Con una milonga callejera – una reunión de tangueros -y una comida de despedida en el bar Los Faroles, concluía el cuarto Encuentro nacional de la asociación Malevaje Tango Ciudad Real, un evento en el que, a lo largo del fin de semana, aficionados a este baile han intercambiado pasos y experiencias, además de asistir a clases y exhibiciones.
Los explicaba a miciudadreal.es Manuel López Lendínez, presidente de la asociación Malevaje Tango Ciudad Real, «una Milonga es un encuentro de tangueros en el que se juntan para bailar tango, en la calle o en un salón. Tiene más sentido en la calle porque el tango nació en la calle; tiene más sabor y se disfruta más». La finalidad de esta reunión, decía, «es bailar y que venga gente a verlo».
Esta actividad se enmarca dentro del cuarto Encuentro nacional organizado por la asociación a lo largo de un fin de semana en el que, «además de está milonga, se han celebrado otras muchas porque el objetivo, al fin y al cabo, es bailar». López Lendínez comentaba que, además, en estas jornadas se han celebrado clases y una exhibición llevada a cabo por una pareja invitada. «Cada año cambiamos, y en esta ocasión nos han acompañado Claudio y Vito, dos argentinos residentes en Madrid que se recorren Europa haciendo festivales. Es un lujo que hayamos contado con ellos», señalaba.
La asociación Malevaje Tango Ciudad Real está formada por un grupo de unas treinta personas. «No solo parejas -subrayaba su presidente- porque lo bueno que tiene este baile es que tienes que bailar con distintas parejas. Cada persona es un mundo a la hora de bailar y aprendes más, perfilas mejor la técnica y el estilo y no adquieres vicios cuando bailas con otra gente».
Para todos aquellos que estén interesados en las actividades de esta asociación pueden ponerse en contacto con sus integrantes a través de facebook, el correo electrónico malevaje_asociacion@hotmail.com o participar cada viernes, en las milongas que celebran de 23:00 a 02:00 horas en la Tetería Pachamama. «Para todos aquellos que quieran bailar, escuchar música o contemplar este hermoso arte que es el tango», concluía López Lendínez.
