Jerónimo Romero-Nieva Lozano. UPyD Manzanares.- El Ayuntamiento de Manzanares ha sido sancionado con una multa de 101.000 euros desde la Confederación Hidrográfica del Guadiana, CHG, por vertidos ocasionados en la Estación Depuradora de Aguas Residuales Urbanas (EDAR) durante la vendimia del año 2013, mediante resolución de 27 de enero de 2015 y recibida por el Ayuntamiento dos días después, al que considera como único responsable.
Irremediablemente estas cosas tienen sus responsables políticos. Y estos tienen nombres y apellidos con independencia del curso del expediente hasta su resolución final. Pero de entrada tiene responsables políticos. Y por las responsabilidades que ostentan en el Equipo de Gobierno esos políticos son el Alcalde y el Concejal del área de Medio Ambiente.
Del coste 23.000 euros corresponden al daño provocado al dominio público hidráulico, y 77.000 euros a la consiguiente sanción, que pudo haber sido la mitad si se hubiera actuado de modo inmediato partir de la vendimia del 2013 cundo la CHG advirtió de los vertidos, y de que la depuración no era la correcta.
El pliego de condiciones técnicas sobre la depuradora estima en 73.200 el parámetro de población respecto del agua que entre en la estación. Más allá del hecho puntual de la sanción hay que replantearse si esta depuradora es suficiente para prestar servicio a las bodegas y al estado actual de uso y producción de residuos del polígono. Desde luego insuficiente en el mejor de los casos de vida optima del polígono. Todo esto sin olvidar que en gobiernos municipales anteriores podrían haberse esforzado bastante más para el desarrollo medioambiental de las instalaciones empresariales y del polígono en su conjunto.
Los responsables políticos han hecho declaraciones tratando de culpabilizar a las bodegas e incluso a nuestro vecino pueblo Membrilla. ¿Qué pensarán los empresarios y bodegueros ante este atropello político? Dicho esto sin excluir la responsabilidad, no de ahora, sino de mucho tiempo atrás que dichas empresas han tenido por la falta de depuradoras.
No es un tema de colores, sino de voluntades. Las cosas se pueden hacer mejor. Ejemplo Valdepeñas.
Las cosas se pueden hacer mejor y además no hay que ser pitagoritas, basta con estudiar lo bueno que hacen o pretender hacer otros sobre el mismo tema y sobre todos otros que en tema de los vertidos por vendimia seguro que generan muchos más residuos que Manzanares. Pongamos de ejemplo Valdepeñas donde han logrado reducir en un 50% la contaminación de las aguas residuales industriales, poniendo en valor el esfuerzo de las empresas e industrias para adaptarse a la ordenanza y solventar el problema que afectaba a la localidad, cuando las aguas residuales que se vertían a la red de alcantarillado eran altamente contaminantes, lo que provocaba colapsos en la antigua depuradora y posteriores sanciones de la Confederación Hidrográfica del Guadiana. Previa negociación con los sectores implicados, el Consistorio creó una ordenanza fiscal para gravar proporcionalmente el grado de vertido, para lo que se instalaron arquetas medidoras, además de que las empresas realizaran una pre-depuración de sus vertidos para conseguir que el proceso de depuración fuera menos complejo y más eficiente, lo que les beneficia además con una reducción fiscal en la facturación por sus vertidos. Hace ya casi 4 años que la nueva depuradora de Valdepeñas comenzó a funcionar, y desde entonces, y gracias a la política ambiental de su equipo de Gobierno y al esfuerzo de las empresas de la localidad, se obtienen unos rendimientos medios en depuración del 90%. Esto no sólo ha hecho que las aguas depuradas al cauce del Jabalón cumplan con los parámetros definidos en la legislación ambiental, ayudando así a mantener el caudal ecológico del río, sino que el Ayuntamiento ha conseguido reducir en un 40% su factura en depuración.
