabemos sus limitaciones. Patada hacia delante. Antes o después habrá que pagarlo. No olviden a los griegos.
La reducción de la enseñanza concertada, más barata, es positiva cuando se puede pagar. No es el caso. Los costes de la ideología.
Los iraníes siguen en sus cosas