La formación sobre el uso y manejo de los nuevos equipos de protección completa ante casos de ébola adquiridos por el Sescam ya ha comenzado en el Hospital de Ciudad Real. El pasado viernes, en el Centro de Simulaciones del complejo hospitalario se hicieron las primeras pruebas. Según informa el sindicato CSI·F, la formación de los formadores se va a hacer de inmediato y en Castilla-la Mancha, «y al parecer se va a formar a dos personas de cada servicio de Urgencias existente en los hospitales, para que luego estos sanitarios ya formados transmitan su formación a otros».
Así ha sido transmitido a los responsables del sindicato por altos responsables del Sescam y de la Junta de Comunidades para recibir información sobre los nuevos protocolos a aplicar en la sanidad regional ante el virus del ébola y exigir que se informe y se forme adecuadamente a los trabajadores sobre el brote de esta enfermedad y poder abordarla con la mayor seguridad posible para pacientes y trabajadores.
CSI·F ha exigido, además de información veraz, transparencia y coordinación con los representantes de los trabajadores, y dada la alarma generada entre los profesionales sanitarios del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha por el caso de infección por el virus del ébola en Madrid, ha solicitado información de los nuevos procedimientos que se están llevando a cabo frente a los posibles casos sospechosos y confirmados de ébola y la convocatoria urgente del Comité Regional de Seguridad y Salud de la JCCM.
1.500 equipos de protección
En esta reunión, se informó a CSI·F de que el Sescan ha adquirido 1.500 equipos de protección completa, para el personal sanitario que pueda tener mayor riesgo y contacto con posibles enfermos de ébola, como médicos y personal de Urgencias, de Medicina Interna, laboratorios o personal de Traslados en ambulancia de potenciales afectados, entre otros.
En la reunión celebrada en Toledo, además de los máximos responsables del sector de sanidad de CSI·F Castilla-La Mancha y del Sescam, asistieron el Gerente del Servicio de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha y el Coordinador Regional de Prevención de Riesgos Laborales de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que demostraron sensibilidad en relación a las peticiones de CSI·F y reconocieron “que se podían haber hecho las cosas un poco mejor desde el principio, en relación a la información y formación de los trabajadores, pero que el nivel de seguridad era el propio y adecuado para ese momento, en el cual aún no se había producido ningún caso de infección por el virus del ébola en España”.
Tres casos sospechosos en Castilla-La Mancha
Asimismo, CSI·F puso en conocimiento de las autoridades sanitarias de la región la creciente preocupación que este tema está teniendo entre todos los trabajadores de la sanidad y, específicamente, entre los trabajadores de las Urgencias de los hospitales y de los centros de salud, que se han visto afectados por los tres casos sospechosos detectados en nuestra comunidad autónoma, dos en la provincia de Toledo y uno en Guadalajara.
Desde que el pasado mes de agosto, en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que el brote de Ébola en África Occidental constituía una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional, no ha dejado de crecer la preocupación entre los trabajadores de la sanidad pública en Castilla-La Mancha, la cual se ha visto acrecentada por el caso declarado en Madrid, y el sindicato CSI·F ve con suma preocupación la información que se está dando a los trabajadores en los temas relacionados con la prevención de riesgos laborales derivados del virus del Ébola y la diversidad en los documentos que se han estado enviando a los centros de salud y hospitales por parte de las distintas gerencias sanitarias.
En este sentido, en la reunión mantenida con las autoridades sanitarias se ha proporcionado información exhaustiva en todo lo referente a los nuevos protocolos que se quieren implementar, una vez que se ha declarado un caso de infección secundaria por el virus del Ébola en Madrid.
Mejorar la prevención
CSI·F quiere recordar que tanto las autoridades sanitarias como los representantes de los trabajadores tienen la obligación de velar por la seguridad e higiene en el trabajo e implementar medidas preventivas ante procesos potencialmente peligrosos, para garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores, y que solo con información transparente y veraz por parte de la administración sanitaria podrán los representantes de los trabajadores cumplir sus nuestros cometidos.
Igualmente, CSI·F recuerda a las autoridades sanitarias de nuestra comunidad autónoma que la participación de los trabajadores, a través de sus representantes sindicales, en la planificación, programación, organización y control de la gestión relacionada con la mejora de las condiciones de trabajo y la protección de la seguridad y salud de los trabajadores en el trabajo, es un principio básico de la política de prevención de riesgos laborales que tiene que desarrollar la administración sanitaria y que se tienen que adoptar las medidas adecuadas para que los trabajadores reciban todas las informaciones necesarias en relación con los riesgos para la seguridad y la salud y sobre las medidas y actividades de protección y prevención aplicables en relación a la infección por el virus del Ébola.
Asimismo, CSI·F ha trasmitido a los responsables del Sescam que puede aportar conocimiento y colaboración, a través de los Delegados de Prevención, sobre las medidas a desarrollar en relación a una emergencia de salud pública, como ha sido calificado el brote de enfermedad por el virus del Ébola.
Tranquilidad y colaboración
CSI-F quiere resaltar el alto grado de profesionalidad, colaboración y dedicación que los trabajadores de la sanidad de Castilla-la Mancha están teniendo en relación a este tema y quiere trasmitir un mensaje de tranquilidad a la opinión pública y de colaboración con las autoridades sanitarias de nuestra región.
Por último, CSI·F hace un reconocimiento público a todos los profesionales de la sanidad que están colaborando de forma voluntaria en el tratamiento de los pacientes infectados por el virus del Ébola y especialmente a nuestra compañera Técnico Auxiliar de Cuidados de Enfermería del Instituto de Salud Carlos III de Madrid, que está luchando por su vida.