«Si es de aquí, no va a ninguna parte» es el paradójico endecasílabo que nos define y nos mata. El español, sea lo que sea lo que designe esta palabra, siempre ha sido servil y mansurrón. Cualquiera que eche una mirada atrás a su historia y su cultura no parará de ver hitos de domesticidad por un camino ancho y real.
No hizo revolución alguna, no aportó nada a la evolución social, más bien se empeñó en retrasarla y, de haber sido posible, la habría destruido. Cuando intentó hacerla, descreyó de ella, la perdió o la transformó en una involución, tanto desde el punto de vista social (Comuneros, 1812, 1820, 1868) como cultural (fracaso del Renacimiento, de la Ilustración, de la Institución Libre de Enseñanza, del Regeneracionismo). La literatura no hace sino confirmarlo. Ese «buen vasallo» que era el Cid, siempre en busca de un «buen señor» a quien «servir», se postraba ante el rey en sumisión rastrera, incluso mordiendo las yerbas del suelo como una oveja:
Las yerbas del campo a dientes las tomó (v. 2022)
Pese a lo cual prefiero a un militar como el Cid, amigo del mudéjar «moro de paz» (así lo llama el cantar de gesta) Abengalbón, que a uno de sus admiradores que nunca se lo leyó, F. F., más amigo de otro tipo de moros. El Cid nunca se habría levantado contra la autoridad, como un vulgar matón, delincuente, sinvergüenza o pepeíta saqueador. Si hubiera visto a una fiera, la habría conducido a su jaula como condujo al león. Era una época con sentido del honor, no con lo que había entonces y vuelve ahora, gracias principalmente al pepeísmo y a los psoeteros.
Poco tiempo después, en España empezó a ser una heroicidad hacer lo correcto (véase Quijote). El Siglo de Oro es el cierre de una época, no anuncia Nada. Porque Nada debe Europa después a esta España mariana, obediente, senequista, esclava, servil, «amante de su rey», como decía Vives, si mal no recuerdo, uno de tantos exiliados de mala gana, como Blanco White o nuestros manchegos Juan Calderón y Félix Mejía. Porque nuestro país expulsó siempre a todos sus herejes, heterodoxos, perfeccionistas, anticorruptelas o simplemente gente estudiosa a Europa y América y siempre dejó en su seno a lo más tontaina, paleto, vulgar, pueblerino, servil, pesetero y sin idiomas (que eso de los idiomas desnaturaliza mucho). Ahora buscan un rector para su poco universal universidad, donde son escasísimas las cátedras conferidas a extranjeros. Es «natural», o aldeano, si prefieren: si nuestros valiosos se hubieran quedado habrían terminado en humo o se habrían quedado en los huesos por consunción, hambre o ninguneo, o con tiro de gracia entre ceja y ceja, que en España solo ofende lo que hay de cejas para arriba. Porque el nacionalismo unicista y desintegrador, al modo que aquí se entiende, siempre ha sido un buen fuego para consumirnos, hasta el punto de que lo que queda de España es solamente eso: cenizas.
El pueblo español es esos palurdos que se ofrecieron a tirar del carromato de Fernando VII como burros (y tal vez lo eran), queriendo significar a su entrada en Madrid cuánto se alegraban de volver a ser serviles tras la Constitución de Cádiz. En España nunca hubo un socialismo que llegara verdaderamente al poder porque lo usurparon pijos como el hermoso Barreditas de Famosa; pero también porque aquí todo el pueblo era de derechas, con coletas, moños o tirabuzones, y más papero y pepero que el papa, porque de la papa se come y del Pepe se pilla que es la repepera.
En noviembre de 1976 solo hubo un pueblo en toda España que votó por perpetuar el franquismo, y era manchego: Consuegra. En todo el epigastrio de Castilla-La Mancha. Un lugar hundido a los pies de castillos en el aire y molinos de viento por lo más alto. Sobre este hecho escribió un hermoso libro la periodista Mariángeles Arazo, El libro negro de Consuegra (Madrid: Sedmay S. A., 1977), que, para variar, he comprado por un euro en una librería de viejo (es el único lugar donde encontrar la España real). Qué miedo tenían los del pueblo, a quienes llama la autora chuscamente, tomándolo del periodista Cándido, «los últimos de Consuegra». Un miedo que crea más mentiras, sistemas delirantes, mariconerías e idioteces que un seminario conciliar, un sistema para grabar hombres como si fueran discos de vinilo hasta que se rayan o se vuelven santos. Frases de los consaburenses: «Mi única doctrina es vender: terminar de pagar el chalet y que no nos falte de nada… ¡Que me vengan ahora con el socialismo ese!». Viene una espectacular imagen de un monumento con los nombres de 69 religiosos fusilados del bando que empezó la guerra… y ninguno, como ocurre en toda España, a los fusilados demócratas antes y después de la guerra por el bando vencedor. Y paro de escribir. Hay tanto que escribir…
Contornos
Ángel Romera
http://diariodelendriago.blogspot.com.es/
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Estos batiburrillos en los que igual cabe uno que otro. Puff. Brindis al sol. Eso en un país con dos guerras civiles y media en los últimos dos siglos, varias revoluciones, el movimiento anarquista más fuerte de Europa. En fin, los hechos no son románticos, brindemos por la ficción y el mito. «Span is different», lo que sabía Paquillo
El pueblo español es cobarde (no hay mas que ver cuantos comentan en el foro bajo anonimato), envidioso (el izquierdismo que no la izquierda es dominante), pero sobre todo cainita, donde es constante la calumnia.
Dado a la demogresca, porque ni sabe ni ha vivido en democracia.
Pero creo que es un pueblo muy honorable, quizás porque aquí antes y con más pasión que nadie, se defienden con mayor ímpetu, un poco de vehemencia y con poco pragmatismo los debates y dilemas «espirituales o ideológicos» de occidente.
Su fortaleza reside precisamente en que es el pueblo más consciente de sus errores de todo Occidente.
Solo hace falta que una clase dirigente los corrija contundentemente dentro de una democracia con separación efectiva de poderes, que cribe a los líderes más cretinos, que son los que de forma crónica han llevado a la decadencia este país, que no olvidemos ocupa una posición geoestrategica excepcional y constituye una potencia cultural y lingüística, y no pequeña económica.
Pese a sus graves defectos, el pueblo español tiene una naturaleza espiritual, un corazón y un talento excepcionales.
Prueba de ello, es el agudo análisis que realizan mentes brillantes como Angel Romera, con el que es un placer disentir dialecticamente dada su gran cultura.
Lo de que es constante la calumnia queda patente en cada mensaje tuyo que llenas de difamaciones sobre podemos.
Y te ha faltado «manipulador», puesto que de tu amado PP no comentas absolutamente NADA, intentando tapar otro caso de corrupcion pepero en valencia, con tus mentiras infundadas de podemos (al partido que no le das ni presuncion de inocencia siquiera).
Mira tío tómate una tila.
No estamos en una Asamblea de Podemos, aquí se puede discrepar.
Y te lo vuelvo a decir, yo no voto al PP, pero por tí me dan ganas de hacerlo.
No has votado al PP en estas ultimas elecciones, pero al dia siguiente de éstas, escribias en éste diario:
«Ya he castigado al PP votando a vox» y «ahora toca votar a Rajoy»
De lo que se deduce que si has votado PP en otras ocasiones, y vas a volver a hacerlo, viendo que VOX ni se han comido, ni se van a comer un torrao en su vida. Algo totalmente respetable, estamos en democracia y cada uno vota a quien quiere. Mentir diciendo que no lo haces, en cambio, no es tan respetable.
Y de la corrupcion pepera nunca dices nada. Absolutamente nada. Toda tu verborrea la dedicas unica y exclusivamente a rajar de PODEMOS. Ni mú. Es lo que tiene no poder estar callao y escribir aqui todos los dias cualquier paja mental que se te venga a la cabeza. Que te conocemos y NO nos la cuelas.
Yo voté a Rajoy hace más de cuatro años, y estoy seguro que tú has votado a Zapatero en alguna de sus legislaturas, quizás en todas.
Seguramente ambos nos hemos arrepentido, entre otras cosas por la corrupción de sus partidos.
Pero eso de mandarme callar, eso te hace parecido al PP y su Ley Mordaza.
Y por supuesto, si Podemos amenaza con gobernar, que no me importa, pero no en estos momentos, con Cataluña por independizarse, volveré a votar al PP, aunque apeste a corrupción, que por fortuna acaba saliendo y persiguiéndose por los tribunales de justicia (los populares lo harían sólo contra los enemigos).
Yo creo, que lo haría por tí.
¿No serás un Pepero encubierto?
Por mi parte mayor honestidad no me puedo exigir, por la tuya está por mostrar.
Yo votar al SOE? Pero tu que fumas, loco? Cree el ladrón…
PODEMOS no amenaza con gobernar a nadie. Es un partido democratico y les vota la gente, en concreto 5 millones de votantes. ¿Cuantos tuvo tu querido VOX? ¿¿que es eso de decir AMENAZAR?? Siempre tienes que expresarte de esa manera tan biliarmente manipuladora sobre podemos?
Todavia seguimos esperando que digas algo sobre el nuevo episodio de corrupcion pepera, pero vemos que sigues muy ocupado con Venezuela.
Por cierto cuando quieras me aclaras en que parte de mi comentario te he mandado callar… Si no lo haces, estas levantando un FALSO TESTIMONIO sobre mi, PEDAZO CRISTIANO ERES!!
No sé, debes tomarte una tila bien cargada. Deja de fumar porros asamblearios, que deliras.
Debes ser muy joven porque utilizas el conmigo o contra mí (conmigo yo soy contra corrupción, contra mí estás a favor de ella).
Eres un poco simple no? O eres vas de listo y nos tomas por idiotas?
Tus cinco millones de votos de Podemos, se olvidaron de votar al Senado a Podemos. Un Senado así bloqueará cualquier reforma de la Constitución que quiera hacer Podemos-PSOE.
Así que la ignorancia es muy atrevida, y digo más, torpe.
De esos cinco millones, pocos son comunistas sinceros. La mayoría, votantes emocionales, y ya ves, el voto del cabreo irracional es poco efectivo.
Y ahora te agradecería bicho, que tú a lo tuyo y yo a lo mío, pues eres profundamente desagradable.
Añoro a Hobbes y Ángel Romera, tienen más vergüenza y solidez que tú a la hora de defender sus posiciones.
Pero si quieres seguir, ya sabes, mi guante sobre la cara malandrín.
«Porros, simple, ignorante, torpe»
Veo que te ha escocido pasarte los 5 millones de votos de PODEMOS y el fracaso total de los racios de VOX, como tu, por la cara. Pues es lo que tiene la democracia, que hay que respetar lo que vote la mayoria, ASI QUE APRENDE A RESPETAR EN VEZ DE INSULTAR y sobre todo acepta mas deportivamente que vuestras tonterias de vox no se las cree nadie: menos votos que el partido animalista xddd
Si tu me aconsejas tila, yo te aconsejo que tomes sal de frutas que impida toa tu bilis siga manchando éste foro 😉
Al haber estudiado y aprendido de buenos maestros en el extranjero, comprendo su fascinación por España.
Aquí tenemos pasión, y para mí ésta es la mejor fuente de inspiración y creatividad, que es lo que escasea en Occidente.
Son tantas las dificultades que ha de afrontar un español, que el que se abre paso, solo tiene un calificativo: excepcional.
Angel, el misticismo al que aludía en pasados comentarios del español, es el referido al realismo trágico al que debe enfrentarse, y que debe trascender para superarlo. Para ello, debe hacer ejercicios extraordinarios de superación y ascetismo, si no quiere o se resigna a ser consumido por ese realismo. Y envidiamos precisamente a quien lo supera, y odiamos a quien privilegiadamente a quien la evita.
Es mi análisis tras haber estudiado a españoles excepcionales que pasaron un auténtico calvario impuesto por sus compatriotas.
Hombre, Romera, los españoles, como dijo el Borbón, tenemos nuestra peculiar «indiosincrasia». No somos peores ni mejores que otros pueblos. Aunque, yo, cuanto más conozco, más me reconcilio con nuestra singular historia. Y si no, mire a los USA. A poco que nos descuidemos el mundo lo preside Donald Trump.
¡Viva las caenas!