Juan Díaz-Benito.- CD MARCHAMALO:
Rafa, Héctor, Illana, De la Plata, Pajares, Miguel Pérez, Palencia, Mario (Dani, min. 85), Javi Hernández (Bata, min. 58), Rafa Espada y Manolo (Isma, min. 82).
MANZANARES FC:
Rodri, Edu Olivares (Santana, min. 47), Carlos Olivares, Pirro, Juampe, Saavedra (Santi Baras, min. 66), Sevilla, Josema (Carlos Arroyo, min. 47), Moraga, José Carlos y Villar.
ÁRBITRO
Mora Correas
auxiliado en las bandas por Camacho Peral y Rubén Moreno. Amonestó a Illana y Miguel Pérez, por los locales, y a Sevilla, Josema, Carlos Olivares, Pirri y Santi Baras, por los visitantes.
GOLES
1-0.
Min. 13: Héctor. 2-0. Min. 16: Saavedra, en propia puerta. 3-0. Min. 62: Miguel Pérez. 3-1. Min. 63: Sevilla.
INCIDENCIAS
Partido correspondiente a la octava jornada de Tercera División (Grupo XVIII) disputado en La Solana ante 400 espectadores.
Los cohetes resonaron a la conclusión del partido. La fiesta comenzaba: Marchamalo abriría los informativos deportivos de la región. Su equipo de fútbol se colocaba por primera vez en su historia como líder de la Tercera División castellano-manchega. Un hito para un equipo modesto como los gallardos y para una localidad menos de 10.000 habitantes. Un logro impensable apenas unos meses atrás, cuando el cuadro marchamalero disputaba con orgullo la Preferente.
Olvidados de esa temporada en el infierno, ayer tocaba ganar al Manzanares, otrora líder de la categoría, empatado a puntos con el Marchamalo. El partido se planteaba complicado, pero una gran primera parte gallarda impidió que ciudarrealeños hicieran su fútbol. Lo demás se lo pueden imaginar, control absoluto de Miguel Pérez y Palencia en la medular con Rafa Espada y Manolo volviendo locos a los centrales rivales en la punta de ataque. El resultado, dos goles en los primeros 20 minutos. El primero en un córner y tras un rechazo que aprovechó Héctor. El segundo tras una gran jugada verdilla que culminó Saavedra en propia puerta. Si no hubiera sido el jugador manchego, hubiera sido Manolo que venía presto a rematar el centro templado de su socio, Rafa Espada.
Dos tiros desviados de Miguel Pérez fueron el preludio de la reacción visitante. Una reacción que, como viene siendo habitual en La Solana, llegó a balón parado. No en vano, Pirri puso en un grave aprieto a Rafa desde el saque de esquina. El portero reaccionó enviando fortuitamente al palo.
Tras el paso por los vestuarios, Guillermo Alcázar, técnico del Manzanares, necesitaba cambiar la dínamica y revolucionó su equipo. Un minuto después, en el 48, José Carlos, solo en el segundo palo, remataba fuera. Los azulones achucharon y el Marchamalo no pudo hacer otra cosa que recular y esperar la ocasión de sellar la victoria. Sufrió intentandolo, sobre todo cuando Carlos Arroyo se presentó en el área chica y fue incapaz de engatillar ante la salida desesperada de Rafa. Rafa Espada contestó en el área rival y, poco después, Miguel Pérez hacía el tercero tras una gran jugada de Mario. La alegría duró poco, Sevilla volvía a dar incertidumbre al duelo, pero ahí se acabó el Manzanares.