El PP aboga por evitar la «estigmatización» de los usuarios de los comedores escolares ampliando el programa con actividades o utilizando cheques canjeables por alimentos

El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Ciudad Real, a través de su concejal responsable del área de Acción Social, Aurora Galisteo, ha valorado la propuesta sobre la apertura de los comedores escolares en verano para aquellos niños de la ciudad que están en mayor situación de vulnerabilidad y que “consideramos que no se debe dar como un servicio aislado, sino enmarcado dentro de un programa educativo y lúdico”, ha explicado.

Partiendo de la base de que no hay ninguna justificación para que haya niños que no reciban una alimentación adecuada, el Grupo Municipal Popular considera que en este asunto, que afecta directamente a la población infantil, al sector de población más vulnerable de la sociedad, no se puede actuar a la ligera, por lo que “imaginamos –ha indicado la edil- que cuando el equipo de Gobierno de este ayuntamiento, y sus socios de gobierno, han puesto sobre la mesa este asunto es porque, previamente, habrán solicitado un estudio pormenorizado de la situación a los técnicos de la Concejalía de Bienestar Social, a los trabajadores sociales, análisis del que este grupo, hasta el momento, no tiene constancia”.

De igual manera, el PP municipal echa de menos que no se haya convocado una reunión, de manera inmediata y urgente, con las entidades que trabajan en esta ciudad con las familias más desfavorecidas: Cáritas, Cruz Roja, Fundación Secretariado Gitano, Unicef, y tantas otras, para conocer su posicionamiento acerca de la necesidad y conveniencia de abrir los comedores escolares en verano.

“Es verdad que no hace ni dos semanas que el nuevo equipo de Gobierno tomó posesión y que el tiempo apremia, pero también es verdad que tan importante es hacer algo como la manera en que se hace y las consecuencias que la decisión adoptada puede tener, en este caso, para los niños”, ha subrayado Aurora Galisteo, quien ha recordado que la propuesta del equipo de Gobierno, conocida por los medios de comunicación “porque de la misma no hemos tenido ninguna comunicación oficial”, establece la apertura, de dos a tres de la tarde, de lunes a viernes, durante los meses de julio y agosto, de cinco comedores en los colegios Ferroviario, Don Quijote, Santo Tomás de Villanueva, Miguel de Cervantes y Cristóbal Colón, a los que han confirmado que asistirán 150 chavales de los 360 que este pasado curso escolar han estado becados.

La Diputación provincial se encargará del coste de 108 becas, el Club Rotario de diez y el Ayuntamiento de Ciudad Real de los 32 restantes, con un coste de 6.716 euros para las arcas municipales, pero “desconocemos, porque tampoco se nos ha informado, si en ese presupuesto están incluidos también los gastos que se derivan, en materia de limpieza, luz, etcétera, de la apertura de los cinco colegios citados”.

El Grupo Municipal del Partido Popular considera que la apertura de los comedores escolares en verano no puede quedarse solo en el servicio de comida, sino que debe integrarse dentro de una acción educativa y lúdica, donde el servicio de comedor sea un componente más, evitando así que los niños que acuden al centro se vean estigmatizados y que el comedor del colegio se convierta en un «comedor social infantil», concepto que ha sido expuesto por Unicef España y que el GMP hace propio y comparte al cien por cien.

Aurora Galisteo ha añadido que “creemos que el equipo de Gobierno aún está a tiempo de reconsiderar esta propuesta y le pedimos que utilice los comedores escolares que ya van a estar abiertos en las escuelas municipales organizadas por la Concejalía de Educación, integrando este nuevo servicio dentro de un proyecto educativo y de ocio, puesto en marcha por el PP hace más de una década, consolidado y de éxito”. En caso de que esto no pudiera ser posible, tal y como ha dejado entrever la concejal de Bienestar Social, Matilde Hinojosa, aunque sin dar más explicaciones al respecto, el PP en el ayuntamiento considera que es preferible que ese dinero que se va a gastar en la apertura de los comedores se reparta entre las familias más desfavorecidas con menores a su cargo, a través de cheques canjeables por productos de alimentación en los supermercados. “Antes que crear comedores sociales para niños, y de señalar a estos chavales cuyas familias tienen dificultades económicas, es preferible esta segunda medida y que los niños coman en su casa que, por otro lado, es el mejor sitio donde pueden comer”, ha explicado Galisteo.

Haciendo un cálculo rápido y con la escasa información que se ha facilitado sobre el coste real de la apertura de los comedores escolares en verano, Galisteo ha señalado que de las 32 becas que va a pagar el ayuntamiento, 6.716 euros, dividido entre las 44 comidas que de lunes a viernes se van a ofrecer durante los meses de julio y agosto, supone casi cinco euros por niño al día, en concreto 4,76 euros, “cantidad –ha insistido- que se podría repartir entre estos niños y sus familias a través de cheques para comprar alimentos en los supermercados”. Además, ha destacado que incrementando mínimamente ese presupuesto, esos cheques, o ayudas para alimentación, también se podrían entregar para los sábados y domingos “porque los fines de semana los niños también tienen que comer”.

La responsable de Acción Social del Grupo Municipal Popular está convencida de que ni la Diputación provincial ni el Club Rotario tendrían inconveniente alguno en cambiar la finalidad del dinero que van a aportar para pagar las becas de comedor escolar en verano y que este se destine, finalmente, a cheques canjeables por alimentos en los supermercados. “Es una propuesta, una alternativa, seria, estudiada y muy razonada que parte también del conocimiento de la ciudad que tiene el PP y del trabajo de una oposición constructiva que ya está realizando, desde el minuto uno, el Grupo Municipal Popular liderado por su portavoz, Rosa Romero, y que esperamos sea tenida en cuenta por el equipo de Gobierno”, ha concluido la concejal “popular”.