Daimiel Noticias.- La modificación de las Ordenanzas Fiscales que se aprobó anoche en Pleno con los votos del Grupo Municipal Popular rebajará en 2015 el recibo del IBI “entre un 2% y un 3%”; alrededor “de un 6%” el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica y un 0,5% las tasas de agua y basura, al aplicarse en éstas el IPC negativo de 2014, según indicó el concejal de Hacienda, José David Gómez-Cambronero.
El resto de tasas municipales mantendrán los precios de 2013, a excepción de la que grava la apertura de comercios que “se reduce a la mitad” y de la que fija el precio de las entradas individuales al yacimiento arqueológico La Motilla, que subirán de 5 a 7 euros “para equilibrar el coste” estimado inicialmente.
En su exposición, Gómez Cambronero, destacó que “por primera vez en 24 años” bajará el Impuesto de Vehículos y que, con la segunda rebaja consecutiva del tipo impositivo del IBI, que se quedará en un 0.87, el Partido Popular “cumple con su compromiso electoral” en esta materia. Una rebaja de impuestos que el concejal de Hacienda comparaba con la primera década de siglo cuando, “en los años de bonanza económica”, los gobiernos socialistas doblaron el recibo de la contribución entre el año 2000 y 2010. “Nosotros en una época donde el Ayuntamiento ingresa una media de 8 millones de euros menos al año y teniendo el nivel porcentual de deuda más alto de Castilla-La Mancha, hemos logrado bajar los impuestos, además de rebajar la deuda”, destacó.
Asimismo, Gómez-Cambronero anunció la bonificación de un 90% a lo que fiscalmente se conoce como “diseminados”, es decir, a las construcciones en suelo rústico. Esta bonificación se extenderá tanto a los propietarios que ya tenían regularizadas esas construcciones como a los que ahora empezarán a pagar por las mismas, tras las inspecciones que está llevando a cabo la Administración.
Tanto PSOE e Izquierda Unida votaron en contra de unas modificaciones de impuestos y tasas que, a juicio de las intervenciones de sus portavoces, no tienen en cuenta a los sectores más perjudicados por la crisis. Así, el concejal de Izquierda Unida, Juan Julián Rodríguez de la Rubia, echaba de menos “medidas concretas para las familias con menos ingresos” y calificó de electoralista la rebaja en el Impuesto de Vehículos.
Ambos grupos presentaron una serie de enmiendas que en la mayoría de los casos seguían lo expuesto en el debate fiscal del pasado año y que, por ejemplo, en el caso del PSOE se concretaban en “una bonificación del 100% en el recibo del IBI de las familias sin ingresos” o “la rebaja en un 50% de las tasas de Cultura o Deportes para desempleados de larga duración”. En su intervención la portavoz socialista, Cristina Maestre, tildó de “tomadura de pelo” “los ocho céntimos” que, según sus palabras, bajará la tasa de basura y destacó que la subida del valor catastral de las viviendas que se contempla en la revisión del IBI perjudicará “en el IRPF, en los cálculos de las plusvalías o en la concesión de becas”.
En la réplica, Gómez-Cambronero afeó a los portavoces de la oposición que “una vez más” esperaran hasta el Pleno para proponer unas enmiendas que algunas de ellas, dijo, “hasta son ilegales porque no cumplen los criterios de la Ley de Haciendas Locales”. Así, tras reiterar que en 2015 “los principales impuestos y tasas” que pagarán los daimieleños van a bajar, las propuestas de la oposición quedaron desestimadas en la votación final.
Ordenanza Transparencia
Donde sí hubo unanimidad entre los tres grupos municipales fue en la creación de una Ordenanza Municipal de Transparencia. Esta moción que partió del grupo Socialista finalmente se aprobó con una moción conjunta donde PP, PSOE e IU se comprometen a agilizar la trasposición de la Ley de Transparencia y Buen Gobierno al Ayuntamiento de Daimiel. Entre otras cuestiones, esa ordenanza permitiría, como explicó Maestre, que el ciudadano con todo detalle conozca los convenios, contrataciones o nivel de ejecución presupuestaria del Ayuntamiento.
En aras de transparencia, desde Izquierda Unida también se pidió que paralelamente se pudiera finalizar la reforma del Reglamento Orgánico Municipal y del de Participación Ciudadana, cuyos borradores llevan debatiéndose las dos últimas legislaturas, como recordó Galo Sánchez-Bermejo.
Un guante que recogió la portavoz del PP, María Dolores Martín de Almagro, quien a su vez recalcó la necesidad de apostar por una política transparente “cuando por algunos a todos se nos mete en el mismo saco”. En ese mismo sentido, el alcalde, Leopoldo Sierra, aprovechó para destacar y agradecer la honradez de los 17 concejales de la Corporación.
Más mociones
También salió adelante con el sí de todos los grupos la moción que presentó el PSOE con el objetivo de ofrecer más alternativas a los jóvenes con discapacidad que desean integrarse en el mercado laboral. “Pedimos que se cree un nuevo recurso y que se estudie caso por caso”, apuntó la concejal socialista Pilar Estudillo. Una voluntad a la que, tras una primera intervención que suscitó dudas en la oposición, se sumó la concejal de Servicios Sociales, Maria del Carmen Torija, anunciando su apoyo a la moción. Previamente, repasó todos los recursos existentes en la región y el municipio para este colectivo.
La única moción que no se aprobó fue la que Izquierda Unida presentó en defensa del río Azuer y donde se exigía la paralización de las obras de limpieza en el cauce que actualmente ejecuta la Confederación Hidrográfica del Guadiana. Una actuación que para Sánchez-Bermejo debería haberse planteado “con bisturí” y no a base “de grandes maquinas” que, a su juicio, convertirán el río “en una autopista de agua”. “Lo habéis hecho a lo bestia”, recalcaba.
Una crítica “a las formas” de ejecución del proyecto que compartía el concejal socialista, Rafael Díaz del Campo. Tras pedir que no se cayera en el mismo error que sucedió con el Guadiana, Díaz del Campo propuso la opción de realizar “dos o tres sondeos en la vega” que asumieran el exceso de agua de las crecidas y “así apoyar la recarga del acuífero”.
Mientras, el concejal de Medio Ambiente y Agricultura, Gregorio Díaz del Campo, recriminó a Sánchez-Bermejo que saque “las cosas de contexto” y defendió que el proyecto de Confederación cumple las normas ambientales preceptivas. Díaz del Campo insistió en que estas obras buscan “salvaguardar a la ciudadanía, sobre todo “a los vecinos más cercanos” al cauce, del peligro de inundación que se observó en la crecida de 2010 y especialmente en la de 2013. En su respuesta, el concejal de Medio Ambiente también anunció que se van a tapar los rotos del río para evitar que el Azuer tenga contacto con el agua de las balsas que se han formado al lado de la autovía A-43.
Además del debate de estas mociones, el Pleno rubricó un convenio que permitirá poder tramitar desde el Ayuntamiento el cambio de domicilio en el permiso de circulación sin necesidad de desplazarse a Ciudad Real y la conversión definitiva de las dependencias del Silo en un almacén municipal.
Finalmente, a instancia de una pregunta de Izquierda Unida, el concejal de Promoción Económica, aseguró que la deslocalización de Alvinesa del casco urbano podría ser una realidad a principios de 2015.