El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha anunciado la retirada del camión que se ha mantenido desde marzo de 2014 en la fachada de las consultas externas del Hospital General Universitario de Ciudad Real, que ha servido para hacer 10.500 resonancias, “que se podían haber resuelto perfectamente instalando un equipo de resonancia magnética», ha señalado.
«Al final se han gastado lo mismo en poner el camión que una resonancia, cosa que el actual Gobierno Regional que preside Emiliano García-Page va a acometer, no solo en Ciudad Real, sino también en Guadalajara y Albacete”, aseguró el consejero.
Asimismo ha denunciado una vez más la falta de transparencia en la información que proporcionaba el anterior gobierno del Partido Popular, que publicaba en la página web del SESCAM que en el Hospital de Ciudad Real había una o dos personas en lista de espera para la realización de una resonancia magnética, preguntándose por qué con esas cifras se han llegado a realizar 10.500 pruebas.
“La desamortización de recursos sanitarios a la que nos hemos visto sometidos estos años, está cambiando, y la atención a las personas que se ha hecho muy por debajo de nuestras posibilidades, va a cambiar para proporcionar una correcta atención sanitaria a los pacientes de Castilla-La Mancha”, concluyó Fernández Sanz.
En este sentido, el consejero informó que se están acometiendo diversas actuaciones para adecuar la oferta a la demanda, “que con la situación que nos hemos encontrado nos ha costado verdadero trabajo”, afirmó Fernández Sanz.
Así, aseguró que se está dando respuesta a todas las reclamaciones que había sin contestar y a la vez se está trabajando en dar respuesta a la demanda asistencial a través de diferentes actuaciones, para mejorar el tiempo y la forma en que se atiende a los pacientes y proporcionando esta atención en lugares adecuados.
Por otro lado, el consejero ha indicado que “queremos dar credibilidad al sistema, generando orgullo de pertenencia y atracción profesional, con la consolidación de empleo público”, afirmó el consejero, anunciando que entre las medidas que se están tomando para conseguirlo, está la creación de una Cátedra de Gestión Clínica y Buenas Prácticas, iniciándose conversaciones con la Universidad de Castilla-La Mancha, con el objetivo de formar, informar, desarrollar la inclusión de los profesionales y mejorar la atención del día a día hacia los pacientes, que es lo que la gestión clínica quiere demostrar.
En este sentido, anunció Fernández Sanz, ayer se celebró el primer taller de gestión clínica, “donde hemos elegido a la Organización Médica de Castilla-La Mancha, para iniciarla y donde tendrán cabida otras asociaciones y grupos de profesionales”.
En dicho encuentro se puso de manifiesto la necesidad de introducir un cambio en el modelo organizativo actual para garantizar la calidad asistencial y la sostenibilidad del sistema sanitario, yendo hacia un modelo que fomente la participación de los profesionales en la toma de decisiones y que gire en torno a la gestión por procesos.
Esta Cátedra, dirigida a profesionales sanitarios, se pondrá en marcha para el curso 2016/2017.
