Carmen Soánez se ha acusado al equipo de gobierno de “saltarse sus normas, según tiene necesidad de contentar a unos u a otros”. La concejala de Izquierda Unida asegura que la normativa municipal impone en toda obra pública un condicionado que se firma por parte de los servicios técnicos con la empresa encargada de ejecutarla y que incluye que, en un período de dos años, no se podrá perforar la calle. «Sin embargo, en estas calles el Ayuntamiento ha hecho una sorprendente excepción, permitiendo que poco después de la última obra se levantaran de nuevo las aceras para cablear», denuncia Soánez.
La concejala de IU se refería a las obras que se están llevando a cabo en la calle Ciruela y la Avenida del Rey Santo. “Es más que evidente que en este caso no se ha cumplido el plazo y que, además, cuando una empresa de servicios, ya sea luz, gas, etc., necesita levantar o perforar la calle para hacer cableado para cualquiera de los servicios que ofrecen, se debe siempre y en todo caso obtener el permiso correspondiente por parte del servicio de urbanismo del Ayuntamiento, el cual no debería haberse concedido por la existencia del mencionado condicionado, que sirve para garantizar la seguridad y la calidad de las obras”, señalaba.
“Creo que solo cabe -añadía Soánez- hacerle varias preguntas que espero que el concejal de Urbanismo resuelva lo antes posible. ¿Por qué se ha permitido en este caso saltándose la norma básica? ¿O se ha hecho este levantamiento sin el permiso correspondiente? En caso de esto ser así, sobre quién recaen las responsabilidades ¿El consistorio y por ende el concejal de Urbanismo? ¿O la empresa que ha realizado el levantamiento por su cuenta y riesgo? Y una última pregunta destinada al Concejal de Urbanismo ¿Qué está pasando con la garantía de las obras y el seguimiento de las obras? ¿Qué está haciendo este equipo de gobierno?”
