Luis Mario Sobrino Simal.- En la tarde de ayer se celebraba en la Residencia Universitaria Santo Tomás de Villanueva la segunda de las jornadas organizadas por Intersindical para conmemorar el Día de la Mujer Trabajadora. Un acto que ha girado en torno a la mujer en el Sahara, dentro de la campaña ¡Dales tus fuerzas!
Helena Plaza, de Intersindical Joven, explica que el objetivo de esta nueva jornada es dar voz a las mujeres saharauis que, desde hace años, viven una situación penosa, conviviendo incluso con minas antipersona en los territorios donde se asientan.
Durante la jornada se ha realizado un taller con pinturas, telas y cuero y se han recitado unos poemas de apoyo a esta causa solidaria. «Queremos que pueblo español tome aún más conciencia sobre el problema de este pueblo hermano y especialmente sobre los problemas que sufren las mujeres allí», decía Plaza.
La actual situación de crisis también ha afectado a las mujeres del Sahara. «Si esta situación nos afecta a las mujeres aquí en nuestro país podemos imaginar como la situación se agrava cruzando el continente».
Carlos, de APS Madraza, comenta que la situación en los campamentos saharauis es dramática a pesar de todas las recomendaciones de la ONU. «La recogida de alimentos entre otras acciones es muy importante para paliar una situación de extrema gravedad que ya dura más de 40 años».
Advierte de la posibilidad de que se desencadene un conflicto bélico si próximamente no hay acuerdo entre las partes implicadas. «Los países poderosos, la mordaza, el capitalismo hacen que esta situación no tenga una solución facialmente favorable para los saharauis».
Asegura que este pueblo, además de la ayuda humanitaria y material, lo que más necesitan es que se oiga su voz y sus reivindicaciones históricas. Una de ellas es el reconocimiento internacional de la RAS – Republica Árabe Saharaui Democrática como un Estado. «Países como Estados Unidos y Francia, que son países muy poderosos siempre tienden la mano hacia Marruecos. España, uno de los países de la Comunidad Internacional tampoco ayuda».
«El día a día en los campamentos, en las haimas, consiste en sobrevivir». El hacer té para las mujeres es todo un símbolo de paciencia ante el devenir. La ceremonia del té, unas tres veces al día, suele ser una ocupación principal en la mujer, aparte del cuidado de la familia y las comidas.
Jadiyetsu El Mohtar de la UNMS (Unión Nacional de Mujeres Saharauis) cuenta que hay tres vidas de mujeres relacionadas con este drama del pueblo saharaui: la mujer en la diáspora, como es el caso de las mujeres que viven en países como España, la mujer de los campos de refugiados y las mujeres que están bajo la ocupación marroquí. «Todo ello es causa de la situación de este pueblo desde que España abandonó».
El pueblo saharaui esta separado por un muro que divide no solo nuestro país sino nuestras familias. Reivindican su derecho a la autodeterminación. El fin de esta lucha es que se oigan nuestras voces y que se ponga fin a la ocupación. Quieren un referéndum justo
Por último Elvira González de REDMAMSA (Red madrileña de ayuda a las mujeres saharauis), nos dice que su labor es ayudar a la mujer saharaui en todos los campos y también sensibilización de su problemática y hacerla llegar al mundo. Nosotras trabajamos en red con otras redes de mujeres como una manera de unir fuerzas. El que aprendan correctamente el español es una de nuestras tareas para el entendimiento. La comunicación es fundamental. También se las ayuda a estudiar para que estén formadas. El tema de la igualdad también es importante para romper el molde que se tiene de la mujer musulmana como secundaria. El trabajo de empoderamiento de la mujer es un pilar en esta lucha.
