Juan Díaz-Benito.- El Manzanares está a la espera de poder cerrar su plantilla una vez confirme la esperada renovación de Pirri y tres refuerzos que están apalabrados, pero que serán oficiales sólo cuando sus clubes de procedencia les paguen lo que les deben. Y es este aspecto económico el que tiene enfadado al entrenador manzanareño, Guillermo Alcázar, que no entiende como todos estos clubes que acaban con deudas gonzan de inmunidad a efectos federativos.
En declaraciones a este medio, Alcázar ha señalado que «nosotros hacemos números hasta el céntimo para pagar todo lo acordado, mientras hay otros clubes que acaban la liga debiendo mucho dinero. Eso desvirtúa la competición. Así se pueden jugar play-offs si luego no se paga».
Y puso como ejemplo al Gimnástico de hace algunas temporadas, que descendió después de quitarse de encima una importante deuda «mientras otros estaban endeudados y jugando la fase de ascenso», precisó.
Para el preparador manzanareño la solución sería «exigir avales en función del presupuesto que cada uno tenga».
Respecto al comentario general en los mentideros de que el Manzanares puede ser esta temporada el equipo revelación, Guillermo Alcázar templa los ánimos al indicar que «tenemos casi el mismo equipo que el año pasado, aunque los fichajes que faltan nos podrían dar si se confirman un importante salto de calidad. El objetivo sigue siendo mantener la categoría sin agobios».