El Colegio de Enfermería de Ciudad Real y la Asociación para el Derecho a Morir Dignamente (DMD) han llevado a cabo hoy martes una jornada informativa titulada “Los Derechos al final de la Vida y el Testamento Vital”.
La jornada formativa ha corrido a cargo del doctor Luis Montes Mieza y la enfermera Prado Sánchez Molero Martín quienes a lo largo de cuatro horas han ido desgranando los conceptos básicos que rodean el tránsito al final de la vida y las decisiones que una persona puede tomar sobre la forma en que desea acabar de vivir, cuando ya no queda recurso terapéutico alguno que garantice su salud, más allá de los cuidados paliativos.
Sus intervenciones fueron precedidas por la presentación del presidente del Colegio de Enfermería de Ciudad Real Carlos Tirado, a quien ambos agradecieron el interés del Colegio y su sensibilidad por poner un tema sobre la mesa que cada vez interesa más a la opinión pública.
La calidad de la atención durante la fase final de la vida contribuye, en gran medida, a una muerte pacífica y digna, al tiempo que reconforta a los miembros de la familia en el duelo y en el proceso de aceptación de su pérdida. En este aspecto, el papel de los profesionales de enfermería resulta vital. Según ha reconocido el doctor Luis Montes “si la enfermería decidiese en la parte asistencial la limitación de esfuerzo terapéutico; o el control de los síntomas del sufrimiento, en España se moriría mucho mejor”.
El doctor Montes, que alcanzó notoriedad a partir del año 2005 cuando una denuncia anónima lo acusó de haber causado la muerte a 400 pacientes, fue finalmente absuelto por los tribunales de justicia. Desde el año 2009 preside la asociación para el Derecho a Morir Dignamente, que defiende la despenalización de la eutanasia, el acceso universal a los cuidados paliativos hospitalarios y extrahospitalarios, a la sedación, la implantación y difusión del testamento vital, y el derecho a la autonomía del paciente, así como el respeto a su voluntad y libertad individual.
Durante la tarde de hoy martes, el doctor Montes ha asegurado que “cuando yo he querido conocer la historia clínica sobre cómo habían sido los últimos días de un paciente que termina muriendo en la cama de un hospital, inevitablemente he tenido que acudir a la hoja clínica de enfermería. Estos profesionales son los que tienen el contacto íntimo, o como siempre se dice son los que están las 24 horas a pie de cama. Escuchando. Saben mejor que nadie cómo es ese tránsito. Los médicos tomamos decisiones sobre el
tratamiento pero no vivimos la muerte como los profesionales de enfermería. La vivimos desde el despacho”.
En este sentido la propuesta de DMD es hacer un Observatorio de Muerte Digna de ámbito nacional y quien tiene que llevar ese registro es quien verdaderamente está, que no es otra que la enfermería”.
Por su parte, la enfermera Prado Sánchez Molero Martín aclaró como está el tema del testtamento vital en Castilla La Mancha. Según sus palabras, en nuestra región hasta la fecha son casi 6.000 personas las que han rellenado la hoja de últimas voluntades que recoge cómo quieren ser tratados en caso de que una enfermedad incapacitante les impida tomar decisiones sobre la forma de afrontar su propia muerte.
La charla terminó con una película que recoge en algo mas de media hora fragmentos de conocidos largometrajes que han tratado de alguna u otra manera el proceso natural de la muerte y la lucha que muchas personas han librado por conseguir que el derecho a bien morir sea algo más que una declaración de intenciones y les conceda la dignidad necesaria en los últimos instantes de su vida.