Multimedia.- La tradicional carrera de San Silvestre de Carrión de Calatrava ha reunido este año a más de 200 corredores, desde niños a mayores, que realizaron la prueba en un circuito urbano de algo más de cuatro kilómetros para los adultos y de un kilómetros para los más pequeños. Para hacer frente al frío, los carrioneros utilizaron los disfraces y las risas, de modo que el buen humor llenó las calles del pueblo durante la carrera, gracias también a los ánimos del público que ocupaba las aceras para animar a los corredores.
Entre los deportistas estaba la propia alcaldesa Ana María López, que no faltó a esta tradición deportiva y lúdica anual, e hizo el recorrido completo disfrazada de duende.
Al final de la prueba, se entregaron trofeos a los ganadores que, junto al resto de corredores, pudieron reponer fuerzas y el calor con los aperitivos y migas que preparó la Asociación ‘Los Mejores’ para ellos.