Emilio Herreros.- El pasado 3 de junio tuvo lugar el concierto del puertollanero Pablo Moreno en un paso más por hacerse un hueco en el difícil mundo de la música y seguro que lo consiguió. Tocar en esta sala no es tan fácil como pueda parecer, ya que aquí se demuestra si realmente vales para esto o no, aquí el “ÁNGEL” que debe tener todo artista que se precie sale a la luz de una forma mágica.
En 1994 el café se convirtió en uno de los núcleos de la nueva canción de autor: Pedro Guerra, Gemma y Pavel, Rosana, Ismael Serrano … Hoy el café es reconocido en toda España y América Latina como «una cueva de la canción de autor» que sigue estando en la agenda de los consagrados como Luis Pastor, Tontxu, Lichis o Kiko Tovar.
Pues aquí se plantó Pablo Moreno con su piano y su guitarra en ristre desafiando al público madrileño, ávido de triunfar en tan mítico sitio y vaya si lo hizo.
Una sala abarrotada escuchó durante dos horas sus composiciones, y bien escoltado por Josué (flauta y acústica) y Guillermo (percusión y cuerda).Un concierto que el joven cantautor no olvidará nunca, no sólo por ser el día de sus 19 cumpleaños sino que además es el inicio de su gira por todo el territorio nacional.
Un joven artista puertollanense que deja claro que es manchego por los cuatro costados y que seguro que dará mucho que hablar en el panorama musical, como así aseguran ya los grandes ojeadores musicales.
El concierto también tuvo artistas invitados con la presencia de otras jóvenes promesas nacionales, que pudieron acompañar a Pablo Moreno en un día tan señalado y emotivo.
Tras dos horas mágicas, donde cantó canciones que ya se empiezan a oír como “Ciudad en llamas” o “Empezar de cero”. Pablo Moreno se despidió de su público entonando su canción “Gigantes “que levantó a literalmente al público de sus asientos.
Guarden este nombre porque pronto (o muy pronto) les va a parecer familiar: PABLO MORENO.
…y este señor quien es?
Bien Pablo te deso lo mejor¡,,,,