El anticomunismo del diario El País no es nuevo, pero en la portada del día 3 de octubre de 2015 rizan el rizo al tratar las elecciones en Portugal. Muestran el anticomunismo habitual pero, además, el desconocimiento de la realidad portuguesa. El título de la noticia es el siguiente: “Por qué no hay un Podemos en Portugal”. Y el sorprendente y sesgado antetítulo “La ortodoxia comunista cierra el paso a nuevas fuerzas de izquierda en las elecciones”.
Manda carallo, por no utilizar la expresión del popular Federico Trillo cuando era presidente del Congreso. El Partido Comunista Portugués (PCP) es para el “periódico global” culpable de la no emergencia de nuevas fuerzas de izquierda como Podemos o como Syriza. Y, seguramente, de la muerte de Manolete, de la crisis mundial o de la existencia de paraísos fiscales, tan frecuentados por los amigos capitalistas del diario. Bueno es que existan comunistas para culparles de todo lo que parezca conveniente.
Pero es que, además, en este caso es una nueva mentira del diario de la endeuda PRISA. No es posible que el PCP corte el paso a nuevas fuerzas de izquierda como Podemos pues ya existe una equivalente a la formación de Pablo Iglesias o de Alexis Tsipras y se llama Bloco de Esquerda. Está presente en las instituciones portuguesas desde hace tiempo y ha cosechado un magnífico resultado electoral en las elecciones del pasado domingo. Podría decirse que es un antecedente de las citadas fuerzas políticas.
Si los periodistas de El País hubieran querido podrían haber comprobado en su propia hemeroteca que en noviembre de 2014, cuando se celebró la convención del Bloco de Esquerda, hubo representantes, entre otros, del Syriza griego y del Sinn Fein irlandés. Pero la estrella fue, precisamente, Pablo Iglesias, líder de Podemos. Asimismo, tanto el Bloco, como Podemos o Syriza pertenecen al Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea/Izquierda Verde Nórdica (GUE-NGL) del Parlamento Europeo.
Por cierto, la falta de rigor en el resultado de las elecciones del día 4 de octubre es muy grande en El País y en la mayoría de los medios de comunicación españoles controlados por la banca, la derecha conservadora y la ultraderecha. Victoria de la derecha conservadora, escriben y dicen sin parar cosas como “Portugal respalda al Gobierno que aplicó la política de austeridad” (El País, 5-10-2015). Ahí querían llegar en portada los paladines en España del capitalismo estadounidense, ese era el titular preciso para apoyar el austericidio.
Si se analizan con detenimiento los resultados, con 226 mandatos atribuidos y a falta de cuatro por asignar, y no se hace caso a los titulares de la mayor parte de los grandes medios españoles de persuasión podemos ver una realidad muy distinta a la que nos cuentan. Animo a los lectores a que visiten la pagina de Internet del Ministerio de Administración Interna (http://www.legislativas2015.mai.gov.pt/index.html#none). Resulta que la derecha política portuguesa, PPD/PSD.CDS-PP, esta vez se presentaba unida y ha obtenido 99 escaños y casi dos millones de votos. En las elecciones de 2011 el PPD/PSD consiguió 105 y CDS-PP un total de 24. Entre ambos cerca de dos millones ochocientos mil sufragios. O sea, la derecha ha perdido treinta escaños y ochocientos mil votos.
El Partido Socialista por su parte, con una mejora insuficiente, ha pasado de 73 a 85 escaños y el Partido Comunista junto a Los Verdes, de 16 a 17, con porcentajes de voto del 24 o 21 en distritos como Beja o Évora. Pero el gran avance ha sido para la fuerza política similar a Podemos, esa que no existe para El País. En 2011 logró ocho asientos en el Parlamento y en 2015 ha conseguido diecinueve. En síntesis, la derecha ha sido la ganadora de las elecciones generales, pero se ha quedado lejos de renovar la mayoría absoluta. El Partido Socialista sube, pero poco, y se fortalecen los grupos antiausteridad, con casi el veinte por ciento de los votos. Una sorpresa ha sido la entrada en el Parlamento de un diputado por Lisboa de PAN (Pessoas-Animais-Natureza), que reclama entre otras cuestiones la auditoría de la deuda portuguesa.
Y todo ello con una abstención del 43 por ciento, realmente la ganadora de las elecciones, junto a un dos por ciento de votos blancos y un 1,6 de sufragios nulos. Pero, ya se sabe, el pueblo portugués respalda el austericidio según nuestra prensa al servicio de la banca y de los medios financieros. Por cierto, la derecha portuguesa es más abierta, más eficaz, más demócrata y menos corrupta que la neofranquista española. Una derecha presidia por Passos Coelho que no dudó en dejar caer al imperio Espírito Santo. A diferencia de la española, que ha dado generosamente a la banca millones y millones de todos los españoles.
Isidro Sánchez Sánchez
Desde el revés de la inopia
Ya se dice en todos los mentideros que «si un titular no le gusta a Soraya, El País siempre tiene otro». Para eso tienen a Cebrián.
No hay nada como negociarle la deuda a un medio de comunicación. Ya lo tienes cogido por los mismísimos para siempre. Y ese es el caso del «diario global» que cada vez se parece más al Hola.
http://www.ere-elpais.com/
El comunismo, amigo Isidro, es hoy intelectualmente inaceptable. Yo simpaticé, claro, hasta que dejé la simpatía juvenil -como ahora hacen los neochicos- por la investigación y el estudio. Quedé horrorizado al comprender que una sociedad comunista sólo sobrevive desde el aplastamiento, la eliminación de la individualidad que no el individualismo, y de la disidencia y bajo la bota de una burocracia mandataria a su vez bajo el pistolón de un lider perpetuo quasi divinizado. Leer a Malraux y a Gide y los procesos de Moscú y muchos otros intelectuales que simpatizaron, recordar que en nuestra guerra civil los propios comunistas acabaron a tiros entre ellos, los troskistas y los anarquistas dice muy poco o muy mucho de la indomeñable condición humana. Ahora no creo en nada políticamente hablando pero sigo mi conciencia y procuro ser cada dia más amigo de mis amigos y menos enemigo de mis enemigos. Aqui en nuestra malhadada contienda civil y permanentemente recordada con acidez una buena parte de la población militante adoraba a un lider, Stalin, que ya andaba masacrando a los suyos porque se volvió loco, el mismo que fue capaz de sentarse a firmar cosas con el demonio de Hitler. Disculpa la perorata pero me asombra que aun hoy se defienda un sistema que la parte del mundo que lo padeció abjuró de él. Una de mis especulaciones, tal vez bajo la influencia de Malraux, lo reconozco pues acababa de escribir «Entre las balas» es qué hubiera pasado si el Frente Popular, es decir, el PCE, hubiera ganado la guerra. Supongo que de haber entrado en la órbita de la URSS en aquellos tiempos la madre patria comunista, el pueblo hubiera salido a la calle con la caida del muro.Supongo, solo supongo. Si antes, claro, no nos hubiera invadido Hitler cuando se pasó por el forro lo que firmó con el ruso, lo cual hubiera dado otra España más amable. Como he dicho y escritos varias veces no es que este sistema sea un hijo de puta, el problema es por cual otro lo cambiamos. Entre dos monstruos el que gana es el peor porque el que pierde entra la idealización y la leyenda. Un saludo cordial.
Especulaciones y ucronías, no, gracias Manolo. La historia es la que es, y la que nos dice que los ganadores machacaron una democracia recién estrenada y asesinaron a todos los que no tenían la ideologia facha y aun a éstos si les venía bien.El poder del PCE era débil, así que ,de ganar la guerra el bando republicano la democracia hubiera tenido el cariz de cualquier otra democracia occidental . No maquiellemos la realidad a nuestro antojo inventándonos hipótesis que nunca serán realidades.
Ucronías, dice. ¿A ti te parece una ucronía la el golpe de estado contra la República dado por el PSOE y la Esquerra en 1934? Y el asesinato de Calvo Sotelo por la escolta de Indalecio Prieto, ¿también es una ucronía? Hay un pozo en Carrión de Calatrava lleno de ucronías asesinadas por los demócratas del Frente Popular, a uno le cortaron los brazos con un hacha y lo echaron vivo al pozo.
Exacto. La historia es la que es.
La gentes no le gusta el comunismo, pero todos quieren un trabajo publico una sanidad ,educación y sistema de pensiones publico ¿ Porque sera?
40 años de adoctrinamiento en la ignorancia.
Se piensan que el comunismo es «comer niños» o algo así…
Desde luego Isidro, qué cosas tienes. Mira que poner en duda la imparcialidad de la «prensa libre» ESPAÑOLA, ese modelo de espíritu crítico y libertad de expresión, fiel siempre a la noticia y lejos de la manipulación de esos países bananeros.
No me canso de ver esta imagen, con todos los periódicos con la misma portada, con la publicidad de su amo, qué imagen tan transparente de la libertad de expresión:
http://www.infolibre.es/uploads/imagenes/bajacalidad/2015/01/28/_img0543_87e0d4ec.jpg
¡Ah, qué bonito es vivir en un país libre!
El comunismo como concepto está desacreditado y en ello tuvo mucho que ver la perversión del socialismo real. Sin embargo, creo que podría reformularse, no en función de conceptos no esenciales, de lo que fue en el pasado, ni de lo que pueda ser hoy, que sería difícil de definir, sino en un aspecto de la utopía comunista que ya era mencionado por Marx en 1847: la posibilidad de que el trabajo proporcione a las personas mayor satisfacción, mayor calidad de vida, más tiempo libre, más felicidad como le explicaba a su hija Jenny. La persona en el centro de la actividad económica.
El capitalismo parece que se reinventa siempre y que su desarrollo hacia sociedades cada vez más avanzadas nunca colapsará. ¿Podríamos hablar de una revolución digital, una especie de Comunismo 2.0 como antesala de la sociedad que proporciona esa felicidad, ese tiempo libre, ese conocimiento, esa vida más agradable?
Mi opinión es que no, pero no lo descartaría como elemento de análisis de nuestra realidad inmediata.
Hoy el capitalismo es básicamente un capitalismo silicon Valley por un lado, y un capitalismo financiero, especulativo, con capitales ficticios por otro. En medio el sistema de propiedad tradicional con una economía productiva con escasas reglas, que produce más barato y más pernicioso, sin respetar la ecología, con su potencialidad más dañina y peligrosa.
La regulación, cuando existe, la imponen por encima de los estados. Basta recordar -enfadándose mucho- el ejemplo de las empresas eléctricas en España.
Como creo que la calidad de vida de las personas no se puede reducir a un algoritmo, ni creo que Google optimice nuestras vidas, como tampoco creo que el sistema de propiedad, de acumulación de capital y de optimización del beneficio revierta en una mejora de la vida de las personas, es por lo que creo que la actividad política todavía tiene, o debe tener un hueco para luchar por la utopía.
Entiendo que un modelo general alternativo no existe. Pero sí creo en la capacidad de movilización de las personas para impulsar un modelo que procure cambios quirúrgicos aquí y allá: en la banca, en el comercio, en la producción, que permitan al final un cambio general alternativo al actual: excluyente y salvaje. Un modelo donde no se defienda el sistema de propiedad con uñas y dientes, donde compartir (simplemente el vehículo para ir al trabajo)sea un valor.
Para ello los partidos tradicionales no sirven. Sólo hay que ver cuantos ex-presidentes y ex-ministros -del PP y del PSOE-se sientan en los consejos de administración de las eléctricas para saber que no harán nada.
Yo apuesto por la gente que se movilizó (hoy un poco desinflada) por el cambio, que tiene que ser radical, llámese como se quiera socialismo, comunismo o Podemos, siempre que la persona esté en el centro de la actividad económica y procure su felicidad. Para eso se debe estar en la política, para luchar por eso. Los de siempre ya están acomodados, no van a luchar por lo nuestro porque cobran de los otros.
Muy interesante, afrofilipino
Un pena Afrofilipino que parases tu carrera política. Es un comentario de 10 y deberías estar cada semana por aquí escribiendo.
Los extremos siempre son perjudiciales y JAMÁS debe avergonzarnos reconocer lo bueno de cada cosa. Pues claro que en el comunismo y en el liberalismo teórico hay cosas aprovechables (por supuesto, me decanto por el primero). El problema es cuando se ha caído una y otra vez, en las dictaduras comunistas o en las dictaduras de Wall Street o el FMI. O aparecen barbaridades como las de Venezuela o Corea del Norte, que forman parte más de la forma de ser de unos presidentes payasos y asesinos, que de una teoría económica.
Yo sigo estando muy orgulloso del 15M y de cómo la gente normal y corriente dijo basta. Sin embargo, el 15M es tan complicado de llevar al ruedo político, que ninguna de las opciones lo ha logrado. Bien sea por sus pilares ideológicos poliédricos, bien sea porque no han sabido enfocarlo bien, bien sea por haber elegido al líder o líderes equivocados, bien sea por los medios de comunicación manipulados por los dos grandes partidos en contra de ellos. No lo sé. Incluso a pesar de que el CIS da como mejores alcaldesas a Colau y Carmena, la gente sigue viéndolas como diablos alados que van a quemar Madrid y Barcelona.
Vamos a ver en estas elecciones generales qué pasa. Estoy muy intrigado por saber si la gente va a dar una segunda oportunidad al PP y las políticas liberales con la formación de Rivera, o va a apostar por un modelo que pueda reformar España desde los cimientos, como es Podemos. Aunque esta segunda opción (que en sus objetivos me convence bastante), cada vez se me desinfla más por el carácter tan agrio de su líder y la indefinición en muchos aspectos fundamentales para los ciudadanos. Porque para un culipardo ¿Cuáles son las líneas principales de trabajo de Podemos? Es como si no existieran. Es más ¿Qué pasa con Podemos en Castilla La Mancha? ¿Por dónde van los tiros con Molina? Aquí solo nos llegan sus movidas y sus enfrentamientos.
Lo que sí que doy por descontado (y creo no equivocarme) es que el bipartidismo que convierte la política en una cuestión de FE y solo habla de «estar conmigo o contra mí», está más que amortizado. Y tanto PP como PSOE van a tener una larguísima travesía del desierto, y de nosotros depende que eso sea un revulsivo para que la democracia española vuelva a su sitio.
Saludos.
PD: a los que sacan comentarios «guerracivilistas» en este artículo sobre las elecciones en Portugal, solo una cosilla: qué pereza más grande dais.
Buen artículo, don Isidro, prosa clara, sencilla y llena de compromiso y verdad.
Aconsejo un articulo de Antonio Muñoz Molina en El País (Babelia)
Don Isidro, lo felicito por el artículo, claro y conciso. Denunciando como debe ser el adocenamiento al que nos tienen acostumbrados esta prensa pesebrera subvencionada sin calidad y nada analítica.
Esto de las utopías siempre es cachondo. Hacen falta ideales para que el personal se anime porque el día a día de cambio es jodido. Y claro, esos ideales pretenden crear algo nuevo, del todo, un «hombre nuevo». Y hay gente que se lo traga. Los efectos colaterales son males necesarios. Deben haber leído poco de historia o se limitan a buscar excusas para el fracaso de las utopías pasadas; así se sienten bien.
Uno escucha comunismo y sólo piensa en el gran servicio que trajo a las funerarias. Ver esos carteles de Lenin en las sedes … Amor por las funerarias. Afortunadamente la sociedad les superó y tuvieron que tragar, aunque lo sigan llevando algunos en lo más íntimo y sea posible ver el odio y el desprecio por el otro.
El capitalismo de un tal Leopoldo II, rey de Bélgica, ansioso de hacerse rico con el comercio del caucho, acabó con dos millones de congoleños (hay quien dice incluso que más) e instaló en Zaire una guerra civil endémica que todavía no ha terminado. Hoy podría decirse casi lo mismo del petróleo.
Don Ángel lleva usted razón en lo que cuenta, una verdadera atrocidad. Estado Libre del Congo, el nombre sólo ya tiene guasa.
Verá, yo recuerdo, cuando en televisión hablaban del muro de Berlín, que contaban como la gente saltaba el muro huyendo de la República Democrática Alemana (un nombre con mucha guasa también), pero nunca escuché que la gente saltara en sentido contrario. Valga el mismo ejemplo con los balseros cubanos; nunca vi balseros estadounidenses intentando huir hacia Cuba, paraíso socialista. Los ejemplos son muchos, no le aburriré.
Muchas cifras he leído sobre los crímenes atribuidos al comunismo. No le sabría decir, y creo que nadie podrá hacerlo nunca, en cualquier caso, decenas y decenas de millones. Stalin, Jemeres Rojos, Mao seguro que mataron a muchos, muchísimos más de dos millones.
Tengo que reconocer, sin embargo, que el capitalismo no es el edén.
Es un error de concepto identificar capitalismo o comunismo con democracia; de un comunismo absoluto siempre se ha huido como también de un capitalismo exagerado, porque su consecuencia es siempre la miseria.
Ningún ismo politico se salva de sus muertos.Intercambiarlos para borrar los nuestros solo nos lleva a la muerte intelectual.
Uno no sale de su asombro leyendo algunos comentarios. El autor del artículo escribe acerca de la nula parcialidad de un periódico ,documentándolo con lo dicho por ese diario el pasado sábado y desmontando el pufo, y algunos comentaristas, aprovechando que el Tormes pasa por Salamanca, se montan su propio Sálvame y sacan de la chistera sus propias batallitas de la guerrra civil, sacando a Indalecio Prieto y su abuelo, a Malraux y su tía francesa. Solo falta hablar del oro de Moscú y de los amoríos de Pasionaria. Vamos, lo que mi abuela denomina miccionar fuera del tiesto Qué país de locos, menos mal que el tal Isidro se debe burlar de tanto tarado como pulula por estos lares.
Pues lleva razón. La critica que hace don Isidro es muy atinada. Además está descrita muy bien. Y el artículo está escrito con mucha sencillez y claridad.
En lo restante, ¿qué quiere que le diga?, no lo lea si no le gusta.
¿Sabe don Caspa? Yo no le llamaré a usted nunca tarado, pese a que estoy con acuerdo con usted de que esto es un país de locos.
Nula imparcialidad , corrijo. Y agrego: ninguneo y tendenciosidad cuando alguien o algo les disgusta a El Pais. Esto es contra lo que hay que luchar : contra el periodismo de periodistas nada honorables y contra la mentira de los políticos… y la guerra civil que se quede en los libros de historia y en la memoria de las personas de bien para no volver atrás.
A las personas de bien no les gusta que los asesinatos queden impunes ni que las víctimas estén sin enterrar. De la misma forma que los asesinatos de ETA de hace 50 años no deben ser olvidados, tampoco deben ser olvidados los cometidos por el fascismo hace entre 40 y 80 años.
Los equidistantes y los falsos imparciales son cómplices con su indiferencia.
Por si sirve de algo: Una cosa es el marxismo, método de análisis de la sociedad que después de haber caído en el descrédito vuelve por sus fueros; otra cosa es el marxismo-leninismo, una interpretación que llevó a la desaparición de la libertad, a las deportaciones masivas a Siberia y a la muerte de millones de rusos especialmente bajo el gobierno de Stalin en 1938 y siguientes; una tercera cosa es la lectura que del marxismo-leninismo hicieron los intelectuales franceses, por no hablar de otros -hay que leer a Malraux al mismo tiempo que a Sartre y a Camus-; y una cuarta cosa es el eurocomunismo y la implosión del comunismo soviético cuando Gorvachov intentó acercarlo a los estándares de las sociedades occidentales. Mezclar todo esto bajo el término comunismo a secas es perjudicial para la higiene mental.
Por supuesto, «El País» en este momento poco tiene que ver con el de Joaquín Estefanía, por no remontarnos hacia atrás.