El secretario provincial del Partido Popular, Antonio Lucas-Torres, ha calificado la presencia de Pedro Sánchez en la provincia de “lamentable y penosa”, ya que ha tenido que desplazarse a Ciudad Real “para poner orden y arreglar el desastre de García-Page en Castilla-La Mancha”.
En opinión de Lucas-Torres, “el despotismo con el que está actuando Page en los últimos tiempos, fruto de su debilidad interna, ha llevado a situaciones de trato desigual entre sus afiliados, dependiendo de si los candidatos son de Valdepeñas, Alcázar de San Juan, Puertollano o Ciudad Real”.
Lucas-Torres ha lamentado la “grave” situación que está atravesando el Partido Socialista de Valdepeñas, con la dimisión en bloque de su ejecutiva, de su secretario general y de algunos concejales del Ayuntamiento que han presentado, «situaciones que se vienen sucediendo en toda la región y que evidencian el fracaso organizativo y el caos que está generando en el partido el máximo responsable de los socialistas castellano-manchegos».
Para el secretario provincial del Partido Popular, “la incompetencia de García-Page ha abierto un panorama desolador en el que se pone de manifiesto el hecho de que no haya un criterio firme para la convocatoria de primaras y, por el contrario, se admitan o no en función del antojo de Page en cada momento, dejando claro que hay afiliados de primera y de segunda en el PSOE de Castilla-La Mancha”.
El desorden ocasionado tras los últimos acontecimientos deja en evidencia, según Lucas-Torres, “a un Partido Socialista que, pese a defender la democracia interna respecto a la libre elección de sus candidatos, lo que realmente ha demostrado es el autoritarismo y descrédito de una formación que está viviendo sus peores momentos”.
Para Lucas-Torres, “no es momento de dar lecciones” y le recuerda a García-Page que “a los ciudadanos no se les ha olvidado quienes fueron los que arruinaron esta comunidad y los que hundieron la Sanidad, la Educación y los Servicios Sociales”.
A juicio del secretario general, “la presencia de Pedro Sánchez en Ciudad Real es la radiografía perfecta de la debilidad de un partido socialista, del partido de García-Page en la región, que no sabe cómo va a explicar a cómo los socialistas fueron capaces de administrar el dinero público, el dinero de todos los ciudadanos, de una manera tan atrevida y faltándole el respeto a todos los castellano-manchegos”.
