La web Tablasdedaimiel.com ha publicado hoy un artículo titulado «Desvelamos lo que el Patronato de las Tablas no quiso contar» en el que denuncia el «veto a periodistas» y la «restricción informativa» de los responsables del Patronato de las Tablas de Daimiel reunido ayer y ha vuelto a esgrimir los informes presentados por expertos como el director Carlos Ruiz de la Hermosa o Santos Cirujano para alertar de que los vertidos están acabando con las praderas de vegetación subacuática del Parque Nacional.
Según la web, en la reunión del Patronato celebrada ayer «ha quedado bien expuesto que el humedal tiene agua (1.900 hectáreas) pero carece de la biodiversidad que cabría esperar de semejante estado hídrico. Cantidad sí, calidad no».
«Una circunstancia», prosigue, «de la que viene alertándose reunión tras reunión». Según la web, en su informe sobre la situación del parque nacional, su director Carlos Ruiz de la Hermosa ha vuelto a incidir en ello. «La principal razón aducida serian los vertidos desde las poblaciones aledañas a los ríos Azuer, Gigüela y Guadiana que llegarían al parque acabando con las praderas de vegetación subacuática que dan de comer, sobre todo, a los patos. Esta tesis es compartida por Santos Cirujano, científico del CSIC y miembro del Patronato, que lleva años denunciando la falta de voluntad por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadiana en controlar los vertidos urbanos e industriales a los ríos que llegan a Las Tablas de Daimiel».
Tablasdedaimiel.com se ha referido también a las consideraciones del biólogo de la Universidad de Castilla-La Mancha, Máximo Florín, y miembro del Grupo de Investigación en Hidroecología, que apuntaba en el Patronato que la excesiva cantidad de peces, sobre todo carpas, podría ser el problema.
«Las carpas remueven los fondos logrando enturbiar las aguas y provocando dos consecuencias: que los sedimentos contaminados del suelo vuelvan al agua y que la luz, necesaria para las plantas subacuáticas, no pase debido a la turbidez del agua». En este sentido, el director del parque, ha informado de los trabajos de retirada de carpas (hasta 5.000 kilos), si bien no ha vinculado estas labores con los resultados de la investigación del equipo de Florín, ni que sea la causa de la pérdida de biodiversidad.
La web llama la atención sobre el hecho de que «sí parecen coincidir cada día más miembros del Patronato en que Las Tablas de Daimiel ha dejado de ser un sistema fluvial (un río que se desborda, en definitiva), transformándose en un sistema embalse con las consecuencias que de ello se deriva, en cuanto a cambios en las características por las que fue protegido. Si a ello unimos los vertidos que llegan por los rios que alimentan el sistema, Las Tablas son, cada día, menos un humedal y más un pantano artificial formado por presas, como la del Morenillo, que alteran el ecosistema y retienen, también, la contaminación».
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