Como si de la estrella de Belén se tratara, una gran bola de fuego sobrevoló la provincia de Ciudad Real sobre las 21,06 horas de la pasada Nochebuena, justo cuando se retransmitía el discurso navideño de Felipe VI. Se trata, según los investigadores, de un «bólido rozador», una roca que sobrevuela la atmósfera para proseguir posteriormente su camino por el espacio.
Según ha informado el Complejo Astronómico de La Hita (La Puebla de Almoradiel, Toledo) en nota de prensa, la roca pesa 100 kilos y apenas mide un metro de diámetro. Entró en atmósfera a 80.000 kilómetros por hora. En España, su recorrido se inició entre Murcia y Almería y en la vertical de Ciudad Real alcanzó su altura mínima, unos 75 kilómetros. Después, a cien kilómetros de la costa gallega abandonó la atmósfera terrestre.