Miguel Ángel Mora Cuesta.- Querida Agnieszca: Te escribo la presente para pedirte disculpas en nombre de los ciudadrealeños de bien tras lo vivido en el día de ayer en tu persona y la de tus hijos.
Te pido disculpas por el mareo que has sufrido con el Centro de la Mujer y las malas soluciones encontradas en cada momento que te han obligado a contar tu historia en múltiples ocasiones; te pido disculpas por la falta de rapidez por parte de una consejería con viviendas vacías que, durante un año, no ha sabido procurarte una teniendo preferencia como mujer víctima de malos tratos con menores a su cargo; por unos Servicios Sociales locales que no han tenido respuesta a tu problemática.
Te pido disculpas por los fallos de un sistema de protección al más débil que se nos desmorona por muchas faltas de voluntades. Por una Concejalía de Servicios Sociales que no sabe coordinarse con la Concejalía de Igualdad, con la Consejería de Bienestar Social, con Fomento.
Te pido disculpas porque mi ayuntamiento y la administración en general te resuelven el problema separándote de tus hijas cuando más necesitas del calor familiar.
Quiero que sepas, Agnieszca, que todos los culipardos no somos iguales, que a pesar de lo complicado de tu desahucio la PAH acudió con rapidez por ver si te pueden ayudar, que las Hermanas de la Cruz y otros vecinos como reconoces te han venido ayudando con ropa y alimentos. Ten por seguro que continuarán haciéndolo cada uno en la medida de sus posibilidades.
A pesar de la descoordinación administrativa, a pesar de la destrucción de lo público porque no resulta rentable, ten por seguro que cuentas con el apoyo de la sociedad ciudadrealeña que de un modo u otro terminará ayudándote a salir de la situación en que hoy se encuentra tu familia.
Recibe un fuerte abrazo en nombre de quienes entendemos que esto ha de cambiar porque no se ha obrado con la suficiente diligencia ni coordinación a la hora de proponerte soluciones desde la administración, sobre todo a nivel local que se ha lavado las manos dejándolo toda la responsabilidad en el cuidado de las menores y las decisiones de los equipos de menores de la Junta.
