A mediados del siglo XX Ciudad Real está definida por la presencia de la Ronda de circunvalación. Fuera de ese perímetro han ido surgiendo grupos de viviendas que hemos comentado anteriormente. Fuera de la ciudad la zona de La Granja aparece como un terreno común ordenado para las explotaciones agrarias del momento.
En una parcela delimitada actualmente por las calles Argentina y Méjico al Este y al Oeste y por la carretera de Piedrabuena en el Sur, con cerca de 80.000 metros cuadrados, surgirá una nueva zona de viviendas de promoción pública en la ciudad.
Tres proyectos diferentes de viviendas se desarrollan en esta zona. Uno de ellos es diseñado por el arquitecto Miguel Fisac y terminado en 1989. Manzanas que tienen doce, once bloques de viviendas o quince en la situada más al Norte. A partir de la definición de un módulo que tiene dos viviendas por planta con tres alturas organiza una estructura que tiene su mayor atractivo en la forma sencilla de su organización general. Los bloques de viviendas se organizan cerrando pequeños espacios entre ellos estableciendo así una escala menor en el conjunto general. En cada una de las manzanas se crean a su vez dos pequeñas zonas que se relacionan visualmente a través de los bloques de viviendas pero acotan espacios interiores más domésticos y controlados. En algunos casos como ocurre con los bloques de las calles Perú, Méjico y Puerto Rico gira los elementos para romper las visiones lineales de la perspectiva y establecer espacios de una escala más próxima a lo residencial.
Los edificios de tres plantas se realizan en ladrillo tosco visto con elementos singulares en los petos de las terrazas curvados o en los elementos puntuales de los accesos a cada uno de los núcleos de escaleras. Un proceso administrativo complejo y problemático llevó a un final desafortunado en el que desaparecieron los hormigones flexibles que Fisac tenía proyectado para estas zonas. Probablemente cuando utiliza este elemento como elemento parcial del conjunto es cuando obtiene los mejores resultados frente al uso masivo de esta solución en edificios más próximos al feísmo constructivo.
El Ayuntamiento de Ciudad Real realizó, en su momento algunas mejoras en las urbanizaciones del interior del conjunto que dadas las pendientes y las soluciones de plantas bajas necesitan actuaciones de mejora que acaben de acondicionar los servicios comunes de este conjunto de 300 viviendas. Algo parecido ocurre en el grupo de viviendas concebidas con un carácter de bloque lineal continuo, realizados en ladrillo sical blanco, en posición paralela a la calle Argentina y Brasil que dejan en su interior espacios que podían tener soluciones de equipamiento que enriquecerían y valorarían las viviendas.
En el centro del conjunto dos cuadrados de 750 metros cada uno de ellos donde los arquitectos Bernalte León y Bernalte Bernardo proyectaron un conjunto de 36 viviendas que plantean soluciones constructivas atractivas con una doble cubierta superior y un zócalo que quiere crear un movimiento de aire en el interior del edificio para mejorar su comportamiento térmico. Las soluciones de balcones, las proporciones de huecos y la presencia del remate de cubierta son elementos atractivos en la solución de las viviendas. Es la última aportación, ya en 1994, al conjunto de esta zona.
El barrio se diseñó con un concepto generoso de espacios para equipamientos y en su manzana central se localizan el Centro Social del Barrio, zonas de equipamiento deportivo, un Centro de Atención a la Infancia y el Colegio Público Cristobal Colón. Un espacio entre las calles Brasil y Perú, en el centro del conjunto de viviendas. Ahora en la zona de borde del barrio, se acaba de construir la parroquia de San Juan Bautista completando los servicios de la zona. En su zona Oeste, el recinto ferial con el Auditorio y los espacios libres que generan una actividad molesta en diferentes épocas del año para los vecinos de la zona.
Una zona que sufre, como muchos barrios de la ciudad, una situación social grave con los problemas de paro y los recortes de ayudas sociales. Un espacio que requiere actuaciones municipales en su urbanismo y sus equipamientos que pueden mejorar sus condiciones de forma sencilla, pero que, sobre todo, requiere esfuerzos de atención para mejorar las condiciones laborales y sociales de sus vecinos, que desarrollan una intensa actividad común en beneficio de su barrio.
Espacios
Diego Peris Sánchez
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