El alcalde de Alcázar de San Juan, Diego Ortega, participó este domingo en la tradicional procesión de la festividad del Corpus Christi, que salió de la Parroquia de Santa María La Mayor hacia la Parroquia de Santa Quiteria.
Numerosos niños que han hecho este año la Primera Comunión abrían el cortejo en el que participaron representaciones de todas las hermandades de Alcázar con sus estandartes corporativos. Tras ellos iba un grupo de ciudadanos que quisieron acompañar al Santísimo y finalmente, tras una pareja de faroles, venía la Custodia bajo palio.
Varios sacerdotes se fueron turnando portando la Custodia por las calles, como así lo hicieron los vecinos que, de seis en seis, sostenían los varales del palio de respeto. Ante cada uno de los altares que se instalaron durante el recorrido, como el de la puerta del Convento de las Hermanas de la Cruz o el de la Hermandad de la Buena Muerte en el Altozano de la Inmaculada, la procesión se detenía y se rezaban diversas oraciones.
Tras el Santísimo, iba la Asociación Banda de Música de Alcázar de San Juan, que recibió a la Custodia en la Plaza de Santa María con “Cantemos al amor de los amores”, a la que siguieron numerosas composiciones, la mayoría de ellas cantos litúrgicos adaptados para banda.
A lo largo del recorrido, hubo varias calles en las que se dispusieron alfombras realizadas con sales de colores, otras con romero y hierbabuena, y otras con motivos eucarísticos directamente pintados en el pavimento. Desde la Plaza de Santa María, la procesión siguió por Reyes Católicos, Plaza de San José, San Juan, Plaza Cervantes, Mediodía, Cautivo, Altozano de la Inmaculada, San Francisco, Plaza de España y Plaza de Santa Quiteria, que se adornó con alfombras, plantas y colgaduras. Una vez dentro del templo, tuvo lugar una misa.