Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF han denunciado en un comunicado que la modificación propuesta en el proyecto de Ley de Parques Nacionales «da garantías a los intereses particulares y hace que estos prevalezcan por encima de la conservación y el uso público de los parques». En este sentido, se movilizan conjuntamente «para evitar que se hurte a toda la sociedad su patrimonio natural en beneficio de unos pocos».
«La Red de Parques Nacionales, las quince joyas de la naturaleza española con un siglo de historia, va a perder su estatus de máxima protección si salen adelante las enmiendas que el Grupo Parlamentario Popular presentó ayer, lunes 20 de octubre, en el Senado, durante la tramitación del proyecto de Ley de Parques Nacionales. La prohibición de actividades como la caza, la pesca, las actividades de explotación forestal masiva y un largo etcétera queda supeditada a la voluntariedad de los propietarios o a la indemnización, de forma que la protección de los parques se ve gravemente amenazada», explican.
Las cinco grandes organizaciones de conservación de la naturaleza en España, Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF consideran que el proyecto de Ley «debilita la cohesión y fortaleza de la red y destruye las herramientas de conservación de cada espacio. Tras presentar un mal proyecto de Ley en el Congreso de los Diputados, el Partido Popular ha aprovechado ahora el paso por el Senado para colar una serie de enmiendas que empeoran todavía más el texto legal».
«Las enmiendas dan amplio margen de maniobra a los titulares de derechos particulares para que puedan practicar actividades de todo tipo en estos espacios protegidos», indican.
«La enmienda 278 plantea, sencillamente, la no entrada en vigor del régimen jurídico de protección de un parque nacional hasta que el propietario titular de los terrenos no lo decida. Se trata, por tanto, de un hurto genérico del interés general declarado en la ley que, de esta forma, queda sencillamente invalidado. A partir de la nueva ley no hay normas derivadas de un parque nacional, que se limita a ser un mera marca, no precisamente de calidad», aseguran.
A su juicio, «una enmienda así habría permitido, con toda normalidad, proyectos que fueron parados en su día como la construcción de la carretera costera de Doñana, las maniobras militares en Cabrera, las transformaciones hidroeléctricas en Aigües Tortes, la urbanización de Picos de Europa y las actividades mineras en el Teide y en Picos de Europa».
«Por otra parte, la enmienda ampara cualquier derecho real que pueda existir a futuro sin ningún tipo de limitación. Si mañana aparece petróleo en Doñana, se podrá explotar; y si pasado mañana un Ayuntamiento recalifica medio Picos de Europa, se podrá urbanizar. La modificación presentada por el grupo popular, incumple todos los principios de interés general y relega la primacía de lo público y el interés por la conservación. Ya no hay ningún lugar en el territorio nacional en donde conservar el patrimonio natural sea el máximo fin. Los parques nacionales no ocupan ni el 1% del territorio. Es lamentable que un Estado no sea capaz de mantener a salvo de la explotación ni siquiera esa ínfima porción de su territorio», sostienen los ecologistas.
Nueva propuesta
Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF consideran que la Ley de Parques Nacionales es una pieza angular del sistema de protección de la naturaleza en nuestro país y no conciben que sea puesta en peligro para favorecer intereses privados. Por eso, piden al Partido Popular «la retirada de esta ley y solicitan al resto de partidos la repulsa absoluta a esta propuesta. En defensa del bien común, movilizaremos a la ciudadanía para evitar que el patrimonio de todos sea puesto en manos del interés de unos pocos».