Quince años de intenso trabajo en la investigación de los recursos cinegéticos, en el desarrollo de proyectos de alto impacto y de contribución al avance científico y socioeconómico de Castilla-La Mancha. El Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) celebra su decimoquinto aniversario de dedicación al estudio de diversos aspectos relativos a la caza, entendida esta como un recurso natural renovable, en virtud del trabajo conjunto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Ubicado en el Campus de Ciudad Real, el equipo humano del IREC está integrado en la actualidad por unos setenta profesionales, en su mayoría investigadores adscritos a alguno de los seis grupos del centro: Biodiversidad genética y cultural, Ciencia animal aplicada a la gestión cinegética, Ecología, comportamiento y biología de la conservación de ungulados; Gestión de recursos cinegéticos y fauna silvestre, Toxicología de fauna silvestre y, por último, Sanidad y biotecnología.
En el primer acto institucional de este decimoquinto aniversario, el vicerrector de Investigación de la UCLM e investigador del IREC, Julián Garde, ha recordado “con agradecimiento” a quienes hicieron posible la creación del instituto: el exrector Luis Arroyo, el expresidente del CSIC, César Nombela; y la que fue la primera directora del centro, Sacramento Moreno. Garde ha señalado, asimismo, que el IREC es “el mejor instituto de investigación de la Universidad de Castilla-La Mancha” en rendimiento científico, y ha expresado el deseo de la institución académica de contar con más unidades asociadas con el CSIC.
El vicepresidente de Organización y Relaciones Institucionales del CSIC, José Ramón Urquijo Goitia, también se ha referido a Arroyo, Nombela y Moreno como los primeros responsables de la creación del IREC, un instituto que materializa la presencia del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en Castilla-La Mancha y que, a su juicio, está entre los primeros en productividad.
Por su parte, el director del Instituto, Jorge Cassinello, ha destacado la importancia de un centro “que ha conseguido posicionarse en la primera línea de los institutos de investigación internacionales dedicados al estudio científico de las especies de caza, su entorno y su gestión sostenible”. Según explicó, “la progresiva incorporación de investigadores de plantilla, tanto a través del CSIC como de la UCLM, ha conformado el desarrollo de líneas de investigación diversas teniendo cada vez más en cuenta los aspectos socioeconómicos que determinan la viabilidad de poner en práctica medidas sostenibles de conservación y desarrollo rural”. El responsable del IREC terminó señalando que “afrontamos el futuro con ilusión, seguros de estar abordando con rigor científico problemáticas que puedan ayudarnos a alcanzar una gestión de la naturaleza y del mundo rural cada vez más respetuosa con nuestro entorno”.
Hombre y fauna
Para conmemorar sus primeros quince años de vida, el IREC ha preparado un programa de actividades de carácter eminentemente divulgativas y abiertas a la sociedad. Entre ellas, la exposición que se ha inaugurado hoy en su sede y que lleva por título Hombre y Fauna: Ciencia para la convivencia entre naturaleza y sociedad. La muestra repasa las principales líneas de investigación en las que se trabaja en el IREC y muestra ejemplos de los resultados científicos más destacables. Se trata de un recorrido a lo largo de sus quince años de andadura, en la que se muestran diferentes enfoques científicos que contribuyen tanto a comprender problemas que aparecen entre hombre y fauna como a buscar soluciones a los mismos.
Según explican las comisarias, Beatriz Arroyo y Almudena Delgado, la exposición “intenta transmitir al público general la necesidad y el interés de integrar esta diversidad de disciplinas científicas con el objetivo de mejorar la gestión y conservación de fauna en el mundo actual”.
Este objetivo se materializa en quince paneles expositivos que abordan temáticas como las enfermedades compartidas entre fauna silvestre, ganado doméstico y hombre; los conflictos ecológicos entre actividades humanas y conservación de fauna; la gestión cinegética y su impacto en el medio ambiente; estudios genéticos para la conservación de las especies; técnicas de reproducción asistida aplicadas a la gestión y conservación de fauna; o los problemas asociados a las sustancias químicas utilizadas por el hombre que son tóxicas para la fauna silvestre.
