La Compañía Romana de Moral de Calatrava celebra su 140 Aniversario organizando la I Concentración de Centurias Romanas; un evento único en la provincia que pone en valor la tradición de los “armaos” en la Semana Santa de los municipios del Campo de Calatrava. El acto, que tendrá lugar el próximo domingo 15 de marzo, contará con pasacalles, concentración, desfile y exhibición de los participantes.
Para su conmemoración los “armaos” de Moral atraen hasta la localidad a siete centurias más, los participantes son: A.C. Armaos de Calzada de Calatrava; Sección de Armaos Hermandad Jesús de Nazareno de Aldea del Rey; Compañía Romana Hermandad Jesús de Nazareno de Granátula; Corporación Romana de Villahermosa; Centuria Romana de Pedro Abad, Córdoba; Banda de Cornetas y Tambores Virgen de la Luna de Villanueva de Córdoba y A.C. Imperio Romano de Bujalance, Córdoba; así como los propios anfitriones, la Compañía Romana de Moral de Calatrava.
El acto comenzará a las 10.30 de la mañana con un pasacalles por las calles de la localidad para confluir todas las compañías en la Plaza de España sobre las 11.30 horas en una concentración que les llevará hasta la plaza de Toros donde a partir de las 12.00 tendrá lugar el desfile y exhibición de cada uno de los participantes.
140 años de historia
Los Armaos, y no solo a nivel local, tienen su origen en las soldadescas barrocas que proliferaban en España durante el siglo XVII y que eran cofradías religiosas organizadas a modo de compañías al estilo militar, grupos de hombres que de forma peculiar vestidos a imitación de soldados portaban armas blancas principalmente, desarrollaban la escenificación de los principales momentos de la Pasión de Jesucristo y acompañaban a las propias cofradías en formación a toque de tambor exaltando esos momentos convirtiéndose en el hilo conductor de los actos procesionales de Semana Santa.
La Compañía Romana de Moral de Calatrava fue fundada en el año 1875, firmándose años después el documento fundacional , el día primero de julio de 1892, autorizándose por el Obispo de Ciudad Real de aquella época Casimiro Piñera y Naredo el día 12 de noviembre de ese año.
Ese año de 1875, un grupo de hombres entre de los que se ha destacado a D. Vicente Ferrari como su fundador, crean la Compañía Romana. Vicente Ferrari, italiano de nacimiento fue también su primer capitán, aunque con la duda por la documentación obrante si fue o no anterior o posterior el desempeñando de este cargo por D. Marcelino Gallardo.
Según consta en el acta fundacional de la Hermandad Compañía Romana que data del año 1892, el objeto de esta es “Dar guardia y velar a Jesús nuestro Señor en los días de Semana Santa”
En sus comienzos, la Compañía Romana, contaba con un número limitado de miembros, escaso en aquella época, y con predominio de soldados con picas, estando al frente de ella un capitán, elegido en Junta General por todos los hermanos.
Por aquella época, según acta del año 1892- serían los propios hermanos los que costearían sus uniformes, excepto las clases superiores –oficiales-, que serían sufragados por la Hermandad, para de alguna manera, distinguirse del resto de los soldados.
…” las clases de oficiales… usarán plumero llorón de color blanco, franja de galón dorado en el pantalón e insignias de graduación iguales a las del Ejercito…”
Era costumbre en aquellos años, la asistencia uniformada de toda la Compañía a entierros de miembros de la Hermandad, el hacer servicios de guardia y custodia en la iglesia los días de Semana Santa, … así también, era de obligado cumplimiento confesar y asistir a todos los actos religiosos en esos días.
La Hermandad Compañía Romana cuenta con un número de 150 hermanos, de los cuales al menos 25 son mujeres; Los hermanos activos (los que salen de “armao”) son aproximadamente un centenar, entre los que se incluye la banda de cornetas y tambores, las picas y los oficiales o mandos.
Han sido muchos los avances producidos durante los últimos años, sobre todo en la adquisición y renovación de los trajes o ropas, la confección de otro modelo de capa, algo más larga y diferente color y modelo, la recuperación de marchas antiguas y de otras nuevas, siempre dentro del estilo militar característico de los “armaos”.
La participación de la Compañía Romana se centra fundamental y principalmente en el acompañamiento procesional. En lo profano, en la madrugada del miércoles al jueves Santo los “armaos” participan en las conocidas “Dianas” por toda la localidad, amenizando la madrugada a los moraleños. De inmediato y casi a continuación, la Compañía Romana hace el “Recorrido” recogiendo a los mandos de la Compañía en sus domicilios y luego, posteriormente a por la Bandera para proseguir con la “Búsqueda del Señor” por las ermitas de la localidad.
El Jueves Santo por la tarde, se celebra la procesión del prendimiento y Flagelación; simulando aquel momento de la historia, la Compañía Romana “escondida” detrás de la plaza, el escuchar el toque de corneta avisando de la presencia del Nazareno, llega al lugar con las armas suspendidas.
La imagen de la que es titular la Hermandad Compañía Romana es la conocida como “La Oración en el Huerto”. El cabo de la escuadra de gastadores, hace prisionero a Jesús, y le echa la cuerda al cuello (antes la figura del Judas, besaba en le mejilla a la imagen) Jesús, escoltado y preso, es conducido ante Pilatos ( procesión ) . Se inicia así la flagelación. Como finalización de la Semana Santa y siendo tradición histórica, la Compañía Romana, se dispone a ofrecer a todos los moraleños la conocida como “Caracola” o “Carioca” en la Plaza de España, después de la procesión de Jesús Resucitado.