Como cada año, desde hace más de diez, una lluvia de bolas bingo ha precedido a la Cabalgata de los Reyes Magos de Ciudad Real. Alrededor de 25.000 bolas, unas cuantas menos que en 2015, cuando se lanzaron 40.000, llovieron sobre niños y mayores que, con alborozo, festejaron esta tradición que, poco a poco, concita a más seguidores bajo un balcón de la calle La Mata.
Joaquín Ruiz Serrano es gerente de los bingos de Ciudad Real y Albacete. Explica que, según la normativa, los juegos de bolas se van renovando cuando se cumplen una serie de partidas reglamentarias. Los juegos usados ya no sirven, por los que a lo largo de todo el año los va guardando. Además, solicita, a través de la empresa en la que trabaja, que le hagan llegar más bolas provenientes de otras comunidades autónomas, como Madrid o Andalucía.
El día de la Cabalgata de los Reyes Magos, antes de que el desfile pase por debajo de su casa y cuando ya se ha cortado el tráfico, por seguridad, echan las bolas a la calle. En este evento, además del propio Joaquín, participan amigos y familiares. Comenta que, desde el momento en que comenzó, la iniciativa fue acogida con gran éxito y que cada año acude más gente. «Los niños disfrutan y arrancamos sonrisas, que es de lo que se trata». Desde hoy, Día de Reyes, asegura, empieza a recopilar bolas por los distintos bingos de España de cara al año próximo.