La consejera de Agricultura del Gobierno regional, María Luisa Soriano, ha afirmado que “la modernización y la innovación de la industria agroalimentaria de Castilla-La Mancha han sido claves para el avance en los mercados nacionales e internacionales de los productos alimentarios de la región”.
Así lo señaló anoche en Socuéllamos, durante la entrega de los VII Premios de la Asociación Empresarial de Socuéllamos (AESO), que le otorgó uno de los galardones en reconocimiento a su dedicación y apoyo a las empresas agroalimentarias de Castilla-La Mancha.
Soriano agradeció el premio y subrayó el “enorme esfuerzo que han realizado las industrias y cooperativas agroalimentarias de Castilla-La Mancha para salir a conquistar nuevos horizontes y, de esa forma, conseguir un mayor valor añadido en los mercados internacionales, que son más exigentes”.
La consejera incidió en que, con ello, “las empresas agroalimentarias han logrado una mejora de la rentabilidad tanto de las propias industrias como del sector primario en general”, lo que ha permitido dar un salto comercial importante y situar las exportaciones en cifras récord, ya que superaron los 1.909 millones de euros en 2014, un 75 por ciento más que hace apenas 4 años.
Apoyo a la industria agroalimentaria en el Programa de Desarrollo Rural con horizonte 2020
La titular de Agricultura de Castilla-La Mancha destacó que el Programa de Desarrollo Rural, que tiene horizonte 2020, “recogerá importantes medidas para apoyar en los próximos años la modernización e innovación de las empresas y cooperativas agroalimentarias de la región”.
Así, cuando entre en vigor, incluirá una submedida concreta orientada a la modernización de las instalaciones y la mejora e innovación en el proceso de producción, que permitirá cofinanciar hasta el 40 por ciento de la inversión que realicen las empresas.
Asimismo, indicó otras medidas a favor de las empresas agroalimentarias que contendrá el PDR, como aquellas destinadas a la innovación en el sector agrario y alimentario; el impulso a la formación de trabajadores y directivos de las empresas, o la inclusión por primera vez de proyectos agroalimentarios dentro de las ayudas LEADER, orientadas a la diversificación de la economía en las zonas rurales.