La intervención del Estado en materia de vivienda no comienza en todos los países en el mismo momento histórico, pero sí tiene unas condiciones sociales y económicas similares. El desarrollo industrial y la concentración de la población en las ciudades, con un deterioro de las condiciones de habitabilidad que afecta a un número importante de personas, están en la base de la actuación del Estado para la construcción de viviendas de obreros.
La legislación española en materia de vivienda pública.
En España, es en 1911 cuando se promulgó la Ley de Casas Baratas. La Gaceta de 4 de junio de 1904 había publicado un proyecto de Ley sobre habitaciones baratas “con el objetivo de utilizar la importante obra legislativa preparada por el Instituto de Reformas Sociales”. La Ley de 12 de junio de 1911 de Casas Baratas fue sustituida y reformada por la Ley de 10 de diciembre de 1921. El papel del Estado o de la Administración del Estado se concretó en las Juntas de Fomento y Mejora compuestas por nueve miembros, uno de los cuales debía ser arquitecto, y que se constituían en todas las localidades donde se fueran a construir viviendas con estas características. Se establece ya el papel del Estado como promotor, las exenciones tributarias durante veinte años, la declaración de utilidad pública para la expropiación y la concesión de préstamos hipotecarios. Los destinatarios de las Casas Baratas son los obreros que perciben emolumentos modestos como remuneración del trabajo. Se crea también un seguro popular de vida y se establece la herencia directa para el cónyuge o los hijos. La Ley de 1921 permite la construcción de estas viviendas por el Estado y también por sociedades o particulares.
Diferentes normativas se van adecuando a las condiciones económicas y políticas del país. En 1933 el valor máximo de una casa barata era de 40.000 pesetas y el de la casa económica 75.000, estando la primera destinada a familias con una renta anual menor de 8.000 pesetas y la segunda una renta menor de 15.000. Es interesante hacer la relación salario-coste de la vivienda para poder comparar con la actualidad. 8.000/ 40.000: 1/5 y 15.000/ 75.000: 1/5 también; es decir la casa valía cinco veces el salario anual de un trabajador. La Ley de 1934 creó el Instituto de Crédito de las Cajas Generales de Ahorro Popular, primer antecedente de los organismos, oficiales de crédito. La aplicación de la Ley del Paro, también llamada Ley Salmón es de junio de 1935. Protegía la industria nacional prohibiendo la contratación de obreros extranjeros y concedía beneficios para la construcción de viviendas, para la ampliación de edificios o el derribo de edificios insalubres.
Al final de la Guerra civil se promulgó la Ley de viviendas protegidas que derogaba toda la legislación anterior creando el organismo del Instituto Nacional de la Vivienda –INV- dependiente del Ministerio de Organización y Acción Sindical. La nueva ley ya no habla de casa, sino de vivienda y las viviendas protegidas serán aquellas que tengan una renta reducida que pueda ser sufragada por las familias con menores recursos. La labor del INV es de gestión administrativa y financiera, pero la construcción la deben realizar las entidades y organismos estatales, oficiales y corporativos sin ánimo de lucro o aquellos que lo tengan, pero dediquen un porcentaje de las viviendas construidas a la renta reducida. El INV redacta el Plan General de la Vivienda, el primero de ellos de 1943 y un segundo que abarcará la década 1944-1954.
El régimen de viviendas protegidas quedó derogado por la Ley de 24 de julio de 1954 de viviendas de renta limitada y tuvo un especial desarrollo en este periodo de postguerra entre los años 1955-1960 con una media de 30.000 viviendas terminadas al año. En 1944 surge la Ley de viviendas bonificables o viviendas de clase media que inicialmente se destinaron sólo al arrendamiento. Son viviendas sin ayuda directa del Estado, pero que tienen exenciones tributarias y préstamos de las Instituciones de Previsión y Ahorro. El Decreto Ley de 1948 intenta incentivar las viviendas bonificables en España. Es la época de la escasez de materiales y se establecen los sistemas de cupos preferentes de cemento hierro y cerámica.
La actividad constructora en Ciudad Real.
Los datos que aporta Félix Pillet en su Geografía urbana de Ciudad Real, extraídos de los Archivos Municipales nos dan una idea de la actividad constructora en Ciudad Real en estas décadas tanto de licencias de viviendas concedidas como de mejora de viviendas:
LICENCIAS VIVIENDAS | ||||||||
AÑO | 1947 | 1948 | 1949 | 1950 | 1951 | 1952 | 1953 | 1954 |
LICENCIAS | 17 | 10 | 26 | 19 | 14 | 33 | 34 | 30 |
MEJORA DE VIVIENDAS | ||||
1937-1941 | 1942-1946 | 1947-1951 | 1952-1955 | |
EDIFICIOS | 5 | 26 | 10 | 7 |
VIVIENDAS | 15 | 50 | 13 | 17 |
En este contexto la actuación de la Administración es especialmente relevante y se concreta, en Ciudad Real capital, en cinco proyectos significativos destinados a funcionarios de diferentes administraciones.
Grupos promovidos por la Diputación provincial y el Ayuntamiento.
En Ciudad Real la promoción de vivienda pública viene directamente desde las diferentes administraciones. La Diputación Provincial promueve dos grupos de viviendas en solares de su propiedad. El grupo José Antonio en la esquina de las calles Audiencia y Calatrava se inicia en 1943 y se termina en 1946, al igual que el grupo Francisco Franco en la calle Ruiz Morote, en los terrenos donde había estado la Escuela Normal.
Dos proyectos que resuelven las grandes dimensiones del solar creando un espacio interior, que en la calle Ruiz Morote se abre a la calle, conformando así espacios públicos interiores que permiten resolver las condiciones de iluminación y ventilación de las viviendas de forma adecuada. Un cuerpo central que define la fachada a la calle Ruiz Morote deja a ambos lados dos accesos a dos grandes espacios internos a los que se abren las viviendas. Una diferenciación entre la planta baja, que sirve de zócalo, dos alturas de las plantas primera y segunda y un remate superior de la cuarta planta. Proyectos de 54 viviendas para funcionarios de la institución que se mantienen en la actualidad, con una sobriedad surgida desde las premisas económicas, pero que sirven de referentes formales hasta la actualidad.
El Ayuntamiento promovió también un grupo de 26 viviendas para sus empleados en la calle de la Mata número 6 que han desaparecido, sustituidas por una nueva construcción.
La casa cuartel de la Guardia civil y las viviendas de militares.
En 1946 se construyó, en la calle Pedrera, la Casa cuartel de la Guardia civil que daba acogida a las necesidades del colectivo y a la residencia de 129 viviendas. Un edificio que se abre a las calles Pedrera Baja, Pedrera Alta y Esperanza y en el que los recursos formales historicistas se hacen presentes con las formas de arcos de herradura en los huecos de las terrazas o en el cuerpo de acceso a los espacios interiores del conjunto. Un proyecto promovido por el INV sobre un solar de 6940 metros cuadrados en el que construye 16.200 metros cuadrados. Un edificio de cinco plantas que se asoma a tres calles: Pedrera Baja, Pedrera Alta y Esperanza.
Para atender al colectivo de sus usuarios en 1944 se construyen 24 viviendas para oficiales y suboficiales promovidas por el Patronato de Casas Militares.
Grupo Vicente Galiana.
Con otras características diferentes se proyectó el Grupo Vicente Galiana, un conjunto de viviendas unifamiliares de dos plantas con una pequeña zona libre en su parte delantera. Viviendas de construcción sencilla y con una imagen de arquitectura popular que crean una pequeña ciudad en el interior de la misma.
El diario Lanza de 24 de febrero de 1944 informaba de que vencidas todas las dificultades se empezarían a construir las viviendas del Grupo Vicente Galiana en la calle Nocedal. Ese mismo diario informaba, en titulares, de la construcción de la Casa de la Falange y del edificio para la Delegación de Sindicatos.
En mayo de 1947 Federico Mayo, director general del INV, visitaba Ciudad Real, las obras de viviendas de la Diputación y las del grupo Jacobo Roldán así como las del grupo Vicente Galiana (que aún no habían comenzado). En febrero de 1953 el diario Lanza (20.2.1953) informaba de que ya había comenzado el acopio de materiales para las obras. Los usuarios habrán de pagar el 10% a la entrega y el resto en un plazo de cuarenta años, periodo en el que llegarán a ser propietarios,
La Vanguardia Española en su número del 20 de enero de 1955 daba la noticia: “Esta tarde se han entregado las llaves de 36 viviendas que constituyen el Grupo Vicente Galiana cuyo nombre ha sido dado en recuerdo de uno de los primeros jefes provinciales de la Falange manchega caídos por Dios y por España. Estas viviendas han sido construidas por la Obra Sindical del Hogar. Al acto asistieron el gobernador civil, el delegado provincial de Sindicatos y otras jerarquías provinciales”. Casi once años desde el anuncio de su construcción a su finalización.
Viviendas de dos plantas con una pequeña zona ajardinada y con una imagen más próxima a la arquitectura popular que en su ordenación urbana crean una pequeña ciudad en el interior. Balcones en su planta superior y ventanas con rejas de gran sencillez en la planta baja con fachadas blancas y cubiertas de teja árabe.
Una década con una construcción de viviendas muy reducida, limitada a las promovidas por la propia administración para sus funcionarios. Viviendas que en su sobriedad y en las limitaciones de un momento económico difícil, han pervivido, en su mayoría, con adecuaciones lógicas dadas por la evolución de las condiciones económicas y sociales.
El proyecto impulsado por el Gobernador Jacobo Roldán continuará en la próxima década y lo comentaremos más detenidamente adelante.
Espacios
Diego Peris Sánchez