Desde la Concejalía de Infancia, Juventud y Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Bolaños de Calatrava, junto a la Fundación Cepaim, responsable del programa para la promoción y la convivencia intercultural en el ámbito educativo, financiado por el Fondo Social Europeo y cofinanciado por la Dirección General de Migraciones, se ha puesto en marcha la II Jornada ciudadana de Juegos populares y tradicionales, denominada: “LA PLAZA ES TUYA” con el fin de recuperar divertidos y saludables juegos que un día dieron vida a las calles de muchas de nuestras poblaciones.
Alrededor de 600 menores, junto a cientos de adultos, jóvenes y mayores, llenaron la plaza de Bolaños este viernes para disfrutar de la tarde con juegos populares liderados por los que un día fueran niños y niñas, los mayores de la localidad, quienes transmitieron el entusiasmo de su niñez y el encanto de la sencillez de los juegos de antaño a los más pequeños.
En palabras del alcalde, Miguel Ángel Valverde “sin la inestimable colaboración e implicación de tantas personas voluntarias, y el trabajo de los técnicos municipales, una jornada con esta alta participación no podría celebrarse en nuestra localidad”.
Para Rocío Plata, Concejal del Área de Infancia del Ayuntamiento de Bolaños, “mediante la implicación de todas las áreas, se ha otorgado a esta iniciativa un carácter transversal, donde una de las claves para llevarla a cabo es la participación ciudadana de todas las edades, que permite interactuar a vecinos y vecinas en una experiencia donde el valor de la convivencia y la colaboración destacan plenamente, haciendo que miembros mayores y pequeños de una misma o distinta unidad familiar, aprendan los unos de los otros, a la par que se divierten y se sienten útiles en un entorno lúdico y educativo. En este sentido, las reuniones con los vecinos y vecinas de la localidad, acercando todas las propuestas posibles, y construyendo un proyecto comunitario donde el pueblo es el protagonista, ha funcionado una vez más”, ha manifestado.
Esta segunda edición es el resultado de la demanda de muchos ciudadanos y ciudadanas que tras disfrutar el pasado año, compartiendo un rato muy ameno, han querido repetir en esta experiencia sobre la que ellos mismos dicen “que hay que llenar la plaza de esta manera más veces con propuestas así”.
Mediante un trabajo multidisciplinar, impulsado desde distintas concejalías del Consistorio, para ofrecer alternativas de ocio a los más pequeños, esta actividad persigue el fomento de la sensibilización con otro tipo de entretenimientos propios de nuestros antepasados que, además de formar parte de nuestro patrimonio cultural, contribuyen a la socialización.
Las finalidades perseguidas por “La Plaza es tuya” en esta segunda edición, además de fomentar la participación ciudadana de los vecinos, tienen que ver con ofrecer alternativas de ocio a la población infantil y juvenil, dinamizándola, recuperar juegos populares y tradicionales como un elemento cultural de nuestra localidad, dar a conocer juegos tradicionales de otras culturas, fomentar el juego físico en espacios públicos de Bolaños, lejos de juegos sedentarios, y crear, además un escenario de convivencia intercultural e intergeneracional.
Para poner en marcha el proyecto, junto a 5 técnicos y técnicas del Ayuntamiento, expertos en educación y tiempo libre, y una de la Fundación Cepaim, estuvieron trabajando un total de 60 personas de forma coordinada y desinteresadamente. Entre las personas voluntarias hubo miembros de diversas asociaciones locales pertenecientes al Hogar del Jubilado, Asociación de vecinos del Barrio de Santa María, Asociación cultural y deportiva JEYMA, las personas usuarias del Centro de Atención a Personas con Discapacidad Francisco Javier Sánchez Lara, de los clubes deportivos como el de Balonmano local, la asociación prestadora de servicios a la juventud SALTA, ciudadanos voluntarios de forma individual, además de los monitores en prácticas de los que dispone el propio Ayuntamiento. El número de voluntarios se amplió sobre la marcha con personas que quisieron colaborar al llegar a la plaza, poniendo su granito de arena. Durante las reuniones periódicas los voluntarios dieron su visión de lo que pretendían hacer, diseñando y eligiendo sus propios juegos.
El funcionamiento de las actividades consistió en la economía de fichas (incentivos) para garantizar que los todos los menores participaran en los juegos tradicionales. Se hizo entrega de una ficha a cada participante, de forma que, para poder completar un bono que le permitiera participar en el sorteo de 4 lotes de juegos populares y tradicionales, debía pasar al menos por 8 de las actividades propuestas.
A través de una metodología constructiva y por descubrimiento, se otorgó a los niños y jóvenes la oportunidad de elaborar el material de los juegos en los diferentes talleres llevados a cabo previamente, donde aprendieron cómo elaborar el material, la mecánica de cada juego en el que se usa, además de cómo y dónde se jugaba en el pasado.
Se otorgó así la posibilidad, tanto a los niños, niñas y jóvenes participantes, de poner en práctica estos juegos tradicionales interculturales cuyas reglas descubrieron mediante su desarrollo, aprendiendo guiados por los monitores al mando de la actividad. Durante el evento se contó con ciudadanos y ciudadanas procedentes de Marruecos, Bolivia o Ecuador que introdujeron juegos propios de sus diferentes culturas.
La experiencia ha permitido que un grupo de población tan heterogéneo, conformado por niños, niñas, jóvenes, adultos, mayores y personas procedentes de distintos países, se divierta compartiendo una amplia batería de juegos que han formado parte de nuestra cultura y de la de personas con otras nacionalidades residentes hoy la localidad. En este sentido, el juego se convierte en un recurso educativo de primera magnitud en el que toda la sociedad debe implicarse.
Entre las actividades desarrolladas se celebraron talleres de chapas y de Maricotas. Y como juegos populares y tradicionales se disfrutó con la Froud, procedente de Marruecos, el matapollos, típico de Bolivia y Ecuador, el billar holandés, las canicas, el trompo, la goma, la comba, el truque, el tirachinas, carreras de sacos, el aro, los boliches, las chapas, o juegos de corro como “al agua al pez”, “culás y culás”, y “Pepes y Pepas.
Se instaló también un stand de la Biblioteca Municipal en la Plaza de España, consistente en un carro con libros creativos y cuentos tradicionales, además de un castillo hinchable, aportado por la asociación Salta, y los elementos necesarios para convertir la plaza en una cancha de balonmano donde se disputaron encuentros entre equipos de las Escuelas Deportivas de la localidad, pertenecientes a esta disciplina.
