Daimiel Noticias.- El arqueólogo de La Motilla, Miguel Torres, calificaba el hecho de que se agotaran en tiempo record las plazas disponibles para las visitas, como el «el primer gran éxito» de esta iniciativa, ya que «refleja las ganas de los daimieleños por conocer nuestro patrimonio».
Este fin de semana continúan las jornadas de puertas abiertas al yacimiento arqueológico de la Motilla del Azuer, unas jornadas que se van a extender hasta el próximo fin de semana y cuya demanda agotaba en tiempo record las plazas disponibles. El arqueólogo de La Motilla, Miguel Torres, calificaba este dato como el «el primer gran éxito» de esta iniciativa, ya que «refleja las ganas de los daimieleños por conocer nuestro patrimonio».
Según explica Torres, la gran mayoría de los visitantes expresan su curiosidad, sobre todo, por los detalles de su construcción y por su fin, el almacenamiento de productos. El pozo interior, el más antiguo conocido de la Península Ibérica, es otro de los platos fuertes de la visita.
Para aclarar todos los detalles previamente y poner en antecedentes a los visitantes sobre lo que van a ver, la visita comienza con una primera contextualización del yacimiento en su tiempo, la Edad del Bronce, y, de forma más concreta, en la Cultura de las Motillas. También se explica a los visitantes los trabajos arqueológicos y de restauración llevados a cabo en las distintas campañas de actuación llevadas a cabo.
Seguidamente comienza la visita in situ desde la parte exterior, que corresponde al poblado y la necrópolis, para pasar seguidamente al interior del recinto fortificado, subir a la torre, y continuar después hasta el pozo. Según explica Torres, en esta parte del recorrido queda patente «la capacidad demostrada por los habitantes de las motillas hace 4.000 años para llevar a cabo la construcción de esta fortificación sobreponiéndose a las limitaciones técnicas de la época».
Pero es el pozo, como afirma Torres, el que, «dentro de todo el conjunto, llama la atención del público». Un ejemplo de «la complejidad de la arquitectura de La Motilla», que, sin embargo, «el nivel del agua actual no deja admirar en toda su extensión». El arqueólogo hacía especial hincapié en señalar que «se construyó sin la utilización de grúas, andamios o las modernas herramientas actuales, que, incluso a día de hoy, tendrían dificultades en llevar a cabo la excavación de más de 20 metros de profundidad realizada por los habitantes de La Motilla, que incluso tuvieron que perforar capas subterráneas de roca caliza».
La visita termina con un paso por el Centro de Visitantes, donde se ofrece una visión final del yacimiento, de su contexto temporal, y de los trabajos realizados en él, Cabe destacar la espectacular imagen aérea de La Motilla que ocupa una de las paredes del centro.
A mediados del mes de mayo se tiene previsto abrir La Motilla al público en general. Según Torres, la visita será «prácticamente igual» a la de las actuales jornadas de puertas abiertas, si bien, «la lectura previa de la Edad del Bronce y de la Cultura de las Motillas se hará en el Museo Comarcal», desde donde los visitantes se trasladarán en grupo hasta el yacimiento en autobús.