La consejera de Agricultura de Castilla-La Mancha, María Luisa Soriano, ha destacado que “desde hace unos años las bodegas y cooperativas de la región, junto con las denominaciones de origen, están redoblando la apuesta por los vinos de calidad”, y les ha felicitado por “hacer vinos que están a la altura de los mejores del mundo”.
Así lo ha afirmado esta mañana en Ciudad Real durante la entrega de premios del concurso ‘Airén por el Mundo’, celebrada en el marco de la Feria Nacional del Vino (FENAVIN).
En su alocución, Soriano ha expuesto que ”en Castilla-La Mancha hemos mejorado las técnicas vitícolas y de elaboración, invertido en innovación, trabajado nuevas variedades demandadas por los mercados internacionales y les hemos dotado de la personalidad que ofrecen nuestro suelo y clima”.
A esto le ha sumado el “mayor empuje comercial de estos últimos años, que junto a la calidad y variedad que ofrecemos nos ha llevado a un fuerte incremento de las ventas y de las exportaciones”, que han aumentado en un 59 por ciento con respecto al año 2010.
En todo caso, aunque ha resaltado que “los datos son extraordinarios”, ha instado al sector a seguir avanzando de forma decidida, tanto en los segmentos de mayor calidad y valor añadido, como en los mercados más exigentes o en los países emergentes, que seguirán al alza en los próximos años.
Para ello, la consejera ha considerado necesario “aunar esfuerzos por construir una imagen corporativa potente y crear marcas fuertes para seguir posicionándonos en el exterior”, a la vez que ha apostado por desarrollar iniciativas junto al canal alimentación y a la restauración para “recuperar el consumo en España y fomentar la cultura del vino”.
El protagonismo de la variedad airén
La titular de Agricultura ha resaltado la importancia de los premios ‘Airén por el Mundo’, ya que la airén es la mayor variedad de uva blanca plantada en España y en Castilla-La Mancha, en la que con 130.000 hectáreas supone casi el 30 por ciento de la superficie de viñedo regional.
Por último, ha indicado que esta uva ha pasado de ser una variedad relegada a un segundo plano como base del coupage de vinos con mucho más cuerpo, a ser una variedad que está buscando su propio protagonismo como una variedad única, con la que se producen unos vinos muy frescos, afrutados, muy agradables de beber y perfectos para acompañarlos de buena gastronomía”.
