«Argamasilla de Calatrava es, a nivel provincial, la localidad donde más a cuenta sale vivir», ha asegurado la alcaldesa Jacinta Monroy. «Este año que ahora termina, los vecinos apenas pagaron 617 euros en impuestos, pero recibieron 644 en infraestructuras y servicios. Es el exponente de unas cuentas regidas por la política de racionalización presupuestaria que está caracterizando la gestión del equipo de Gobierno», sostiene la alcaldesa.
La alcaldesa daba cuenta este lunes en rueda de prensa del balance de lo realizado en 2014, datos que ya ha compartido con el Consejo de Participación Ciudadana, «haciendo así gala del espíritu de transparencia». Un año que se va a cerrar con superávit para las arcas municipales tras haberse alcanzado una “estabilidad presupuestaria” de la que la regidora hace también partícipes a trabajadores municipales y ciudadanos.
«De hecho, la deuda viva del Consistorio se ha reducido al 34,5% después de una reducción de 20 puntos en estos tres años y ello a pesar de que el Gobierno regional sigue debiendo a Argamasilla de Calatrava 150.000 euros de 2013, más lo correspondiente de este año para servicios tan fundamentales para los mayores como son las estancias diurnas, la ayuda y la comida a domicilio. Todos ellos y los relativos a infancia los seguirá sosteniendo el Consistorio, aun a pesar de carecer de competencias, gracias a su fortaleza financiera», dice Monroy.
«Esta filosofía de apoyo a las personas y familias que más lo requieren se generaliza para todos los ciudadanos con la carga impositiva más baja de toda la provincia en municipios de hasta 10.000 habitantes y una de las más reducidas en el resto del ámbito nacional. Obtenemos menos ingresos, lo cual es bueno para los habitantes porque no tienen un gran nivel impositivo y por el contrario cada habitante obtiene de los recursos públicos 644,83 euros”, explicaba la alcaldesa con datos en la mano.
A su juicio, «eso supone, comparativamente hablando, que por ejemplo si en esos otros municipios de la provincia sus vecinos reciben 95 euros de protección social, en Argamasilla de Calatrava la cifra llega a los 158 euros. Y así sucede en otros ámbitos, lo que hace posible que esta población a sus jóvenes ofrezca becas, facilidades de transporte y refuerzo escolar, lo que también repercute en ofrecer primer trabajo y experiencia a docentes recién titulados».
Porque el empleo es otra de las preocupaciones de las que ha hablado la alcaldesa. Este año el Ayuntamiento ha rubricado 600 contratos entre personas que requerían de ingresos. Monroy reconoció «el hito para un municipio que llegó a rozar los 800 desempleados y que hoy está en 680. Aunque no estamos bien, las cosas van avanzando”, matizaba la regidora en un tono optimista.
Más allá de las posibilidades que supone contar con planes de empleo, lo cierto es que la iniciativa privada sigue siendo clave en paliar las cifras del paro. En este periodo ocho empresas se han creado en la localidad en diferentes sectores, incluido el deportivo. «Sobre este aspecto cabe destacar el crecimiento también de la dotación pública con la puesta en marcha de pistas de ‘skate’ y del fomento municipal del deporte entre todas las edades», ha dicho.
«Una de las claves del despegue económico estará en la disponibilidad para las industrias de más de 300.000 metros cuadrados de suelo. Sin embargo, la falta de recursos para poder dotar de los servicios necesarios a un espacio todavía rústico, imposibilita el ofrecimiento. En ello juega también un papel fundamental la puesta en marcha del POM, que a su vez está pendiente de que la Consejería de Fomento articule las partidas necesarias para el acondicionamiento del río Tirteafuera y, con ello, se justifique el imprescindible ‘Plan de Inundabilidad’», ha relatado.
En materia hidráulica este año ha sido vital para Monroy «otra de las infraestructuras que se habrá de ejecutar en el año venidero, la depuradora, toda vez que el Ayuntamiento tuvo que hacerse cargo hace año y medio de la gestión del filtro verde al que sustituirá la tan demandada EDAR, a ejecutar por el Estado con fondos europeos». Sobre este particular, Jacinta Monroy ha referido que “ya hemos mantenido contactos con el ingeniero encargado de la redacción del proyecto para ver propuestas».
Los diez millones de euros planificados en principio para su ejecución se sumarán en 2015 a otros cuatro más que, en este caso, se destinarán al arreglo de la carretera que une a Argamasilla con Villamayor de Calatrava. La alcaldesa confía en que en ambas inversiones puedan ser subcontratadas empresas rabaneras, con lo que ello también tendrá de positivo para el municipio y sus gentes.
Monroy Torrico cree positivo el trabajo realizado este año, en la línea de toda la legislatura y reconoce que “si hubiese habido dinero público, hubiésemos acometido más infraestructuras pero con lo que tenemos hemos dado de sí, atendiendo lo más importante para nosotros que son las personas, que no deben de sufrir por cuestiones económicas o desigualdades sociales o por marginalidad y eso es lo que caracteriza a un pueblo digno como el nuestro”.
«Virtudes que han seguido atrayendo a personas a vivir en Argamasilla de Calatrava, de manera que su número de habitantes no sólo se mantiene sino que experimenta un ligero aumento. Es por ello que el Ayuntamiento se ve en la necesidad de crear un nuevo parque público en un barrio de nueva creación como es el de Santa Bárbara, muestra de que llegan nuevos vecinos a las nuevas zonas residenciales», ha dicho.
Este dato poblacional se ve «endulzado» con los últimos datos en materia de seguridad ciudadana que, como ha indicado el teniente de alcalde José Antonio García Serrano, también presente en el desayuno informativo junto a otros ediles del equipo de Gobierno, «los delitos han decrecido en el último trimestre en un 70%». En ello tienen mucho que ver los cuerpos y fuerzas de seguridad y, particularmente, como ha referido el concejal, una “Policía Local muy implicada con su pueblo y fruto de ello ha sido la condecoración a su jefe, Lorenzo Lobato, con la Medalla al Mérito Policial de Castilla-La Mancha”.
Por explotar queda por delante en este municipio “amable”, que «sigue eliminando barreras arquitectónicas de sus calles y de muchas mentes y que apuesta decididamente por la cultura, todo aquello que tiene que ver con el turismo», señala. Uno de sus alicientes, la Casa de la Inquisición, sigue recuperando estancias y se quiere poner en valor en el marco del Grupo de Acción Local del Valle de Alcudia, que va a invertir un millón de euros en todo su territorio para fomentar las visitas turísticas.