Grupo Municipal Socialista, Ayuntamiento de Ciudad Real.- ¡Que lástima que no todos los años sean “años preelectorales”!, deben estar pensando los vecinos y vecinas de nuestra capital.
Concretamente, lo han de pensar los vecinos y vecinas del barrio de Los Rosales, al comprobar en los medios de comunicación el anuncio de nuestra Alcaldesa, Doña Rosa Romero, de las novedades que afectan al eterno proyecto de construcción del Centro Cívico de dicha zona.
Según parece, el proyecto se encuentra en la fase de presentación de ofertas para su construcción, por lo que aún merece estar precedido de adjetivos como “futuro” o “próximo”.
Decimos esto porque este proyecto, que bien podría competir en plazos con la ejecución de la famosa obra del Escorial, inicia su andadura por el año 2008, cuando en el mes de Febrero la entonces también Concejala del área de Bienestar Social, Amparo Messía de la Cerda, ya hablaba de 300.000 € que se iban a destinar a tal efecto, y posteriormente, en marzo de ese mismo año, la Señora Romero se sentaba a presentar el proyecto a los representantes de la Asociación de Vecinos del barrio, es decir, igual que ahora.
Desde 2008 hasta el día de la fecha, anuncios y más anuncios, y promesas y más promesas se han ido sucediendo en el tiempo, convirtiendo este Centro Cívico en “oscuro objeto de deseo” para los desesperados vecinos, que deben estar, para con esta obra, mas mosqueados que un pavo por navidad.
Nuestra Alcaldesa ha sufrido una transformado en los últimos meses, pasando de ser aquella que solo encontraba fondos para embellecer rotondas, a “la Alcaldesa de las promesas” para antes del 2015.
Promete un Plan de Apoyo al Comercio Local durante la inauguración de la pasada Feria del Stock. Feria que, por cierto, los comerciantes tienen que realizar dada la dramática situación que padecen por las nefastas medidas de promoción y apoyo que han venido recibiendo del Ayuntamiento, y que les ha condenado al cierre sistemático de sus establecimientos.
Promete Planes de Empleo con el dinero de otras Instituciones, fundamentalmente de la Diputación Provincial y de la Junta de Comunidades, ya que el Ayuntamiento destina únicamente 120.000 € de fondos propios a tal efecto: casi lo mismo que han costado algunas de las rotondas antes mencionadas. Mientras tanto, más de 8.500 personas siguen sin encontrar trabajo en Ciudad Real.
Promete un Plan Integral de Mejora en los Barrios, mientras que la inversión en los tres últimos años para esta partida en los presupuestos municipales ha sido cero, y las pocas obras de mejora que se han realizado, con el dinero fundamentalmente de la Diputación Provincial, se han aglutinado en el centro de nuestra capital, desatendiendo las necesidades de los barrios de la periferia y de las pedanías, en un claro ejemplo de cómo gobernar sin contar con la participación ciudadana.
Promesas, promesas y más promesas, que coinciden con un momento más que oportuno, teniendo siempre presente que en mayo de 2015, Rosa Romero y su equipo de gobierno necesitan el apoyo de la ciudadanía para mantener el gobierno de esta ciudad; gobierno en el que llevan instalados más de 16 años, en los que bien les habría dado tiempo a solucionar estas cuestiones fundamentales.
Si algo saben los vecinos y vecinas de Ciudad Real es que “las promesas se las lleva el viento”, que “no es lo mismo predicar que dar trigo”, y que “obras son amores, y no buenas razones”, y de esta forma, han de analizar la falta de trabajo de este gobierno en cuatro legislaturas, para no caer en la trampa de la estrategia marcada a base de promesas de última hora.