Daimiel Noticias.- Con el lema “Hay Esperanza” se ha llevado a cabo esta celebración a la que han acudido más de 400 personas durante la mañana, un número que ha ido aumentando a lo largo de la jornada. Una cita que ha contado con la presencia del presidente de CECLAM (Consejo Evangélico de Castilla-La Mancha) Evelio Moreno, de José Luis Navajo, conferenciante y pastor de la madrileña Iglesia Evangélica ‘El Buen Pastor’, y del alcalde de Daimiel Leopoldo Sierra.
Este último, ha tenido unas palabras para la comunidad evangélica en las que ha destacado que “Daimiel es un pueblo hospitalario, abierto a todo tipo de culturas, creencias y sentimientos por lo que os damos la bienvenida y os invitamos a volver a visitarnos”.
Sierra también ha querido felicitar al presidente del Consejo Evangélico y a Ruper Ortega, miembro de la iglesia evangélica en Daimiel, “por la organización de este evento que ha movilizado a casi medio millar de personas con un variado programa de actividades, que se ajustan a las creencias de la Iglesia Evangélica”. Para terminar su intervención, Sierra ha subrayado que “Daimiel es una ciudad para la esperanza y que poco a poco va a dar respuesta a esa crisis económica y de valores que hoy se plantean en esta jornada. A su vez, les invito a disfrutar de una ciudad con dos referentes turísticos: el Parque Nacional de Las Tablas y el yacimiento arqueológico de La Motilla del Azuer, animándoles a que los conozcan, si no es hoy en otra ocasión, al igual que conozcan la ciudad, sus calles, edificios, cultura y gentes”, concluía el alcalde de Daimiel que agradecía de nuevo al CECLAM el haber elegido la localidad Daimieleña como sede para este encuentro.
Una jornada que comenzaba en torno a las 12:00 horas con una proyección de un vídeo, en el que se hacía una reflexión sobre la situación actual de crisis de valores y de moralidad que se está viviendo. A continuación, el presidente de CECLAM ha tenido unas palabras de bienvenida y de oración en las que el mensaje principal que ha lanzado ha sido que “hay esperanza, una esperanza que está y reside en nuestro Señor Jesucristo”. Después ha continuado con la lectura del Salmo 133, del que ha destacado “la importancia de vivir en armonía todos juntos, tal y como lo vamos a hacer hoy”. Por último, también ha agradecido al ayuntamiento de Daimiel que les haya otorgado el lugar para reunirse, además del trabajo de todos los colaboradores que han puesto su granito de arena para que el evento haya sido posible.
Durante todo el día se está desarrollando un amplio programa con una serie de actividades en el que no faltarán ni la música ni el teatro. En concreto, el grupo musical de alabanza de la Iglesia Evangélica de Ciudad Real ha inaugurado la jornada con varias canciones con el acompañamiento de voces y palmas de la comunidad. A su vez, en el salón de actos los más pequeños disfrutaban de una obra teatral y de otras actividades a cargo de la Iglesia Evangélica de Albacete y del grupo de teatro ‘Vida Xtrem’. Tras la actuación musical se ha conocido el testimonio de Félix y Carmen, un matrimonio creyente que ha contado sus experiencias personales para mostrar al público, según sus palabras, que “lo importante en la vida de una persona es la propia vida, el regalo de vivir y no lo material”. Un matrimonio que ha sufrido la pérdida de un hijo y de su casa y que “a pesar de ello y gracias a la fe nos hemos mantenido y lo seguiremos haciendo”, como así afirmaba Félix.
Tras este testimonio, Navajo subía al escenario para realizar su reflexión. En primer lugar ha destacado la buena organización del evento, agradeciendo al matrimonio el haber revelado su testimonio. En este punto el pastor y conferenciante ha lanzado una de su primeras premisas “en la vida hay cosas que son buenas, luego están las importantes y después las que nos importan”. Después ha continuado su reflexión afirmando que “el dinero puede comprar una casa, pero no un hogar; puede comprar medicinas, pero no la salud; puede comprar un libro, pero no la sabiduría” pero sobre todo ha recalcado las palabras que un buen amigo le dijo hace tiempo “quien pierde dinero, pierde mucho, quien pierde un amigo, pierde más; pero quien pierde la fe, lo pierde todo”. Así se ha desarrollado su primera conferencia del día, de unos 50 minutos aproximadamente, ya que durante la tarde Navajo ha vuelto a subirse al escenario para continuar con su reflexión.
Una jornada que se ha extendido hasta las 19:00 horas y en la que los allí presentes también han podido disfrutar de varios stands con diferentes artículos a la venta para colaborar con diferentes causas solidarias.
