La Junta Local de Gobierno del Ayuntamiento de Puertollano aprobó ayer la licencia de obras para el proyecto de adecuación de la capacidad de producción de la Unidad de Olefinas del Complejo Industrial de Puertollano, que supone una inversión de 30 millones de euros. Según informa la empresa en una nota, «esta inversión se enmarca en el Plan de Competitividad de la Química, que Repsol anunció en septiembre de 2013». Este plan comprende una serie de medidas para «mejorar la competitividad del negocio químico, apostando por la química en un entorno de crisis económica, adaptándose a la realidad del mercado y a la demanda prevista para la próxima década».
Según la compañía, «dentro del programa de inversiones se realizará una adecuación de la capacidad de producción de la planta de Olefinas (cracker de etileno) para el suministro a las plantas de EVA y Polietileno Baja Densidad (PEBD)».
«El objetivo de esta inversión es aumentar la eficiencia energética de la unidad y su adecuación para la utilización de materias primas más competitivas, lo que supondrá una reducción de costes operativos y una mayor generación de margen», explica. El proyecto de inversión contempla la modificación de los componentes internos de dos turbocompresores y la sustitución de un tercero, buscando que sean energéticamente más eficientes, mejoras en ocho torres de destilación, sustitución de bombas y renovación de diversos equipos y sistemas. Estas actuaciones se realizarán en el primer trimestre de 2015, coincidiendo con la parada plurianual programada del cracker.
Dentro del Plan de Competitividad de la Química, asegura la empresa, se potenciará la producción de resinas EVA, un producto de alta especialización y valor añadido, con un incremento en la producción de un 7%. Puertollano es el único centro de la Compañía que produce esta especialidad clave en la gama de Repsol que permite la fabricación de plásticos para invernaderos, placas solares, adhesivos y piezas de alta flexibilidad.
En la unidad de Polipropileno se van a realizar inversiones para avanzar en eficiencia energética y diferenciación de productos, continuando con la investigación para la mejora continua de la gama.
Otra de las licencias aprobadas por la Junta de Gobierno Local ha sido la correspondiente al aumento de la capacidad de eliminación de sulfuro de carbonilo (COS) de la corriente de propileno que alimenta la Unidad de Polipropileno, con un presupuesto de alrededor de medio millón de euros. En la planta de Butadieno se van a poner en marcha inversiones para mejorar los costes de producción y la eficiencia energética. Asimismo, en las unidades de Polioles se realizarán inversiones para continuar el desarrollo de diversas gamas, se investigará en la diferenciación de nuevos productos en la planta piloto y se avanzará en medidas de eficiencia energética.
Repsol ha impulsado estas medidas de futuro «para afrontar la competitividad del negocio químico, un sector fuertemente afectado por la crisis económica».
