Ver entrar a 200 soldados romanos en la Plaza Mayor de Almagro, con paso militar, marcado por los tambores, impresiona a quienes lo ven por primera vez, pero también a quienes año tras año se dan cita en la céntrica plaza.
Si a esto se le sumamos un día soleado, calorcito y buena temperatura como el de hoy, la combinación es perfecta para disfrutar de este especial desfile de los Armaos el más tempranero de los tres que la Compañía Romana realiza durante la Semana Santa. Minutos antes de las 14:00 horas, llegaba el regimiento de romanos de todas las edades, el más mayor de 76 años.
Bajo las órdenes del comandante José Lujan, el romano “ Cabo de Cuarta’ ha llegado al centro de la plaza, ha pasado por debajo de las espadas de dos de los mandos y en ese momento ha comenzado a formarse el conocido caracol. Los ‘Armaos’ en fila de a uno han terminado enredándose en el centro. Todo está calculado. Cada Armao sigue los pasos de su predecesor en la fila de a uno hasta que se forma el caracol y se desenreda. Poco a poco se deshacen los círculos concéntricos que van describiendo. Así hasta dos veces han hecho perfectamente este caracol. Un movimiento colectivo de todas las unidades que conforman la Compañía Romana y que generan una singular imagen que impresiona y admira a las miles de personas que cada año se dan cita en la Plaza Mayor almagreña.
Pero los soldados romanos no sólo realizan el caracol. Durante los tres días centrales de la Semana Santa, Jueves, Viernes y Sábado Santo, hacen los denominados frentes. Al llegar a la Plaza Mayor los ‘Armaos’ forman filas de ocho, extendiéndose por todo el ancho del paseo, y avanzan siempre en paso ordinario pero, poco a poco, y a la voz del comandante, giran 180 grados, todos al mismo tiempo para avanzar hacia el lado contrario.
La Compañía Romana es la Hermandad que está presente en todas las procesiones y actos litúrgicos que tiene lugar en Almagro. Su presencia en la Semana Santa almagreña comienza el Domingo de Ramos en la procesión de las Palmas. Ayer, miércoles, celebraron las catas. Tradición que se remonta a muchos años en la que los jefes invitan a limoná a todos los miembros de la Compañía Romana que lo deseen. Los tiempos han cambiado y lo que menos se cata es la limoná pero se sigue celebrando con el mismo ritual.
La última cata tiene lugar en casa del abanderado que es el momento que recibe la bandera. Antonio Chaves, es el abanderado de este año. Es un cargo que se realiza por sorteo con un único requisito, haber estado presente en todas las procesiones y actos de la Compañía Romana durante la anterior Semana Santa. La casualidad hizo que el joven almagreño tomara el relevo de su padre, Antonio Chaves, que fue el abanderado de 2014.
Y la actividad continúa durante la madrugada del miércoles a jueves. La banda tocó diana a las 05:00 horas. Momento que marca el inicio de las guardias. Organizados por grupos, estarán en las dos iglesias en las que se celebra los oficios del Jueves Santo. Por ese online casino motivo, turistas y vecinos ven pasar y escuchan los tambores y cornetas de los Armaos en la mañana del Jueves.
Después del caracol que comienza y termina mucho antes que los del Viernes y el Sábado Santo, se volverán a reunir a las cuatro de la tarde para estar presente en los oficios de Madre de Dios, San Bartolomé y las Monjas Dominicas. Pero su presencia y actividad de hoy no finalizará hasta la procesión del Prendimiento en el que la Compañía Romana tiene mucho qué decir. El primer teniente será el encargado de realizar el prendimiento en la Plaza Mayor esta noche. Mañana, volverán a las calles de Almagro. El momento más llamativo y ruidoso lo protagonizarán en el interior de la iglesia de Madre de Dios: La Compañía Romana irrumpe en el templo para realizar la tradicional tamborada, diez minutos de ensordecedor ruido. Y así hasta el sábado al medio día, que harán el último caracol, un espectáculo que sorprende todos los años a visitantes y almagreños.
Curiosidades de la Compañía Romana de Almagro
Es la Hermandad almagreña que tiene los estatutos más estrictos. Se rigen jerárquicamente como si fuera un ejército. La jefatura de la compañía romana está formada por 24 jefes, cuatro de ellos son comandantes. Cada cuatro años uno de ellos es la máxima autoridad que irá acompañado de un capitán, un capitán ayudante, tres tenientes, 1º, 2 y 3º que son elegidos por riguroso orden de antigüedad y presencia en las procesiones de Semana Santa. Dentro de este grupo hay otro cargo más: el abanderado.
Este es el único cargo que no depende del lugar que ocupa el Armao en la lista de hermanos. El abanderado es elegido por sorteo, aunque eso sí con el requisito indispensable de haber participado en todos los actos de la Semana santa anterior.
Este 2015, el comandante es José Lujan. Viste armadura desde 1966. Ha sido presidente de la Compañía durante 20 años. Solo falló la Semana Santa de 1974. Ha estrenado galones. José Mestanza fue el anterior ‘Armao’ que estrenó galones de comandante hace cinco años. El comandante lleva la fuerza y la responsabilidad de la Compañía Romana durante toda la Semana Santa.
