Entraron al centro educativo reventando los barrotes de la ventana del despacho del director para acceder al cuadro de llaves que se hallaba en esa oficina, y de ahí al resto de dependencias del centro. Ocurrió en algún momento del fin de semana y los docentes se percataron de lo sucedido al regresar al CEIP Cristo del Consuelo de Torralba de Calatrava el lunes por la mañana.
Aún se desconocen las causas, pero la alarma no detectó a los intrusos y no sonó. Esta misma mañana acudían al centro educativo técnicos de la empresa del sistema de vigilancia para averiguar lo ocurrido.
Las personas que accedieron al centro se llevaron cerca de media docena de ordenadores del profesorado y entre 50 y 60 notebooks de los alumnos. Sólo han quedado dos del total de equipos de los que disponían. Desde la dirección del colegio confirman que no sustrajeron otro tipo de enseres y apuntan la posibilidad de que los responsables del asalto tuvieran conocimiento de la organización del centro. Al parecer, «han ido derechos» a lo que querían. Por ejemplo, señalan que las clases del piso de abajo, en las que no había nada de valor, no se han abierto; sin embargo, las del piso superior, donde se encontraban los notebooks estaban todas abiertas. «Más o menos sabían dónde estaban los ordenadores».
Aparte de los equipos informáticos, se produjeron los destrozos habituales en este tipo de sucesos: varios armarios y archivadores han sufrido desperfectos. «Algunos los han abierto con llave y otros los han forzado».
Desde la dirección del centro comentan que no se ha calculado el montante económico de lo sustraído, aunque entienden que los equipos debían tener, después de más de cuatro años desde que se adquirieron, escaso valor. En el colegio no recuerdan que se hayan producido incidentes similares.
Es bastante fácil averiguar quién robó los ordenadores si se dispone de su número matriz. Si alguno de ellos se conecta a Internet, podrá localizarse.
Ya la mayoría de los teléfonos móviles ya disponen de un sistema delator por si son sustraídos por otra persona. Mi hija, por ejemplo, recuperó el suyo, que le había sido sustraído, de esa manera.