CNT Ciudad Real.– Sí, ruedas, engranajes y máquinas de todo tipo, reales y políticas. Poder, riqueza, valores dominantes, explotación, injusticia social y económica; en definitiva, vivimos en condiciones de pobreza física y mental, las cuales no hemos elegido ni en la forma ni en el fondo, y las sufrimos como clase con una resignación que resulta insultante.
Hay quien piensa que lo anterior se refiere al Primero de Mayo histórico, pero no nos engañemos: tiene que ver con el Primero de Mayo aquí y ahora. Ya que en épocas pasadas, para disgusto de muchos, la clase obrera consiguió convertirse en actriz protagonista de la sociedad. Elegía su papel, redactaba su propio guión, decidiendo dónde y cómo actuar. No necesitaba apuntadores ni regidores, actuaba por sí misma en función de sus propios intereses y valores, encaminados a cambiar todas las injusticias y desigualdades sociales a las que estaba sometida. Conseguimos llenar taquilla hasta desbordar el aforo del teatro en el que querían que actuáramos, y cambiamos su realidad transformando la nuestra. Juntos, como una misma clase consciente y concienciada, éramos el espectáculo en vivo y en directo.
Este año, junto a otros actores, volverá a estar en cartel un clásico de la lucha obrera: esa obrera colectiva que es la huelga general. Por eso tenemos que ponernos a interpretar todos juntos el papel del palo en la rueda y conseguir que los engranajes dejen de girar al ritmo marcado por el sistema. Que este Primero de Mayo sea el comienzo del primer acto de ese espectáculo colectivo y necesario que es la huelga general. Para ello, convirtámonos todos en artistas de calle, y en vez de hacer reír, consigamos que la gente reaccione, pierda el miedo, y se sume a la lucha. Que sean parte del espectáculo y que juntos interpretemos todos el papel de palo en la rueda.
Aquí y ahora, Primero de Mayo, caminando hacia la Huelga General.