La consejera de Fomento del Gobierno regional, Elena de la Cruz, ha revelado hoy ante los medios de comunicación de Albacete que “no le consta” que el anterior ejecutivo de Castilla-La Mancha elaborase ningún informe relativo a la seguridad de las rutas de transporte para llevar los residuos de alta actividad desde las distintas centrales nucleares españolas hasta Villar de Cañas, un asunto que podría afectar a diversos puntos de la región si finalmente el Ministerio consigue que el emplazamiento del Almacén Temporal Centralizado esté en el municipio conquense.
A preguntas de los medios informativos sobre esta cuestión, De la Cruz ha afirmado que aunque existe alguna partida en los Presupuestos Generales del Estado para reforzar los firmes de carreteras por las que transitarían esas rutas, no consta la existencia ni el encargo de ningún análisis complementario en la Consejería.
La consejera ha calificado de “gravísimo” el hecho de que “a estas alturas del proyecto no se tenga seguridad sobre el terreno” elegido por el Ministerio para la construcción del ATC tras el ofrecimiento del Gobierno regional anterior, un terreno sobre el que ha dicho que existen informes técnicos que apuntan a que es “inestable” y sobre el que no existen garantías de posibles filtraciones al subsuelo con el paso de los años aunque se refuerce la cimentación, como así lo avalan “voces discordantes” de técnicos del Consejo de Seguridad Nuclear.
“En la Junta de Comunidades creemos que esos terrenos no son aptos para esa instalación”, ha remarcado, calificando de “irresponsable” al Gobierno de España y al Gobierno de Cospedal por haber seleccionado Villar de Cañas sin asegurarse primero sobre la idoneidad geológica del emplazamiento.
Preguntada sobre si existe ya un pronunciamiento sobre las irregularidades detectadas en el Plan de Ordenación Municipal (POM) del municipio conquense y la impugnación presentada por un municipio vecino a ese documento urbanístico, Elena de la Cruz ha recordado que el pronunciamiento de la Consejería en ese sentido está todavía a expensas de que informen los técnicos, a quienes “hay que dejar trabajar sin presiones”.