Jesús Manuel Ruiz Ormeño. Responsable de Acción Política UPyD CLM.- A menudo me preguntan amigos y allegados porque confiar su voto en UPyD, mi respuesta, antes de entrar a describir lo que nosotros defendemos, es muy clara, “votad lo que queráis, pero votad en positivo”. Considero que el ejercicio del derecho de voto es muy personal y a la vez un derecho muy valioso que no debemos desaprovechar, de hecho, es el único momento en los sistemas de democracia representativa, como es el nuestro, en que nuestra opinión como ciudadanos tiene verdadera trascendencia, por eso precisamente es tan importante el sentido que le demos al mismo.
En numerosas ocasiones, los ciudadanos utilizamos nuestro voto, no para elegir a la opción que más se aproxima a lo que pensamos, sino para que no salga vencedora la formación que es más contraria a nuestra ideología o con la que por diversos motivos tenemos cuentas pendientes, es decir, más como un voto de castigo que un voto convencido o en positivo.
Tampoco debemos ser ajenos, que este comportamiento es debido, en gran parte, al bombardeo incesante que sobre la ciudadanía hacen los “partidos viejos”, PP y PSOE, para los que votar a otras formaciones “es un voto perdido o inútil” (a lo que contribuyen sin duda las actuales leyes electorales), o lo que es más grave, que optar por partidos políticos, hasta ahora minoritarios, puede desestabilizar nuestro sistema político.
Argumentos, que aparte de poco democráticos, carecen de cualquier fundamentación real, pues la estabilidad que ambos propugnan no es sino buscar la alternancia en el poder para que las cosas importantes nunca cambien, o incluso, si vinieran mal dadas para ambos, coaligarse amparándose en que es lo mejor para el interés general.
En apenas quince días afrontamos los ciudadanos españoles una nueva cita electoral, como son las elecciones al Parlamento Europeo, que desde los partidos mayoritarios se están desarrollando no en clave europea, sino nacional. Así el PP, las afronta como un plebiscito que signifique la aprobación a las políticas que han aplicado los dos últimos años, mientras que el PSOE las considera como la oportunidad de mostrar un rechazo a las políticas conservadoras del Partido Popular. Frente a ello, otros, como es el caso de UPyD, hablamos de Europa y de la máxima importancia que tendrá el resultado de estas elecciones en nuestra vida diaria.
Es por ello, que frente a la bipolarización de la campaña que quieren hacer PP y PSOE, como si de un combate de boxeo a dos se tratara, otros no entramos en ese juego e intentamos generar en los ciudadanos un verdadero interés por estas elecciones, haciéndoles ver lo que de veras nos jugamos, para lo que les explicamos nuestras propuestas, entre las que se encuentran, conseguir una Constitución política federal para la Unión, dotar de plena iniciativa legislativa al Parlamento europeo y que éste tenga una sede única que acabe con el dispendio actual de las tres sedes, lograr que la Comisión Europea sea un verdadero ejecutivo de la Unión, o instaurar una Fiscalía europea que luche contra el fraude.
Quiero terminar diciendo que en UPyD creemos firmemente que el bipartidismo dominante hasta ahora en nuestro país hace mucho tiempo que no funciona, y que además el principio de su fin tendría una solución fácil, como es que muchos ciudadanos se “den el gusto” de votar a la formación que más coincide con su forma de pensar, y que no voten con resignación a aquéllos que les parezcan “menos malos”, aunque estén convencidos de que no lo van a hacer bien. Las elecciones del día 25 de mayo pueden ser una oportunidad histórica para todos aquellos que quieren que en España y en Europa comiencen de verdad a cambiar las cosas.