Treinta años son muchos años para resumirlos en poco más de una hora. Pero este escaso tiempo fue suficiente para que Dionisio Cañas diera algunas pinceladas sobre su vida en Nueva York, la personal y la profesional, recitará algún poema como No Time y pusiera un divertido vídeo rodado en la ciudad americana y en su tierra, Tomelloso. Y lo hizo en El Escorial, sede de los Cursos de Verano Complutense, donde se trasladó para participar en el encuentro Los poetas y Nueva York. Homenaje a Federico García Lorca.
“En un lugar de Manhattan: la experiencia vital de un poeta en Nueva York”, fue el título escogido por el poeta de Tomelloso para su conferencia, un intervención cercana y desenfadada en la que fue contando anécdotas y recuerdos de esa ciudad que nunca duerme, de “esa ciudad museo” en la que cada día se descubre algo, y de su casa, en el corazón de la ciudad, por donde pasaron muchos poetas españoles.
Cañas habló de la Nueva York de día, y sus lugares hermosos, pero también de esa Nueva York nocturna, que bien conoció y a la que calificó de peligrosa, un peligro que no solo no le paraliza sino que, en palabras de Cañas, le gusta. “La búsqueda de la intensidad de la vida te puede llevar a situaciones límite”, afirmó el poeta, quien, además, aseguró que esas vivencias son buenas para la poesía. Una poesía, la actual, “que se ha trasformado muchísimo”, dijo.
La muerte, la vida, el peligro, lo trágico… Palabras presentes en sus versos, en sus poemas, en sus reflexiones. Y así lo contó a los alumnos de este curso, quienes también le escucharon decir que para que no te de miedo la muerte hay que hablar de ella, o que si se habla de ella es una forma de ahuyentarla.
Tampoco faltaron las referencias a La Mancha, su tierra, donde nació en 1949, en Tomelloso, localidad a la que regresó cuando dejó Nueva York y la Universidad donde impartía clases de Literatura. Dos mundos completamente diferentes que, sin embargo, siempre han formado uno en este poeta. Esa tierra suya tranquila, esa Nueva York llena de ruido, bullicio, gente, vida. ¿Y ahora? Ahora Dionisio Cañas ha puesto su mirada en el mundo árabe. Ahí, su último poemario: Los libros suicidas (Horizonte árane).
En este curso homenaje a Lorca, Cañas también habló del poeta granadino y de la influencia que tuvo en él, una admiración y un interés que le llevó a investigar los pasos de Lorca por Nueva York, descubriendo “facetas de la vida del poeta desconocidas”. Hasta habló de los amores americanos de Lorca.
Además de Dionisio Cañas, este curso de la Complutense, dirigido por Ana Gavín, directora de la Fundación Lara, y coordinado por la periodista Antonia Cortés, ha acogido a un grupo de intelectuales para analizar el libro “Poeta en Nueva York” en el 75 aniversario de su publicación, y la relación existente entre la ciudad de los grandes rascacielos y los poetas españoles: Darío Villanueva (Director de la Real Academia Española), los escritores Luis Alberto de Cuenca, Manuel Francisco Reina, Julio Neira, Álvaro Salvador, Aurora Luque y José Manuel Carcasés. El curso se completó con un recital de poesía a cargo del actor Pepe Martín.
Muchas gracias por escribir esta nota. La he visto ahora, muchos meses después. Un saludo cordial. Dionisio