Por más que el vado peatonal de la imagen incluya una baldosa con el símbolo de la silla de ruedas, resulta evidente que se trata de un punto completamente inaccesible. Fotografiándose en este cruce absurdo, situado en las proximidades del Hospital General, en la calle Obispo Rafael Torija, Francisca Gómez Ortigosa ha denunciado este error urbanístico para que sea subsanado lo antes posible.
La Asociación para la Ayuda a las Personas con Discapacidad Física de Ciudad Real (Apadif) y la candidata socialista a la Alcaldía, Pilar Zamora, se han hecho eco de la queja de esta ciudadana que, según afirma, mantuvo una discusión acalorada con la alcaldesa, a la que ofreció su silla de ruedas para que se diera un paseo por las calles de Ciudad Real.
Me gustaría saber quien es el responsable último de estos desaguisados urbanísticvos, estos atentados contra la accesibilidad pero desde luego esta no es la única barrera arquitectónica que hay en esta «ciudad…que no enamora».
Diré dos puntos más, uno en la calle caracola justo al lado de unos contenedores junto al centro Guadiana. Otro en la Plaza de la Puerta de Sta Maria junto a un estanco. ¡Y solo he citado dos!
Lo de la Plaza de la Puerta de Sta Maria junto a un estanco, habría que completar esa inaccesibilidad ha toda la calle Ciprés, por sus aceras en mal estado y siempre ocupadas por coches mas aparcados.
Un año estuve viviendo en esa calle, y ha diario veía a una pareja de ancianos que tambien vivia por allí, que ella iba en silla de ruedas, y él le empujaba calle arriba por el asfaltado. Penoso.
Tienes razón y eso que solo estamos hablando de barreras arquitectónicas en pasos de cebra…
Áreas responsables MOVILIDAD Y URBANISMO.
He querido decir calle Caracola…
Lo de esta corporación es una vergüenza día sí y día también.
Yo a los técnicos les ponía en una silla de ruedas y a la calle a pasear. Que pedazo de inutil y los que lo hicieron, debián de haber dejado la pala y decir que lo hicieran los técnicos. No se puede consentir, tanta fechoría, ahora lo tendrás que deshacer y otra vez a gastar dinero que, como no es suyo, no les importa nada.
Cuánta mala leche y que poco agradecimiento. Yo también me fijo en los muchos que están bien
Se nota que nunca has llevado un cochecito de niño o un carrito de ruedas,