La directora gerente del SESCAM, Regina Leal, ha adelantado hoy que los objetivos del Gobierno de Castilla-La Mancha para la presente legislatura pasan por reducir el tiempo medio que deben esperar los pacientes para ser atendidos en atención especializada así como mejorar la información que reciben los usuarios de la sanidad pública acerca de sus procesos asistenciales pendientes.
Leal, que ha comparecido en la Comisión de Sanidad de las Cortes Regionales, ha recordado que el primer reto tuvo que abordar la nueva dirección de la Consejería de Sanidad y del SESCAM respecto a las listas de espera fue hacer que la transparencia y la información formaran parte de la normalidad con la que los ciudadanos acceden al sistema sanitario “después de cuatro años en que ese derecho había sido usurpado por el anterior Gobierno”.
Y, por otra parte, desarrollar un plan de abordaje para la disminución de las listas de espera hospitalaria e ir recuperando, a lo largo de la legislatura, las garantías efectivas de tiempos máximos de espera para que nadie tenga que esperar más de 20 días para una prueba diagnóstica, 30 para una consulta y 90 para una intervención quirúrgica.
Respecto a la primera cuestión, la directora gerente del SESCAM ha mencionado la puesta en marcha del Portal de Transparencia y Salud, a través del cual se articula el derecho de acceso a la información pública, generando total transparencia a la hora de explicar la gestión realizada, los resultados conseguidos y los recursos empleados.
“Entendemos que en el ámbito de la sanidad, la rendición de cuentas es una cuestión de legitimidad e identidad y al mismo tiempo, responde al principio de transparencia al que deben someterse las instituciones al servicio de la sociedad”, ha explicado Leal. En este sentido, ha apuntado que el Gobierno regional no va a permitir que se vuelvan a repetir situaciones como las pasadas, en donde durante un año entero no se publicaron los datos de lista de espera.
Y es que según ha argumentado la gerente del SESCAM, “ocultar” las listas de espera durante el periodo de tiempo que iba de 2012 a 2013 tenía como objetivo “ocultar unos datos extremadamente negativos y que han sido los peores datos en lista de espera del sistema sanitario de Castilla-La Mancha”, ya que al cierre de 2012 se llegó a alcanzar los 180.000 pacientes en lista de espera.
Tres meses de bajada
Por otra parte, ha señalado que tal y como reflejan los datos recogidos en el Portal de Transparencia y Salud, la evolución mensual reciente indica que en el mes de octubre de 2015 –momento en el que los nuevos equipos directivos de los centros asumen la gestión de las listas de espera–, el número de pacientes en espera era de 144.140, asistiendo a un descenso significativo de unas 15.000 personas al cierre del pasado ejercicio, situándose la cifra global en 128.973 pacientes.
La lista de espera quirúrgica entre octubre y diciembre de 2015 ha pasado de 40.566 a 40.187 pacientes, con una reducción de 379 personas; la de consultas de 83.911 a 73.198, con una bajada de 10.713 pacientes; y la de técnicas diagnósticas se redujo en 4.075 personas, pasando de 19.663 a 15.588.
Una situación a la que se ha llegado, según ha apuntado Leal, habiendo reducido al máximo las derivaciones de pacientes a clínicas privadas de otras comunidades autónomas. En este punto, ha recordado que en 2014 los anteriores gestores sanitarios derivaron 9.542 pacientes y en 2015 se contabilizaron 7.351, un 84% de los cuales se realizaron en el primer semestre y solo un 15% en el segundo, con el nuevo Gobierno. En lo que va de 2016 no se ha hecho ninguna derivación quirúrgica.
Reducir los tiempos medios
A pesar de que la evolución de las listas de espera en los últimos meses ha sido positiva, el Gobierno de Castilla-La Mancha va a seguir trabajando con la misma intensidad e interés para conseguir reducirlas y, sobre todo, alcanzar el ideal de tiempo razonable en espera para los ciudadanos. “Reducir el número de personas en lista de espera tiene una gran importancia, pero entendemos que lo principal es la reducción de los tiempos de espera así como el uso y optimización de los recursos públicos”, ha apuntado.
En este sentido, ha indicado que frente a la política desarrollada en la anterior legislatura, el modelo de gestión del actual Ejecutivo pasar por tener plenamente operativo nuestro sistema de salud “y en los casos que veamos que estamos a pleno rendimiento y hace falta más atención nos plantearemos utilizar recursos externos, pero solo en situaciones ocasionales y siempre de Castilla-La Mancha”, ha precisado.
La directora gerente del SESCAM ha explicado, a este respecto, que a cierre de 2015 había un 3,1% más de camas funcionantes que en 2014; se ha incrementado el tiempo de horas de quirófano disponible, pasando de 170.461 a 174.045; y también ha crecido el número de consultas en más de 7.000.
Como futuras líneas de actuación ha mencionado seguir aumentando la actividad de los centros sanitarios con “pactos realistas” por servicios y prolongando la jornada de trabajo más allá del horario de mañana; y aumentar la capacidad de resolución de Atención Primaria, permitiendo su acceso a pruebas diagnósticas, así como trabajar en criterios de inclusión en lista de espera normalizados para toda la comunidad.
Asimismo, el SESCAM está trabajando en la mejora de los sistemas de información para que el profesional sanitario tenga acceso a todas las pruebas realizadas al paciente y evitar así duplicidades. También se están diseñando cuadernos de mando fiable para que los equipos directivos puedan abordar y conocer mejor la situación de las listas de espera, así como un programa formativo a los profesionales en la creación de unidades de gestión clínica.
Igualmente, se abordará el incremento de los recursos humanos, habiéndose iniciado ya la contratación de los 311 profesionales aprobados recientemente y a los que se unirán próximamente otros 150, todos ellos facultativos. Otra de las líneas de acción será la puesta en marcha de un plan de renovación tecnológica en todos los centros, y del que ya se ha hecho un anticipo en lo que va de legislatura por un importe de unos 3 millones de euros.
Finalmente, ha insistido en la importancia de mejorar la información que reciben los usuarios sobre sus procesos asistenciales pendientes. “Si se informa bien de la espera, si se explica bien la previsión de ese proceso, si se anuncia de forma transparente y comprometida sobre los tiempos de espera se ayuda al paciente a asimilar mejor ese tiempo y a tolerarlo de mejor forma”, ha concluido.